No es frecuente un duelo de polos opuestos entre Municipal y Comunicaciones. Eso lo decimos por sus posiciones en la tabla. Municipal en el polo norte, en lo más alto, y Comunicaciones en el fondo de la Patagonia bajo un iceberg.
Si algo dejó el empate es que los cremas salen lentamente del intensivo al jugarle a Municipal con contragolpes poco articulados y buenas intenciones. Los visitantes jugaron como recién salidos de la anestesia después de una larga enfermedad o síndrome gaucho que les apagó la cabeza. Pero no todo es culpa de ellos. El tico Ronald Gonzalez hizo lo posible por evitar que los cremas terminaran en línea de muerte y con la llamada a la funeraria. Gonzalez movió sus piezas y se persignó y salió el empate. Un milagro.
Estamos claros que los Cremas ya no pueden caer más. En el fondo de la tabla sumaron un punto más a falta de una segunda vuelta y un clásico. Hay vida todavía, claro que sí.
Preocupa de sobremanera el cuadro rojo que tuvo a los cremas metidos en su campo y ya sin ninguna oportunidad rendidos a sus pies en casi todo el segundo tiempo. Lo mejor de Municipal, y cuando enamoraba, era el juego que generaba Pappa y su conexión con Jaime Alas, Danilo Guerra y Carlos Kamiani. Sin embargo los delanteros no estuvieron finos. El blanco era la nube o la oscuridad de las generales, nunca Javier Izarún y a veces la pelota caía arriba de la portería crema pero nada más.
Los cremas iniciaron el partido con un alegrón al minuto 19. Luego de un tiro de esquina el cabezazo de Rafael Morales topó en el travesaño de Niko Hagen. Después poco y a lo mejor fue mucho porque desde hace tiempo que Comunicaciones no sabía qué es jugar futbol. Hubo amnesia de la buena, varias amputaciones de esas que te llevan al sótano de la tabla y escoger entre pino o caoba. Si no es porque de repente Jean Márquez intentaba con un tiro solitario Comunicaciones no tenía argumentos de ataque. Era evidente que después de 3/4 de cancha los visitantes no sabían a dónde iban.
Marco Pablo Pappa intentó por todos lados pero la mentalidad de imaginar la jugada antes que suceda en el campo es mucho para los jugadores nacionales; esta característica la tiene alguien ya vivido, y Kamiani se topaba con esos regalos de mente ágil que no encontraron la red crema.
Para el segundo tiempo Machaín sacó a Pappa y metió a Gastón Puerari para darle agresividad o al menos para conectar con Kamiani o Guerra pero fue poco. Al menos Gaston Puerari y Pablo Mingorance provocaron sustos serios en la saga crema pero faltó el gol.
Los rojos tuvieron una clara sobre el tiempo de reposición con un tiro directo de Mingorance que Izarún desvió y Mendez reviró. Así acabó todo, como campanazo de último round. Comunicaciones celebró que no murió y Municipal celebró la extensión de su misericordia con un punto más en la cima.
No es frecuente un duelo de polos opuestos entre Municipal y Comunicaciones. Eso lo decimos por sus posiciones en la tabla. Municipal en el polo norte, en lo más alto, y Comunicaciones en el fondo de la Patagonia bajo un iceberg.
Si algo dejó el empate es que los cremas salen lentamente del intensivo al jugarle a Municipal con contragolpes poco articulados y buenas intenciones. Los visitantes jugaron como recién salidos de la anestesia después de una larga enfermedad o síndrome gaucho que les apagó la cabeza. Pero no todo es culpa de ellos. El tico Ronald Gonzalez hizo lo posible por evitar que los cremas terminaran en línea de muerte y con la llamada a la funeraria. Gonzalez movió sus piezas y se persignó y salió el empate. Un milagro.
Estamos claros que los Cremas ya no pueden caer más. En el fondo de la tabla sumaron un punto más a falta de una segunda vuelta y un clásico. Hay vida todavía, claro que sí.
Preocupa de sobremanera el cuadro rojo que tuvo a los cremas metidos en su campo y ya sin ninguna oportunidad rendidos a sus pies en casi todo el segundo tiempo. Lo mejor de Municipal, y cuando enamoraba, era el juego que generaba Pappa y su conexión con Jaime Alas, Danilo Guerra y Carlos Kamiani. Sin embargo los delanteros no estuvieron finos. El blanco era la nube o la oscuridad de las generales, nunca Javier Izarún y a veces la pelota caía arriba de la portería crema pero nada más.
Los cremas iniciaron el partido con un alegrón al minuto 19. Luego de un tiro de esquina el cabezazo de Rafael Morales topó en el travesaño de Niko Hagen. Después poco y a lo mejor fue mucho porque desde hace tiempo que Comunicaciones no sabía qué es jugar futbol. Hubo amnesia de la buena, varias amputaciones de esas que te llevan al sótano de la tabla y escoger entre pino o caoba. Si no es porque de repente Jean Márquez intentaba con un tiro solitario Comunicaciones no tenía argumentos de ataque. Era evidente que después de 3/4 de cancha los visitantes no sabían a dónde iban.
Marco Pablo Pappa intentó por todos lados pero la mentalidad de imaginar la jugada antes que suceda en el campo es mucho para los jugadores nacionales; esta característica la tiene alguien ya vivido, y Kamiani se topaba con esos regalos de mente ágil que no encontraron la red crema.
Para el segundo tiempo Machaín sacó a Pappa y metió a Gastón Puerari para darle agresividad o al menos para conectar con Kamiani o Guerra pero fue poco. Al menos Gaston Puerari y Pablo Mingorance provocaron sustos serios en la saga crema pero faltó el gol.
Los rojos tuvieron una clara sobre el tiempo de reposición con un tiro directo de Mingorance que Izarún desvió y Mendez reviró. Así acabó todo, como campanazo de último round. Comunicaciones celebró que no murió y Municipal celebró la extensión de su misericordia con un punto más en la cima.