El billonario detrás del constructor de autos Tesla indicó en su cuenta Twitter que SpaceX, una compañía privada de viajes al espacio, “aún está en etapas iniciales para el desarrollo de avanzados micro-satélites que operan en largas formaciones”.
Musk no dio más detalles, pero prometió un anuncio en dos o tres meses.
Aunque Musk criticó el lunes que el diario había cometido imprecisiones en varios puntos.
Musk y Wyler tratan de idear un dispositivo factible y a un costo relativamente bajo para poner en órbita 700 satélites, que pesarían menos de 110 kilos y proveer internet inalámbrico en cualquier lugar del planeta, reportó el diario.
La cápsula no tripulada Dragon de la compañía privada estadounidense SpaceX el 17 de setiembre de 2014
SpaceX .
El SpaceX es la única aeronave que actualmente es capaz de regresar de la ISS con carga, su última misión a la estación espacial fue en abril.
Esta situación ha alentado el auge de compañías privadas que compiten por restablecer el acceso de Estados Unidos a la ISS, en una carrera en la que SpaceX se convirtió en 2010 en la primera compañía privada en enviar una nave a esa estación.
El billonario detrás del constructor de autos Tesla indicó en su cuenta Twitter que SpaceX, una compañía privada de viajes al espacio, “aún está en etapas iniciales para el desarrollo de avanzados micro-satélites que operan en largas formaciones”.
Musk no dio más detalles, pero prometió un anuncio en dos o tres meses.
Aunque Musk criticó el lunes que el diario había cometido imprecisiones en varios puntos.
Musk y Wyler tratan de idear un dispositivo factible y a un costo relativamente bajo para poner en órbita 700 satélites, que pesarían menos de 110 kilos y proveer internet inalámbrico en cualquier lugar del planeta, reportó el diario.
La cápsula no tripulada Dragon de la compañía privada estadounidense SpaceX el 17 de setiembre de 2014
SpaceX .
El SpaceX es la única aeronave que actualmente es capaz de regresar de la ISS con carga, su última misión a la estación espacial fue en abril.
Esta situación ha alentado el auge de compañías privadas que compiten por restablecer el acceso de Estados Unidos a la ISS, en una carrera en la que SpaceX se convirtió en 2010 en la primera compañía privada en enviar una nave a esa estación.