En mayo de 2012 se lanzó públicamente la Política Nacional de Empleo, un instrumento práctico cuyo objetivo es: “mejorar el nivel de vida de las familias guatemaltecas, creando las condiciones que promuevan la generación de empleo seguro, decente y de calidad en Guatemala”. Un objetivo que está claramente vinculado a la principal oferta de todos los candidatos.
Sin embargo, al escuchar las propuestas de muchos candidatos a alcaldes, uno puede percatarse que ha existido poca difusión de la política y los ejes estratégicos para lograr el objetivo, especialmente en los municipios fuera de las cabeceras departamentales. Los alcaldes, deberían ser los primeros en sumarse activamente a promover la política nacional de empleo en el país.
Según el último reporte sobre empleo presentado por el Centro de Investigaciones Económicas Nacionales – CIEN, la fuerza laboral guatemalteca asciende a 6.2 millones de personas, de las cuales el 69.3 por ciento trabaja en la informalidad. El análisis de la economía del país que presentó el Consejo Privado de Competitividad – CPC, demuestra que la productividad laboral se ha mantenido a niveles muy bajos, similar a la que se registraba en 1980.
El mismo estudio del CIEN sobre empleo, muestra que los sectores que más trabajo dan a las personas en el país son: agricultura (31.9 por ciento de la fuerza laboral), comercio (26.8 por ciento), industrias manufactureras (14.8 por ciento). Cuando comparamos estos números con el crecimiento que han tenido, nos damos cuenta que ningún sector ha sido capaz de crecer por encima del 4 por ciento, debido a que la inversión para generar mayor valor agregado, ha sido muy baja. La regulación laboral no se ha actualizado para promover más oportunidades en sectores con mayor productividad y que permita la contratación a tiempo parcial, establecer límites sobre los cuales se otorgue la indemnización o incluso figuras para la contratación de más jóvenes.
Por ello, es necesaria una mayor discusión de estos temas, con la participación activa de los alcaldes y de aquellos vecinos que formen parte de las comisiones de fomento económico, turismo, ambiente y recursos naturales en cada comuna, tal y como lo establece el artículo 36 del Código Municipal.
Si los alcaldes no se involucran, para generar mejores condiciones de inversión a nivel de cada municipio, será muy difícil que la política nacional de empleo tenga el éxito esperado. Aprovechemos estas elecciones, para escuchar a los candidatos de las 338 corporaciones municipales, para conocer qué van a hacer para promover más oportunidades de trabajo formal en nuestros municipios. @jczapata_s
En mayo de 2012 se lanzó públicamente la Política Nacional de Empleo, un instrumento práctico cuyo objetivo es: “mejorar el nivel de vida de las familias guatemaltecas, creando las condiciones que promuevan la generación de empleo seguro, decente y de calidad en Guatemala”. Un objetivo que está claramente vinculado a la principal oferta de todos los candidatos.
Sin embargo, al escuchar las propuestas de muchos candidatos a alcaldes, uno puede percatarse que ha existido poca difusión de la política y los ejes estratégicos para lograr el objetivo, especialmente en los municipios fuera de las cabeceras departamentales. Los alcaldes, deberían ser los primeros en sumarse activamente a promover la política nacional de empleo en el país.
Según el último reporte sobre empleo presentado por el Centro de Investigaciones Económicas Nacionales – CIEN, la fuerza laboral guatemalteca asciende a 6.2 millones de personas, de las cuales el 69.3 por ciento trabaja en la informalidad. El análisis de la economía del país que presentó el Consejo Privado de Competitividad – CPC, demuestra que la productividad laboral se ha mantenido a niveles muy bajos, similar a la que se registraba en 1980.
El mismo estudio del CIEN sobre empleo, muestra que los sectores que más trabajo dan a las personas en el país son: agricultura (31.9 por ciento de la fuerza laboral), comercio (26.8 por ciento), industrias manufactureras (14.8 por ciento). Cuando comparamos estos números con el crecimiento que han tenido, nos damos cuenta que ningún sector ha sido capaz de crecer por encima del 4 por ciento, debido a que la inversión para generar mayor valor agregado, ha sido muy baja. La regulación laboral no se ha actualizado para promover más oportunidades en sectores con mayor productividad y que permita la contratación a tiempo parcial, establecer límites sobre los cuales se otorgue la indemnización o incluso figuras para la contratación de más jóvenes.
Por ello, es necesaria una mayor discusión de estos temas, con la participación activa de los alcaldes y de aquellos vecinos que formen parte de las comisiones de fomento económico, turismo, ambiente y recursos naturales en cada comuna, tal y como lo establece el artículo 36 del Código Municipal.
Si los alcaldes no se involucran, para generar mejores condiciones de inversión a nivel de cada municipio, será muy difícil que la política nacional de empleo tenga el éxito esperado. Aprovechemos estas elecciones, para escuchar a los candidatos de las 338 corporaciones municipales, para conocer qué van a hacer para promover más oportunidades de trabajo formal en nuestros municipios. @jczapata_s