Facebook, en un comunicado, dijo que el vídeo no había sido compartido a través de Facebook Live, sino subido después del hecho. El vocero de la red social dijo a la prensa “Este es un crimen horrible y no toleramos este tipo de contenido en Facebook. Nosotros trabajamos para mantener un entorno seguro, y estamos en contacto con las autoridades cuando hay amenazas a la integridad física”.

El asesinato de Robert Goodwin, que fue transmitido por Facebook Live, le dio la vuelta al mundo y desató la búsqueda por parte de la policía y de civiles para atrapar al culpable, un hombre identificado como Steve Stephens. Stephens utilizó la red social para decir que había matado antes y que durante el domingo de Pascua mataría a cuantas personas pudiera, hasta que lo atraparan.

Según reportes de la policía de Cleveland, Stephens ya no se encuentra en el estado de Ohio. Se han lanzado alertas a estados vecinos.

Facebook Live salió al mercado hace un año y aunque la mayoría de vídeos son inocuos, se han dado casos de violencia por accidente y a propósito. Estos incluyen un disparo a un bebé, la tortura de un adolescente con necesidades especiales y dos asaltos sexuales en Chicago y Suecia