La semana pasada se publicaron los datos del informe del Índice de Libertad Económica que publica la Fundación Heritage, en conjunto con The Wall Street Journal. Las personas en todo el mundo, trabajan arduamente para mejorar su prosperidad, pero lo que difiere en cada país es la libertad económica que rige las relaciones relativas al Estado de Derecho, el tamaño del gobierno, eficiencia regulatoria y la apertura de los mercados en los que las personas comercializan sus bienes y servicios.
Los resultados publicados la semana pasada nos muestran un mínimo avance de 1.4 puntos sobre cien, un total en la evaluación de 61.8 puntos, lo cual hizo que Guatemala mejorara cinco posiciones de la posición 87 a la 82 entre 178 países.
A nivel mundial los tres países mejor evaluados son Hong Kong, Singapur y Nueva Zelandia. En el caso de Latinoamérica, el ranking destaca a países como Chile (en la posición 7 de 178 países), Colombia (33), Uruguay (41) y Perú (49).
Milton Friedman decía que “cuando una sociedad pone la equidad de los resultados sobre el principio de la libertad, lo más probable es que esa sociedad no va a tener equidad ni tampoco libertad. El uso de la fuerza para lograr la equidad, va a destruir la libertad y la fuerza introducida aún y cuando sea con objetivos loables, va a terminar en las manos de personas que la van a utilizar para sus propios intereses”. Algo que pudimos ver con los objetivos loables de políticos que hoy están siendo juzgados en las cortes.
Cuando vemos los indicadores para Guatemala respecto a su libertad económica, encontramos que hay factores en los cuales el país no ha hecho nada para mejorar su posición: existe poco Estado de Derecho debido a una limitada capacidad de garantizar la propiedad privada y altos índices de corrupción, ineficiencia en los procesos que rigen las relaciones económicas debido a trabas burocráticas para abrir una empresa y poca flexibilidad laboral. Incluso al evaluar los datos en los últimos 20 años el país ha caído 30 puntos en su evaluación respecto a la capacidad del Estado de defender la propiedad privada y 18 puntos respecto a la corrupción. Esto demuestra cómo ha proliferado la agenda de quienes prefieren sacrificar la libertad individual por intereses que parecieran ser loables, pero que en la práctica solo ha resultado en un aumento del número de personas que viven bajo el umbral de pobreza.
La única forma de que el país continúe avanzando es fortaleciendo las instituciones que permitan que el individuo tenga la suficiente libertad para prosperar, bajo la garantía de un Estado que va a defender la propiedad privada y los derechos individuales. @jczapata_s
Fuente: http://heritage.org/index/country/guatemala
La semana pasada se publicaron los datos del informe del Índice de Libertad Económica que publica la Fundación Heritage, en conjunto con The Wall Street Journal. Las personas en todo el mundo, trabajan arduamente para mejorar su prosperidad, pero lo que difiere en cada país es la libertad económica que rige las relaciones relativas al Estado de Derecho, el tamaño del gobierno, eficiencia regulatoria y la apertura de los mercados en los que las personas comercializan sus bienes y servicios.
Los resultados publicados la semana pasada nos muestran un mínimo avance de 1.4 puntos sobre cien, un total en la evaluación de 61.8 puntos, lo cual hizo que Guatemala mejorara cinco posiciones de la posición 87 a la 82 entre 178 países.
A nivel mundial los tres países mejor evaluados son Hong Kong, Singapur y Nueva Zelandia. En el caso de Latinoamérica, el ranking destaca a países como Chile (en la posición 7 de 178 países), Colombia (33), Uruguay (41) y Perú (49).
Milton Friedman decía que “cuando una sociedad pone la equidad de los resultados sobre el principio de la libertad, lo más probable es que esa sociedad no va a tener equidad ni tampoco libertad. El uso de la fuerza para lograr la equidad, va a destruir la libertad y la fuerza introducida aún y cuando sea con objetivos loables, va a terminar en las manos de personas que la van a utilizar para sus propios intereses”. Algo que pudimos ver con los objetivos loables de políticos que hoy están siendo juzgados en las cortes.
Cuando vemos los indicadores para Guatemala respecto a su libertad económica, encontramos que hay factores en los cuales el país no ha hecho nada para mejorar su posición: existe poco Estado de Derecho debido a una limitada capacidad de garantizar la propiedad privada y altos índices de corrupción, ineficiencia en los procesos que rigen las relaciones económicas debido a trabas burocráticas para abrir una empresa y poca flexibilidad laboral. Incluso al evaluar los datos en los últimos 20 años el país ha caído 30 puntos en su evaluación respecto a la capacidad del Estado de defender la propiedad privada y 18 puntos respecto a la corrupción. Esto demuestra cómo ha proliferado la agenda de quienes prefieren sacrificar la libertad individual por intereses que parecieran ser loables, pero que en la práctica solo ha resultado en un aumento del número de personas que viven bajo el umbral de pobreza.
La única forma de que el país continúe avanzando es fortaleciendo las instituciones que permitan que el individuo tenga la suficiente libertad para prosperar, bajo la garantía de un Estado que va a defender la propiedad privada y los derechos individuales. @jczapata_s
Fuente: http://heritage.org/index/country/guatemala