El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, puso en marcha este viernes el órgano superior para la defensa de la economía como una ‘estrategia perfecta’ para estabilizar las finanzas del país frente a un presunto ‘sabotaje’ de la oposición para generar un ‘colapso’.
‘Estamos instalando el órgano superior para la defensa de la economía (…) para derrotar la guerra económica que le han declarado a nuestro país’, dijo Maduro desde el Palacio de Miraflores en referencia a la oposición, y prometió que se pondría ‘al frente de la batalla por la estabilidad económica y prosperidad’ del país.
‘El objetivo es desarrollar todas las iniciativas (…) para derrotar a todos los actores que están dañando a la economía en todos sus niveles’, agregó.
El mandatario venezolano denunció este viernes que su gobierno enfrenta un ‘sabotaje’ económico de parte de grupos opositores que actúan desde Estados Unidos y que apuntaría sobre todo al ramo de alimentos, a través del ocultamiento de productos o caídas en la producción de las empresas privadas.
Por esa razón, aseguró que como parte de un proceso de ‘inspección’, a partir del lunes activará la línea telefónica ‘0800-sabotaje’ para que los factores económicos y ‘el pueblo’ puedan denunciar los elementos que perturben la red de distribución de alimentos.
Los venezolanos han vivido en los últimos años la escasez cíclica de alimentos como café, azúcar, aceite y productos de uso personal como papel higiénico y servilletas, entre otros.
El presidente también se refirió a un ‘ataque tremendo contra la moneda’ desde finales de 2012, pero aseguró que Venezuela cuenta con ‘las divisas para el funcionamiento de la economía hasta el 31 diciembre de 2013’, aunque no dio más detalles.
Maduro dijo días atrás que se diseña un nuevo mecanismo para la venta de dólares adicional a dos existentes en un país con un férreo control cambiario y en el que el dólar se cotiza oficialmente a 6,30 bolívares pero que en el mercado paralelo sextuplica su valor.
El país sudamericano registra una inflación acumulada en 2013 de 32,9%, la más alta de América Latina, y un crecimiento del 1,6% durante el primer semestre del año, muy por debajo de las expectativas del gobierno.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, puso en marcha este viernes el órgano superior para la defensa de la economía como una ‘estrategia perfecta’ para estabilizar las finanzas del país frente a un presunto ‘sabotaje’ de la oposición para generar un ‘colapso’.
‘Estamos instalando el órgano superior para la defensa de la economía (…) para derrotar la guerra económica que le han declarado a nuestro país’, dijo Maduro desde el Palacio de Miraflores en referencia a la oposición, y prometió que se pondría ‘al frente de la batalla por la estabilidad económica y prosperidad’ del país.
‘El objetivo es desarrollar todas las iniciativas (…) para derrotar a todos los actores que están dañando a la economía en todos sus niveles’, agregó.
El mandatario venezolano denunció este viernes que su gobierno enfrenta un ‘sabotaje’ económico de parte de grupos opositores que actúan desde Estados Unidos y que apuntaría sobre todo al ramo de alimentos, a través del ocultamiento de productos o caídas en la producción de las empresas privadas.
Por esa razón, aseguró que como parte de un proceso de ‘inspección’, a partir del lunes activará la línea telefónica ‘0800-sabotaje’ para que los factores económicos y ‘el pueblo’ puedan denunciar los elementos que perturben la red de distribución de alimentos.
Los venezolanos han vivido en los últimos años la escasez cíclica de alimentos como café, azúcar, aceite y productos de uso personal como papel higiénico y servilletas, entre otros.
El presidente también se refirió a un ‘ataque tremendo contra la moneda’ desde finales de 2012, pero aseguró que Venezuela cuenta con ‘las divisas para el funcionamiento de la economía hasta el 31 diciembre de 2013’, aunque no dio más detalles.
Maduro dijo días atrás que se diseña un nuevo mecanismo para la venta de dólares adicional a dos existentes en un país con un férreo control cambiario y en el que el dólar se cotiza oficialmente a 6,30 bolívares pero que en el mercado paralelo sextuplica su valor.
El país sudamericano registra una inflación acumulada en 2013 de 32,9%, la más alta de América Latina, y un crecimiento del 1,6% durante el primer semestre del año, muy por debajo de las expectativas del gobierno.