Política
Política
Empresa
Empresa
Investigación y Análisis
Investigación y Análisis
Internacional
Internacional
Opinión
Opinión
Inmobiliaria
Inmobiliaria
Agenda Empresarial
Agenda Empresarial

¡¡Basta de diagnósticos!!

Redacción
25 de abril, 2016

El sistema educativo es el enfermo crónico que jamás logran curar los médicos expertos. Se le recetan acetaminofenes, antihistamínicos, antibióticos y hasta relajantes, y ni así se remedian los males, con suerte se alivian las síntomas para luego retornar porque la causa que provoca la enfermedad queda sin atender.

Todas las gestiones educativas reciben insumos y resultados de su antecesor; de los actores de los distintos sectores que comprenden el total, quienes de igual manera aportan su particular punto de vista, que uniendo todos, tejen la visión macro, pues se arriba a la resonancia magnética del sistema educativo para que los especialistas se concentren a crear la ruta de la curación. Aunado a los integrantes del sistema, se encuentra el Consejo Nacional de Educación, quien en su mandato, Acuerdo Gubernativo 304-2008, debe “Conocer y analizar las principales políticas, estrategias y acciones de la administración educativa, tendientes a mantener y mejorar los avances que en materia educativa se hayan logrado.” Y más adelante, “Emitir sus disposiciones internas.” . Todos expertos en su campo, viven la misión de velar por la educación nacional, en esperanza de su constante mejora y avance.

Los medios de comunicación social enfatizan e informan el diagnóstico que pareciera ser fatal; desde la escasez en cobertura, la falta de docentes, el presupuesto que no alcanza, conectividad limitada, el uso de metodologías tradicionales y anticuadas, la necesidad de revisar el Currículo Nacional Base para su propia adecuación curricular para el siglo veintiuno; como algunos de los síntomas evidentes.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

¿Cómo aliviarlos? ¿Cómo curar al enfermo que padece de tanto mal? Nada se puede hacer si no hay presupuesto. Si bien es cierto que el Ministerio de Educación goza de un formidable presupuesto, además con un incremento para este año, aún así es insuficiente para cumplir con los programas existentes y mucho menos para invertir. Las declaraciones del Señor Ministro publicadas en el Diario de Centro América el día lunes 25 de abril (http://www.dca.gob.gt/index.php/nacional/item/43491-invertirán-q40-millones-en-aulas) indican que se invertirán cuarenta millones de quetzales en aulas y mobiliario escolar, con fondos de un préstamo otorgado por el Banco Interamericano de Desarrollo. Se podrá resolver parte de la carencia; el problema será cómo y cuándo se tenga que saldar ese compromiso, más adelante. Los programas de apoyo escasamente cuentan con su sustento económico; los presupuestos aprobados no cubren con lo mínimo para operar durante el 2016. Y es hora de iniciar la construcción del nuevo presupuesto, para el año 2017, que está a pocos meses. El nuevo calculo estaría ya en proceso.

¿Cómo mejorar cobertura? Usando la tecnología. ¡La conectividad es de alto costo! Entonces entablar acuerdos publico, privado. No hay suficientes docentes; y habrá menos en el futuro cercano. Se debe trabajar en conjunto con las universidades privadas en el desarrollo de programas ágiles de formación inicial docente, y sobre todo que incluyan y gocen de las metodologías innovadoras que puedan cumplir con las necesidades actuales.

¿Cómo hacer una mejor ejecución presupuestaria? Cómo asegurarse que las partidas lleguen a tiempo a su destino? Cambiar las fuentes de ingresos de los recursos, una sugerencia, y sin duda alguna, los expertos financistas encontraran otras figuras.

¿Cómo asegurar un aprendizaje integro y real? No es necesariamente alcanzar un resultado numérico en una prueba estandarizada; aprehender el conocimiento a través de las competencias perfeccionadas, procedimiento pausado con resultados certeros por medio de metodologías innovadoras.

El enfermo está, como se dice coloquialmente, grave. El internista ha entregado varios diagnósticos; los especialistas deben implementar sus disciplinas adquiridas. El cirujano debe extirpar las causas de la enfermedad; cada experto sabe lo que debe hacer, y el equipo multidisciplinario tiene que diseñar en conjunto la resolución del problema para asegurar que siga con vida el afectado. La curación será onerosa, pero entre más se demora, más se crece el reto y su coste. El resultado de una acción a tiempo previene que la enfermedad continúe su camino. El sistema educativo público esta en estado critico. Basta de diagnósticos, es momento de acción.

¡¡Basta de diagnósticos!!

Redacción
25 de abril, 2016

El sistema educativo es el enfermo crónico que jamás logran curar los médicos expertos. Se le recetan acetaminofenes, antihistamínicos, antibióticos y hasta relajantes, y ni así se remedian los males, con suerte se alivian las síntomas para luego retornar porque la causa que provoca la enfermedad queda sin atender.

Todas las gestiones educativas reciben insumos y resultados de su antecesor; de los actores de los distintos sectores que comprenden el total, quienes de igual manera aportan su particular punto de vista, que uniendo todos, tejen la visión macro, pues se arriba a la resonancia magnética del sistema educativo para que los especialistas se concentren a crear la ruta de la curación. Aunado a los integrantes del sistema, se encuentra el Consejo Nacional de Educación, quien en su mandato, Acuerdo Gubernativo 304-2008, debe “Conocer y analizar las principales políticas, estrategias y acciones de la administración educativa, tendientes a mantener y mejorar los avances que en materia educativa se hayan logrado.” Y más adelante, “Emitir sus disposiciones internas.” . Todos expertos en su campo, viven la misión de velar por la educación nacional, en esperanza de su constante mejora y avance.

Los medios de comunicación social enfatizan e informan el diagnóstico que pareciera ser fatal; desde la escasez en cobertura, la falta de docentes, el presupuesto que no alcanza, conectividad limitada, el uso de metodologías tradicionales y anticuadas, la necesidad de revisar el Currículo Nacional Base para su propia adecuación curricular para el siglo veintiuno; como algunos de los síntomas evidentes.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

¿Cómo aliviarlos? ¿Cómo curar al enfermo que padece de tanto mal? Nada se puede hacer si no hay presupuesto. Si bien es cierto que el Ministerio de Educación goza de un formidable presupuesto, además con un incremento para este año, aún así es insuficiente para cumplir con los programas existentes y mucho menos para invertir. Las declaraciones del Señor Ministro publicadas en el Diario de Centro América el día lunes 25 de abril (http://www.dca.gob.gt/index.php/nacional/item/43491-invertirán-q40-millones-en-aulas) indican que se invertirán cuarenta millones de quetzales en aulas y mobiliario escolar, con fondos de un préstamo otorgado por el Banco Interamericano de Desarrollo. Se podrá resolver parte de la carencia; el problema será cómo y cuándo se tenga que saldar ese compromiso, más adelante. Los programas de apoyo escasamente cuentan con su sustento económico; los presupuestos aprobados no cubren con lo mínimo para operar durante el 2016. Y es hora de iniciar la construcción del nuevo presupuesto, para el año 2017, que está a pocos meses. El nuevo calculo estaría ya en proceso.

¿Cómo mejorar cobertura? Usando la tecnología. ¡La conectividad es de alto costo! Entonces entablar acuerdos publico, privado. No hay suficientes docentes; y habrá menos en el futuro cercano. Se debe trabajar en conjunto con las universidades privadas en el desarrollo de programas ágiles de formación inicial docente, y sobre todo que incluyan y gocen de las metodologías innovadoras que puedan cumplir con las necesidades actuales.

¿Cómo hacer una mejor ejecución presupuestaria? Cómo asegurarse que las partidas lleguen a tiempo a su destino? Cambiar las fuentes de ingresos de los recursos, una sugerencia, y sin duda alguna, los expertos financistas encontraran otras figuras.

¿Cómo asegurar un aprendizaje integro y real? No es necesariamente alcanzar un resultado numérico en una prueba estandarizada; aprehender el conocimiento a través de las competencias perfeccionadas, procedimiento pausado con resultados certeros por medio de metodologías innovadoras.

El enfermo está, como se dice coloquialmente, grave. El internista ha entregado varios diagnósticos; los especialistas deben implementar sus disciplinas adquiridas. El cirujano debe extirpar las causas de la enfermedad; cada experto sabe lo que debe hacer, y el equipo multidisciplinario tiene que diseñar en conjunto la resolución del problema para asegurar que siga con vida el afectado. La curación será onerosa, pero entre más se demora, más se crece el reto y su coste. El resultado de una acción a tiempo previene que la enfermedad continúe su camino. El sistema educativo público esta en estado critico. Basta de diagnósticos, es momento de acción.