El euro bajaba frente al dólar el jueves, presionado por los comentarios, considerados prudentes por los cambistas, del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, cuando el billete verde se beneficiaba de buenos indicadores estadounidenses.
Hacia las 16H00 GMT, el euro valía 1,3116 dólares, frente a 1,3207 dólares el miércoles hacia las 21H00 GMT.
La moneda única europea retrocedía también frente a la divisa japonesa, hasta los 131,29 yenes contra los 131,72 yenes del miércoles.
El dólar progresaba ante la divisa nipona, hasta los 100,11 yenes -tras haber subido hacia las 14H30 GMT hasta los 100,17 yenes, su nivel más alto desde el 25 de julio -contra 99,73 yenes el miércoles.
El Banco Central Europeo mantuvo sin sorpresa el jueves su principal tipo, al 0,50%, pero ‘la conferencia de prensa de Mario Draghi ha hecho retroceder el euro frente al dólar porque el gobernador del BCE insistió en el mantenimiento duradero de las condiciones monetarias acomodadoras en el seno de la Eurozona, y no descarta una caída del tipo teniendo en cuenta las perspectivas económicas en Europa’, comentaba Vincent Ganne, analista de FXCM.
Mario Draghi adoptó ‘una posición prudente, al no dejarse llevar demasiado por la aparición de los primeros brotes verdes de la reanudación’, observaba por su parte Kathleen Brooks, analista de Forex.com.
La moneda única europea se desvalorizó así claramente frente al dólar, e incluso cayó hacia las 14h45 GMT hasta los 1,3111 dólares, su nivel más bajo en siete semanas.
Por su parte, ‘el dólar tuvo un día bueno y firme’, apuntaba Michael Hewson, analista de CMC Markets.
Al tiempo que las especulaciones sobre las perspectivas de la política monetaria de la Reserva Federal estadounidense (Fed) volvían a ser la principal preocupación de los cambistas, se publicaron indicadores en su conjunto más bien mejores a lo esperado en el mercado laboral.
Las contrataciones en el sector privado estadounidense progresaron de nuevo en agosto, las nuevas inscripciones semanales del desempleo retrocedieron de forma inesperada, la actividad en el sector de los servicios en Estados Unidos subió en agosto, para alcanzar su nivel más alto desde enero de 2008.
La onza de oro terminó en los 1.385 dólares en el fixing de la noche, contra 1.390 dólares el miércoles.
El euro bajaba frente al dólar el jueves, presionado por los comentarios, considerados prudentes por los cambistas, del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, cuando el billete verde se beneficiaba de buenos indicadores estadounidenses.
Hacia las 16H00 GMT, el euro valía 1,3116 dólares, frente a 1,3207 dólares el miércoles hacia las 21H00 GMT.
La moneda única europea retrocedía también frente a la divisa japonesa, hasta los 131,29 yenes contra los 131,72 yenes del miércoles.
El dólar progresaba ante la divisa nipona, hasta los 100,11 yenes -tras haber subido hacia las 14H30 GMT hasta los 100,17 yenes, su nivel más alto desde el 25 de julio -contra 99,73 yenes el miércoles.
El Banco Central Europeo mantuvo sin sorpresa el jueves su principal tipo, al 0,50%, pero ‘la conferencia de prensa de Mario Draghi ha hecho retroceder el euro frente al dólar porque el gobernador del BCE insistió en el mantenimiento duradero de las condiciones monetarias acomodadoras en el seno de la Eurozona, y no descarta una caída del tipo teniendo en cuenta las perspectivas económicas en Europa’, comentaba Vincent Ganne, analista de FXCM.
Mario Draghi adoptó ‘una posición prudente, al no dejarse llevar demasiado por la aparición de los primeros brotes verdes de la reanudación’, observaba por su parte Kathleen Brooks, analista de Forex.com.
La moneda única europea se desvalorizó así claramente frente al dólar, e incluso cayó hacia las 14h45 GMT hasta los 1,3111 dólares, su nivel más bajo en siete semanas.
Por su parte, ‘el dólar tuvo un día bueno y firme’, apuntaba Michael Hewson, analista de CMC Markets.
Al tiempo que las especulaciones sobre las perspectivas de la política monetaria de la Reserva Federal estadounidense (Fed) volvían a ser la principal preocupación de los cambistas, se publicaron indicadores en su conjunto más bien mejores a lo esperado en el mercado laboral.
Las contrataciones en el sector privado estadounidense progresaron de nuevo en agosto, las nuevas inscripciones semanales del desempleo retrocedieron de forma inesperada, la actividad en el sector de los servicios en Estados Unidos subió en agosto, para alcanzar su nivel más alto desde enero de 2008.
La onza de oro terminó en los 1.385 dólares en el fixing de la noche, contra 1.390 dólares el miércoles.