Luego de barrer en la serie final tres juegos a cero al conjunto de Vikingos, la novena de Nacionales se coronó como Bicampeón del béisbol mayor guatemalteco.
El conjunto juvenil logró recuperarse del mal inicio en el Torneo Nacional de la temporada del 2015, en el que fue de menos a más en la fase de clasificación, obteniendo el boleto a las semifinales como el tercer lugar. En la serie de acceso a la final sorprendió y dejó en el camino USAC en dos juegos.
En la serie por el campeonato el pitcheo fue fundamental para conseguir las primeras dos victorias 7 a 5 y 8 a 3.
En el duelo final, Nacionales inició con todo en la primera entrada, al romper el cero en la pizarra con una carrera en las piernas de Julio Alvarado, la reacción de Vikingos llegó en el cuarto episodio al empatar el juego por medio de Fernando Ozuna para el empate a uno.
En la parte baja del cuarto inning los campeones aprovecharon el descontrol del lanzador rival, llegando al plato en nueve ocasiones por medio de Gabriel Montenegro, José Quilo, Javier Lemus, Julio Alvarado, Jorge Zaldívar, Esquerre, Marco Lemus, Ramiro González y Marlon Clavería para sentenciar el encuentro 10 carreras a 1.
Vikingos intentó recortar la distancia con una carrera de Diego Bran en la séptima entrada, pero esta no fue suficiente cayendo 10 carreras a 2. Emilio Seijas se llevó la tercera victoria de Nacionales al lanzar la ruta completa en la que permitió dos carreras.
Con esta victoria Nacionales se proclamó por segundo año consecutivo como monarca nacional, marcando una nueva historia en el béisbol mayor guatemalteco.
Luego de barrer en la serie final tres juegos a cero al conjunto de Vikingos, la novena de Nacionales se coronó como Bicampeón del béisbol mayor guatemalteco.
El conjunto juvenil logró recuperarse del mal inicio en el Torneo Nacional de la temporada del 2015, en el que fue de menos a más en la fase de clasificación, obteniendo el boleto a las semifinales como el tercer lugar. En la serie de acceso a la final sorprendió y dejó en el camino USAC en dos juegos.
En la serie por el campeonato el pitcheo fue fundamental para conseguir las primeras dos victorias 7 a 5 y 8 a 3.
En el duelo final, Nacionales inició con todo en la primera entrada, al romper el cero en la pizarra con una carrera en las piernas de Julio Alvarado, la reacción de Vikingos llegó en el cuarto episodio al empatar el juego por medio de Fernando Ozuna para el empate a uno.
En la parte baja del cuarto inning los campeones aprovecharon el descontrol del lanzador rival, llegando al plato en nueve ocasiones por medio de Gabriel Montenegro, José Quilo, Javier Lemus, Julio Alvarado, Jorge Zaldívar, Esquerre, Marco Lemus, Ramiro González y Marlon Clavería para sentenciar el encuentro 10 carreras a 1.
Vikingos intentó recortar la distancia con una carrera de Diego Bran en la séptima entrada, pero esta no fue suficiente cayendo 10 carreras a 2. Emilio Seijas se llevó la tercera victoria de Nacionales al lanzar la ruta completa en la que permitió dos carreras.
Con esta victoria Nacionales se proclamó por segundo año consecutivo como monarca nacional, marcando una nueva historia en el béisbol mayor guatemalteco.