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Llegan a Panamá las primeras cuatro compuertas para la ampliación de canal

Redacción República
20 de agosto, 2013

Las primeras cuatro de dieciséis compuertas para la ampliación del canal de Panamá llegaron este martes al país, constató un periodista de la AFP.

‘Me siento muy contento y honrado que en el día de hoy hayan llegado estas cuatro compuertas que van a cambiar la historia del mundo’, lanzó el presidente panameño Ricardo Martinelli.

El mandatario, acompañado de diferentes autoridades locales y directivos de la vía, fue el encargado de pulsar el botón que dio paso a un ulular de sirenas, dando aviso de la llegada de las compuertas al embarcadero de Mindi, en el nuevo cauce de entrada a la vía por el Atlántico.

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Desde septiembre de 2007, el canal de Panamá está siendo ampliado para que buques más grandes atraviesen sus 80 kilómetros de largo, por los que pasa el 5% del comercio mundial y por los que ya han pasado más de un millón de embarcaciones desde su inauguración el 15 de agosto de 1914.

El principal componente de los trabajos, cuyo avance supera el 60%, es la construcción de un tercer juego de esclusas para que puedan cruzar la vía buques de más de 12.000 contenedores, con el triple de capacidad de los actuales.

Cada una de las cuatro compuertas tiene un peso aproximado a 3.700 toneladas, frente a las 700 toneladas de las actuales; su altura es de 33 metros, equivalente a un edificio de 11 pisos; el ancho es de 58 metros y el grosor de 10 metros.

Las nuevas compuertas comenzaron a construirse en octubre de 2011 por la empresa italiana Cimolai y hace un mes partieron del puerto de San Giorgio di Nogaro en Trieste (Italia).

Según los promotores de la obra, en las nuevas esclusas del canal de Panamá se emplearán 290.000 kilos de acero, el equivalente a 29 veces la torre Eiffel de París.

‘Hoy es un día histórico. Que lleguen al país las primeras esclusas (…) es un hito muy especial que nos dice que las obras entran en una fase importante’, dijo a la AFP Roberto Roy, ministro del canal.

Según el administrador de la vía, Ricardo Quijano, las obras de ampliación sobrepasaron el 60% de lo previsto, aunque los trabajos siguen retrasados en relación con el plan inicial que preveía su finalización en 2014, coincidiendo con el centenario de la vía.

‘Si seguimos al ritmo actual esperamos facturar en el canal ampliado a partir de julio de 2015’, dijo Quijano a la AFP.

Los trabajos van retrasados debido a que la autoridad canalera puso objeción al cemento usado por el principal concesionario, un consorcio integrado por la española Sacyr, la italiana Impregilo, la belga Jan de Nul y la panameña Constructora Urbana.

El consorcio imputa a la autoridad canalera haber cambiado las pautas y ahora reclama 573 millones de dólares adicionales por incremento de costos. Hasta el momento se han adjudicado 4.360 millones de dólares en contratos para unas obras estimadas en 5.250 millones. El mayor contrato es el diseño y construcción de las nuevas esclusas, estimado en 3.200 millones de dólares.

El pasado año fiscal (1 de octubre de 2011 a 30 de septiembre de 2012) más de 333 millones de toneladas de carga pasaron por el canal de Panamá.

Esa cifra supuso un récord para una vía que ha dejado 7.600 millones de dólares al tesoro panameño, desde que Estados Unidos entregó la administración a Panamá el 31 de diciembre de 1999.

Estados Unidos es el principal cliente de la vía, por la que el año último transportó 143,5 millones de toneladas, seguido por China (52,7 millones de toneladas), Chile (28 millones) y Japón (22,3 millones).

Las autoridades panameñas aseguran que la ampliación del canal de Panamá conllevará la transformación de puertos en la región, principalmente en el Golfo de México y la costa Este de los Estados Unidos, que deberán ser ampliados para dar acceso a los nuevos buques, de 400 metros de largo.

Nicaragua lanzó un proyecto para hacer su propio canal interoceánico y competir con el de Panamá, a un costo de 40.000 millones de dólares.

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Llegan a Panamá las primeras cuatro compuertas para la ampliación de canal

Redacción República
20 de agosto, 2013

Las primeras cuatro de dieciséis compuertas para la ampliación del canal de Panamá llegaron este martes al país, constató un periodista de la AFP.

‘Me siento muy contento y honrado que en el día de hoy hayan llegado estas cuatro compuertas que van a cambiar la historia del mundo’, lanzó el presidente panameño Ricardo Martinelli.

El mandatario, acompañado de diferentes autoridades locales y directivos de la vía, fue el encargado de pulsar el botón que dio paso a un ulular de sirenas, dando aviso de la llegada de las compuertas al embarcadero de Mindi, en el nuevo cauce de entrada a la vía por el Atlántico.

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Desde septiembre de 2007, el canal de Panamá está siendo ampliado para que buques más grandes atraviesen sus 80 kilómetros de largo, por los que pasa el 5% del comercio mundial y por los que ya han pasado más de un millón de embarcaciones desde su inauguración el 15 de agosto de 1914.

El principal componente de los trabajos, cuyo avance supera el 60%, es la construcción de un tercer juego de esclusas para que puedan cruzar la vía buques de más de 12.000 contenedores, con el triple de capacidad de los actuales.

Cada una de las cuatro compuertas tiene un peso aproximado a 3.700 toneladas, frente a las 700 toneladas de las actuales; su altura es de 33 metros, equivalente a un edificio de 11 pisos; el ancho es de 58 metros y el grosor de 10 metros.

Las nuevas compuertas comenzaron a construirse en octubre de 2011 por la empresa italiana Cimolai y hace un mes partieron del puerto de San Giorgio di Nogaro en Trieste (Italia).

Según los promotores de la obra, en las nuevas esclusas del canal de Panamá se emplearán 290.000 kilos de acero, el equivalente a 29 veces la torre Eiffel de París.

‘Hoy es un día histórico. Que lleguen al país las primeras esclusas (…) es un hito muy especial que nos dice que las obras entran en una fase importante’, dijo a la AFP Roberto Roy, ministro del canal.

Según el administrador de la vía, Ricardo Quijano, las obras de ampliación sobrepasaron el 60% de lo previsto, aunque los trabajos siguen retrasados en relación con el plan inicial que preveía su finalización en 2014, coincidiendo con el centenario de la vía.

‘Si seguimos al ritmo actual esperamos facturar en el canal ampliado a partir de julio de 2015’, dijo Quijano a la AFP.

Los trabajos van retrasados debido a que la autoridad canalera puso objeción al cemento usado por el principal concesionario, un consorcio integrado por la española Sacyr, la italiana Impregilo, la belga Jan de Nul y la panameña Constructora Urbana.

El consorcio imputa a la autoridad canalera haber cambiado las pautas y ahora reclama 573 millones de dólares adicionales por incremento de costos. Hasta el momento se han adjudicado 4.360 millones de dólares en contratos para unas obras estimadas en 5.250 millones. El mayor contrato es el diseño y construcción de las nuevas esclusas, estimado en 3.200 millones de dólares.

El pasado año fiscal (1 de octubre de 2011 a 30 de septiembre de 2012) más de 333 millones de toneladas de carga pasaron por el canal de Panamá.

Esa cifra supuso un récord para una vía que ha dejado 7.600 millones de dólares al tesoro panameño, desde que Estados Unidos entregó la administración a Panamá el 31 de diciembre de 1999.

Estados Unidos es el principal cliente de la vía, por la que el año último transportó 143,5 millones de toneladas, seguido por China (52,7 millones de toneladas), Chile (28 millones) y Japón (22,3 millones).

Las autoridades panameñas aseguran que la ampliación del canal de Panamá conllevará la transformación de puertos en la región, principalmente en el Golfo de México y la costa Este de los Estados Unidos, que deberán ser ampliados para dar acceso a los nuevos buques, de 400 metros de largo.

Nicaragua lanzó un proyecto para hacer su propio canal interoceánico y competir con el de Panamá, a un costo de 40.000 millones de dólares.