El empleo informal continua al alza, según la Encuesta Nacional de Empleo e Ingresos (ENEI 2-2015), la cual arroja un aumento en la informalidad de un 5.2%, lo que quiere decir que 216,435 personas se ubicaron en el sector informal en comparación con el informe ENEI 1-2015, cuando se reportaron 4,155,686 personas.
En ambos informes se puede apreciar que 8 personas de cada 10 se dedican al mercado informal dentro de la capital. El porcentaje no es muy alentador en el área rural ya que 7 de cada 10 están ubicados dentro de ese rubro. También se observa que 7 de cada 10 hombres trabajan en el mercado informal. En cuanto a la población indígena la cifra es 8 de cada 10.
La Población Económicamente Activa (PEA) está compuesta por 6,536,775 personas, donde 66.4 % son hombres y 33.6% mujeres; 32.5% se autoidentificó como indígena. Hay 10.7 millones de personas que están en edad de trabajar, cuya cifra es considerada a partir de los 15 años.
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Conformación
El estudio también refleja que el sector que más atrae la informalidad es la agricultura, ganadería, caza y silvicultura con un porcentaje que llega al 41.5%. En el segundo lugar es ocupado por comercio, alojamiento y servicios varios, con un 26.8%.
Otros sectores incluidos que son parte del sector informal que aportan, aunque sea en menor cantidad, son:
Industrias manufactureras y minas que representan el 10%,
otros servicios 8%,
construcción 6.3%,
transporte y almacenamiento 2.9%,
administración pública y enseñanza 1.1%,
servicios de actividades profesionales 1.0%,
comunicaciones 0.4% y
suministro de electricidad 0.2%.
Sin embargo Servicios profesionales de Actividades Profesionales es el que más ingresos genera per cápita mientras que la agricultura, ganadería, caza es el menos pagado.
Cifras de desempleo
Las cifras de desempleo alcanzan el 2.7% a nivel nacional, según el ENEI 2-2015. En cuanto al porcentaje según género, la mujer ocupa un porcentaje del 4.2%; 2.2% mayor que el hombre.
Luis Linares, analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (ASIES), expresó que los niveles de desempleo en el país son bajos porque la sobrevivencia le pide al guatemalteco ganarse la vida de una u otra forma y por eso acude a la informalidad que agrega “es un fenómeno que no logra reducirse”.
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Centroamérica tendrá uno de los porcentajes de población en edad productiva más elevado de su historia, fenómeno conocido como el Bono Demográfico. Esta condición ofrece a los países de Centroamérica una oportunidad única para impulsar su crecimiento económico y social; sin embargo, en la región esta circunstancia se agotará en el corto plazo.
Esto debe ser aprovechado por cada uno de los países que implementen políticas para enfrentar desafíos y concretar sus oportunidades de acuerdo con la fase de transición demográfica en que se encuentren.
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El estudio refleja que Guatemala tendrá una ventana hasta el 2050, cuando este bono se acabe y exista más población dependiente mayor de 65 años y menor de 15 por lo que sugiere invertir más en capital humano, lo cual permitirá crear más trabajos formales.
Propuestas y retos
Uno de los retos para la propuesta de nuevos empleos y reducir la informalidad es la implementación del proyecto de ciudades intermedias, con el cual se quiere potencilizar las virtudes de las regiones para que cada una se dedique a actividades productivas como ganadería y agricultura, turismo y energía.
El investigador Jorge Benavides comenta con más detalle cómo se crearán empleos formales en estas ciudades.
El presidente del Comité Coordinador de Asociaciones, Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras, José Gonzalez Campo, expresa la necesidad de crear políticas públicas integrales para que tenga la oportunidad de desarrollar sus capacidades donde viven.
Gonzalez Campo considera importante crear más empresas formales para impulsar el empleo formal. Asegura que es un gran reto de las autoridades disminuir la informalidad.
El empleo informal continua al alza, según la Encuesta Nacional de Empleo e Ingresos (ENEI 2-2015), la cual arroja un aumento en la informalidad de un 5.2%, lo que quiere decir que 216,435 personas se ubicaron en el sector informal en comparación con el informe ENEI 1-2015, cuando se reportaron 4,155,686 personas.
En ambos informes se puede apreciar que 8 personas de cada 10 se dedican al mercado informal dentro de la capital. El porcentaje no es muy alentador en el área rural ya que 7 de cada 10 están ubicados dentro de ese rubro. También se observa que 7 de cada 10 hombres trabajan en el mercado informal. En cuanto a la población indígena la cifra es 8 de cada 10.
La Población Económicamente Activa (PEA) está compuesta por 6,536,775 personas, donde 66.4 % son hombres y 33.6% mujeres; 32.5% se autoidentificó como indígena. Hay 10.7 millones de personas que están en edad de trabajar, cuya cifra es considerada a partir de los 15 años.
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Conformación
El estudio también refleja que el sector que más atrae la informalidad es la agricultura, ganadería, caza y silvicultura con un porcentaje que llega al 41.5%. En el segundo lugar es ocupado por comercio, alojamiento y servicios varios, con un 26.8%.
Otros sectores incluidos que son parte del sector informal que aportan, aunque sea en menor cantidad, son:
Industrias manufactureras y minas que representan el 10%,
otros servicios 8%,
construcción 6.3%,
transporte y almacenamiento 2.9%,
administración pública y enseñanza 1.1%,
servicios de actividades profesionales 1.0%,
comunicaciones 0.4% y
suministro de electricidad 0.2%.
Sin embargo Servicios profesionales de Actividades Profesionales es el que más ingresos genera per cápita mientras que la agricultura, ganadería, caza es el menos pagado.
Cifras de desempleo
Las cifras de desempleo alcanzan el 2.7% a nivel nacional, según el ENEI 2-2015. En cuanto al porcentaje según género, la mujer ocupa un porcentaje del 4.2%; 2.2% mayor que el hombre.
Luis Linares, analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (ASIES), expresó que los niveles de desempleo en el país son bajos porque la sobrevivencia le pide al guatemalteco ganarse la vida de una u otra forma y por eso acude a la informalidad que agrega “es un fenómeno que no logra reducirse”.
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Centroamérica tendrá uno de los porcentajes de población en edad productiva más elevado de su historia, fenómeno conocido como el Bono Demográfico. Esta condición ofrece a los países de Centroamérica una oportunidad única para impulsar su crecimiento económico y social; sin embargo, en la región esta circunstancia se agotará en el corto plazo.
Esto debe ser aprovechado por cada uno de los países que implementen políticas para enfrentar desafíos y concretar sus oportunidades de acuerdo con la fase de transición demográfica en que se encuentren.
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El estudio refleja que Guatemala tendrá una ventana hasta el 2050, cuando este bono se acabe y exista más población dependiente mayor de 65 años y menor de 15 por lo que sugiere invertir más en capital humano, lo cual permitirá crear más trabajos formales.
Propuestas y retos
Uno de los retos para la propuesta de nuevos empleos y reducir la informalidad es la implementación del proyecto de ciudades intermedias, con el cual se quiere potencilizar las virtudes de las regiones para que cada una se dedique a actividades productivas como ganadería y agricultura, turismo y energía.
El investigador Jorge Benavides comenta con más detalle cómo se crearán empleos formales en estas ciudades.
El presidente del Comité Coordinador de Asociaciones, Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras, José Gonzalez Campo, expresa la necesidad de crear políticas públicas integrales para que tenga la oportunidad de desarrollar sus capacidades donde viven.
Gonzalez Campo considera importante crear más empresas formales para impulsar el empleo formal. Asegura que es un gran reto de las autoridades disminuir la informalidad.