En Guatemala hay más de 700 mil niños, niñas y adolescentes y de ellos el 74.4 por ciento se concentra en el área rural. Por ello, la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport), firmó un convenio con Empresarios por la Educación, Organización Internacional de Trabajo (OIT), Ministerio de Trabajo y representantes del sector para la prevención del trabajo infantil en el sector exportador.
“Lo que se busca es promover un estilo de desarrollo social con equidad y contribuir a resolver la pobreza mediante la educación y las buenas prácticas empresariales. Las instituciones entonces decidieron sacarle tarjeta roja al trabajo infantil que es un hashtag en la red social twitter con la que las personas pueden apoyar a esta causa: #tarjetarojaaltrabajoinfantilgt“, señala la institución.
Esta estrategia para la prevención de Trabajo Infantil es un plan de sensibilización, el cual busca evitar estas malas prácticas en el sector exportador.
“Se busca sensibilizar las redes agrícolas, proveedores agrícolas y empresarios para que no tengan niños o hijos trabajando en las distintas labores agrícolas. Debemos darles herramientas de trasladarles esa buena intención a las distintas personas y comunidades que puedan estar generando este tipo de trabajo”, expresa Rolando Paiz, presidente de Agexport.
“Mucho de nuestro compromiso por no contratar jóvenes es porque nuestros clientes nos lo exigen y que el empresario guatemalteco interiorice no contratar jóvenes y niños guatemaltecos para no caer en éstas malas prácticas”, expresó Paiz.
Una de las estrategias que se emplearán para eliminar el trabajo infantil será un plan piloto que el sector agrícola impulsará, que es un convenio entre Fundarveja y Cooperación para el Desarrollo, que consiste en programas escolares consistentes en construir laboratorios de computación, programas de libros escolares, certificación de maestros y becas para jóvenes.
“Hay un problema porque los niños y jóvenes apoyan a los padres en las maneras de subsistencia para sus familias y tenemos que impedirlo”, concluyó Paiz.
En Guatemala hay más de 700 mil niños, niñas y adolescentes y de ellos el 74.4 por ciento se concentra en el área rural. Por ello, la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport), firmó un convenio con Empresarios por la Educación, Organización Internacional de Trabajo (OIT), Ministerio de Trabajo y representantes del sector para la prevención del trabajo infantil en el sector exportador.
“Lo que se busca es promover un estilo de desarrollo social con equidad y contribuir a resolver la pobreza mediante la educación y las buenas prácticas empresariales. Las instituciones entonces decidieron sacarle tarjeta roja al trabajo infantil que es un hashtag en la red social twitter con la que las personas pueden apoyar a esta causa: #tarjetarojaaltrabajoinfantilgt“, señala la institución.
Esta estrategia para la prevención de Trabajo Infantil es un plan de sensibilización, el cual busca evitar estas malas prácticas en el sector exportador.
“Se busca sensibilizar las redes agrícolas, proveedores agrícolas y empresarios para que no tengan niños o hijos trabajando en las distintas labores agrícolas. Debemos darles herramientas de trasladarles esa buena intención a las distintas personas y comunidades que puedan estar generando este tipo de trabajo”, expresa Rolando Paiz, presidente de Agexport.
“Mucho de nuestro compromiso por no contratar jóvenes es porque nuestros clientes nos lo exigen y que el empresario guatemalteco interiorice no contratar jóvenes y niños guatemaltecos para no caer en éstas malas prácticas”, expresó Paiz.
Una de las estrategias que se emplearán para eliminar el trabajo infantil será un plan piloto que el sector agrícola impulsará, que es un convenio entre Fundarveja y Cooperación para el Desarrollo, que consiste en programas escolares consistentes en construir laboratorios de computación, programas de libros escolares, certificación de maestros y becas para jóvenes.
“Hay un problema porque los niños y jóvenes apoyan a los padres en las maneras de subsistencia para sus familias y tenemos que impedirlo”, concluyó Paiz.