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¿Son más impuestos la respuesta a la falta de eficacia y eficiencia en el Estado?

Redacción
30 de noviembre, 2016

Cuando una cubeta de agua tiene un agujero en el fondo por más que se llene, siempre hará falta, y nunca se llenará si no se repara primero. De igual manera, por mucho que se recaude, si no se soluciona el despilfarro y la corrupción en el gasto público, nunca tendremos una recaudación que alcance.

Todos debemos pagar impuestos o tributos, en el entendido de que estos deben ser manejados más eficaz y eficientemente para devolvernos servicios,  que sí cada quien lo hiciera por su cuenta, para optimizar este gasto o inversión. ¿Pero es esta la situación de Guatemala? Definitivamente NO. En primera instancia no todos pagamos los TRIBUTOS. Los de abajo y muchos otros están en la informalidad y o no los pagan o no saben que los pagan parcialmente. En realidad los de en medio somos quienes estamos obligados a pagarlos al generar riqueza. Los más ricos lo pagan, pero tienen departamentos especializados, cuya función es ver cómo los evaden de manera supuestamente legal.

He oído con preocupación que funcionarios de hacienda hablan de diferenciar la informalidad de la subsistencia. Me permito recordarle a estos personajes que nuestro pacto social, La Constitución de la República, establece que todos somos iguales ante la ley. De manera que todos estamos obligados a pagar impuestos. No obstante cada quien va a tributar en la medida de sus posibilidades. No es lo mismo un porcentaje dado sobre unos pocos quetzales al comprar una gaseosa en una tienda de barrio, comparado al mismo porcentaje de quien negocia millones de acuerdo a su actividad comercial o empresarial. De otra manera se está castigando al más eficiente y se premia a quien no lo es. Pues ha sido irresponsable él o sus ancestros.

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Ahora bien, la función del gobierno debiera ser la de proveer los servicios necesarios para todos de manera justa, con el ánimo de proveer a aquellos que menos tengan los servicios básicos de igual manera que para el resto de la población. Y ayudar a quienes de manera fortuita están en la peor situación. Creando de esta manera las oportunidades para que quien se esfuerce pueda salir de la pobreza y generar riqueza.

Sin embargo, tenemos un aparato estatal ineficiente, que consume recursos a diestra y siniestra, pero sin devolver nada a quienes tributamos, que debiéramos ser TODOS. Ojalá con mayor énfasis para quien más lo necesita. Los que más generan riqueza en términos reales subsidian a aquellos que son más pequeños. Empero todo aquel que tributa tiene el derecho a exigir que se les retorne en servicios de calidad y con eficacia.

Hoy se piden resultados para alimentar un aparato burocrático que no genera ningún resultado, además lleno de restricciones. No se proporciona servicios esenciales de manera correcta, no hay seguridad, ni tampoco certeza jurídica. La infraestructura está colapsada. Pero no se nos informa que la recaudación casi se ha cuadruplicado desde que empezó la llamada era democrática con Vinicio Cerezo. Lo cual es una contradicción pues cada periodo de gobierno la percepción generalizada es que recibimos menos respecto a lo que se tributa.

Se habla de que la CORRUPCIÓN puede alcanzar alrededor del 20% del presupuesto anual del gobierno de turno, es decir, de nuestros tributos más la deuda que nos generan. No digamos el porcentaje que pudiera mejorar sí hubiese un gasto eficiente, podría ser otro 30% adicional.  Si además mejora la tributación por TODOS. Solamente con estos cambios no estaríamos duplicando por lo menos el dinero disponible para que los burócratas nos devolvieran en servicios e infraestructura lo que hoy día desaparece como por arte de magia. Este el agujero de la cubeta de la tributación que debe arreglarse para que esta se llene y sea suficiente para hacer lo que al gobierno le corresponde y este país llamado GUATEMALA, salga adelante.

SI LA CUBETA DE LA TRIBUTACIÓN NO SE ARREGLA ESTA POR DEMÁS QUE QUERRAMOS LLENARLA PARA QUE ALCANCE. NO SERÁ SUFICIENTE JAMÁS SI NO SE CIERRA EL AGUJERO DE LA CORRUPCIÓN, LA INEFICIENCIA Y LA MEDIOCRIDAD PRIMERO.

Republicagt es ajena a la opinión expresada en este artículo

¿Son más impuestos la respuesta a la falta de eficacia y eficiencia en el Estado?

Redacción
30 de noviembre, 2016

Cuando una cubeta de agua tiene un agujero en el fondo por más que se llene, siempre hará falta, y nunca se llenará si no se repara primero. De igual manera, por mucho que se recaude, si no se soluciona el despilfarro y la corrupción en el gasto público, nunca tendremos una recaudación que alcance.

Todos debemos pagar impuestos o tributos, en el entendido de que estos deben ser manejados más eficaz y eficientemente para devolvernos servicios,  que sí cada quien lo hiciera por su cuenta, para optimizar este gasto o inversión. ¿Pero es esta la situación de Guatemala? Definitivamente NO. En primera instancia no todos pagamos los TRIBUTOS. Los de abajo y muchos otros están en la informalidad y o no los pagan o no saben que los pagan parcialmente. En realidad los de en medio somos quienes estamos obligados a pagarlos al generar riqueza. Los más ricos lo pagan, pero tienen departamentos especializados, cuya función es ver cómo los evaden de manera supuestamente legal.

He oído con preocupación que funcionarios de hacienda hablan de diferenciar la informalidad de la subsistencia. Me permito recordarle a estos personajes que nuestro pacto social, La Constitución de la República, establece que todos somos iguales ante la ley. De manera que todos estamos obligados a pagar impuestos. No obstante cada quien va a tributar en la medida de sus posibilidades. No es lo mismo un porcentaje dado sobre unos pocos quetzales al comprar una gaseosa en una tienda de barrio, comparado al mismo porcentaje de quien negocia millones de acuerdo a su actividad comercial o empresarial. De otra manera se está castigando al más eficiente y se premia a quien no lo es. Pues ha sido irresponsable él o sus ancestros.

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Ahora bien, la función del gobierno debiera ser la de proveer los servicios necesarios para todos de manera justa, con el ánimo de proveer a aquellos que menos tengan los servicios básicos de igual manera que para el resto de la población. Y ayudar a quienes de manera fortuita están en la peor situación. Creando de esta manera las oportunidades para que quien se esfuerce pueda salir de la pobreza y generar riqueza.

Sin embargo, tenemos un aparato estatal ineficiente, que consume recursos a diestra y siniestra, pero sin devolver nada a quienes tributamos, que debiéramos ser TODOS. Ojalá con mayor énfasis para quien más lo necesita. Los que más generan riqueza en términos reales subsidian a aquellos que son más pequeños. Empero todo aquel que tributa tiene el derecho a exigir que se les retorne en servicios de calidad y con eficacia.

Hoy se piden resultados para alimentar un aparato burocrático que no genera ningún resultado, además lleno de restricciones. No se proporciona servicios esenciales de manera correcta, no hay seguridad, ni tampoco certeza jurídica. La infraestructura está colapsada. Pero no se nos informa que la recaudación casi se ha cuadruplicado desde que empezó la llamada era democrática con Vinicio Cerezo. Lo cual es una contradicción pues cada periodo de gobierno la percepción generalizada es que recibimos menos respecto a lo que se tributa.

Se habla de que la CORRUPCIÓN puede alcanzar alrededor del 20% del presupuesto anual del gobierno de turno, es decir, de nuestros tributos más la deuda que nos generan. No digamos el porcentaje que pudiera mejorar sí hubiese un gasto eficiente, podría ser otro 30% adicional.  Si además mejora la tributación por TODOS. Solamente con estos cambios no estaríamos duplicando por lo menos el dinero disponible para que los burócratas nos devolvieran en servicios e infraestructura lo que hoy día desaparece como por arte de magia. Este el agujero de la cubeta de la tributación que debe arreglarse para que esta se llene y sea suficiente para hacer lo que al gobierno le corresponde y este país llamado GUATEMALA, salga adelante.

SI LA CUBETA DE LA TRIBUTACIÓN NO SE ARREGLA ESTA POR DEMÁS QUE QUERRAMOS LLENARLA PARA QUE ALCANCE. NO SERÁ SUFICIENTE JAMÁS SI NO SE CIERRA EL AGUJERO DE LA CORRUPCIÓN, LA INEFICIENCIA Y LA MEDIOCRIDAD PRIMERO.

Republicagt es ajena a la opinión expresada en este artículo