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Un espectáculo más de la SAT y del MP

Redacción
25 de abril, 2017

Con sorpresa pudimos ver que el Ministerio Publico se acordó de un caso que tenía abierto desde el año 2012, con respecto a denuncias presentadas por la Superintendencia de Administración Tributaria, en contra de la empresa exportadora más grande de cardamomo del mundo: CARDEX S.A., basadas en la supuesta simulación de exportación de cardamomo.

Esta denuncia fue interpuesta en el año 2012, y la empresa desde ese año, y por voluntad propia, presento la documentación que hoy llegaron a embargar, montando todo un espectáculo, para adquirir documentación que en repetidas ocasiones les hizo llegar la empresa en forma impresa y digital.

Para conocer más de la situación, usted querido lector debe saber que el origen de las denuncias penales en contra de las empresas exportadoras, fue una respuesta del gobierno de Otto Pérez Molina, para todas aquellas empresas que reclamaron la devolución del IVA, pues la cantidad adeudada por el Estado de Guatemala a las empresas exportadoras, supera los Q 3,000,000,000, impuesto que fue pagado por las empresas exportadoras, y que la SAT está obligado por la ley a devolver!!, y que no han devuelto desde inicios del gobierno del mayor delincuente  y su banda de saqueadores, de la historia de Guatemala!

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¡La información supuestamente embargada por el Ministerio Publico, lleva más de cinco años en los anaqueles de la fiscalía de asuntos económicos del Ministerio Publico, y en repetidas ocasiones han manifestado verbalmente a los abogados de la empresa Cardex S.A., que no cuentan con el personal necesario para revisar la documentación! El mismo caso afrentan más de 30 empresas exportadoras de café y cardamomo, quienes desde hace varios años entregaron la documentación requerida, y es la fecha en la que todos los expedientes están en propiedad del Ministerio Publico y no han presentado a los jueces el resultado de sus investigaciones.

¿Por qué la SAT no se dedica a formalizar al 80% de comerciantes, agricultores, ganaderos, procesadores y prestamistas que operan en la informalidad, y que nunca en la vida han reportado una factura, o ni siquiera saben que es un libro contable? ¿Por qué no se dedican a fiscalizar a los miles de personas que no pagan un solo centavo al fisco, pero que, si reciben miles de millones de quetzales en beneficios de salud, educación, carreteras, etc. (que no sean buenos o casi inservibles a causa de la cleptocracia de los funcionarios de gobierno, no es problema de los empresarios y todos nosotros empleados asalariados, que, si pagamos más de Q 50,000,000,000 en impuestos anualmente y que no recibimos ningún beneficio del gobierno, ni siquiera seguridad).

¿Qué pretende la SAT y el MP con este tipo de acciones? Ahuyentar a las pocas empresas privadas que aún siguen operando en el país, las pocas que aún no han considerado mudarse a la vecina Honduras o al sudeste mexicano. Porque honestamente, no creo que a mí me quedarían muchas ganas de seguir operando en Guatemala, brindando empleo e ingresos a más de 300,000 familias de las áreas más alejadas del país, en zonas totalmente abandonadas por el estado, cuando un alto porcentaje de mis ingresos, los tengo que gastar en defenderme de los abusos, difamaciones, sobornos y extorsiones de la gente que debería estar trabajando para facilitar el crecimiento económico del país.

¿Qué hacemos, nos seguimos disfrutando el show de este gobierno mediocre? ¿o volvemos a salir a las calles para depurarlo y desenraizar la maleza que hoy por hoy tiene de rodillas al pueblo de Guatemala?, Y una pregunta para usted querido lector: si no hay empresas que operen en el país, ¿en donde vamos a conseguir empleo? ¿o quiere usted trabajar por 5 dólares al día, tal y como lo hacen los pobres cubanos? ¿o peor aún, vivir como viven los venezolanos, sin ni siquiera papel para sus necesidades básicas?

República es ajena a la opinión expresada en este artículo

Un espectáculo más de la SAT y del MP

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25 de abril, 2017

Con sorpresa pudimos ver que el Ministerio Publico se acordó de un caso que tenía abierto desde el año 2012, con respecto a denuncias presentadas por la Superintendencia de Administración Tributaria, en contra de la empresa exportadora más grande de cardamomo del mundo: CARDEX S.A., basadas en la supuesta simulación de exportación de cardamomo.

Esta denuncia fue interpuesta en el año 2012, y la empresa desde ese año, y por voluntad propia, presento la documentación que hoy llegaron a embargar, montando todo un espectáculo, para adquirir documentación que en repetidas ocasiones les hizo llegar la empresa en forma impresa y digital.

Para conocer más de la situación, usted querido lector debe saber que el origen de las denuncias penales en contra de las empresas exportadoras, fue una respuesta del gobierno de Otto Pérez Molina, para todas aquellas empresas que reclamaron la devolución del IVA, pues la cantidad adeudada por el Estado de Guatemala a las empresas exportadoras, supera los Q 3,000,000,000, impuesto que fue pagado por las empresas exportadoras, y que la SAT está obligado por la ley a devolver!!, y que no han devuelto desde inicios del gobierno del mayor delincuente  y su banda de saqueadores, de la historia de Guatemala!

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¿Por qué la SAT no se dedica a formalizar al 80% de comerciantes, agricultores, ganaderos, procesadores y prestamistas que operan en la informalidad, y que nunca en la vida han reportado una factura, o ni siquiera saben que es un libro contable? ¿Por qué no se dedican a fiscalizar a los miles de personas que no pagan un solo centavo al fisco, pero que, si reciben miles de millones de quetzales en beneficios de salud, educación, carreteras, etc. (que no sean buenos o casi inservibles a causa de la cleptocracia de los funcionarios de gobierno, no es problema de los empresarios y todos nosotros empleados asalariados, que, si pagamos más de Q 50,000,000,000 en impuestos anualmente y que no recibimos ningún beneficio del gobierno, ni siquiera seguridad).

¿Qué pretende la SAT y el MP con este tipo de acciones? Ahuyentar a las pocas empresas privadas que aún siguen operando en el país, las pocas que aún no han considerado mudarse a la vecina Honduras o al sudeste mexicano. Porque honestamente, no creo que a mí me quedarían muchas ganas de seguir operando en Guatemala, brindando empleo e ingresos a más de 300,000 familias de las áreas más alejadas del país, en zonas totalmente abandonadas por el estado, cuando un alto porcentaje de mis ingresos, los tengo que gastar en defenderme de los abusos, difamaciones, sobornos y extorsiones de la gente que debería estar trabajando para facilitar el crecimiento económico del país.

¿Qué hacemos, nos seguimos disfrutando el show de este gobierno mediocre? ¿o volvemos a salir a las calles para depurarlo y desenraizar la maleza que hoy por hoy tiene de rodillas al pueblo de Guatemala?, Y una pregunta para usted querido lector: si no hay empresas que operen en el país, ¿en donde vamos a conseguir empleo? ¿o quiere usted trabajar por 5 dólares al día, tal y como lo hacen los pobres cubanos? ¿o peor aún, vivir como viven los venezolanos, sin ni siquiera papel para sus necesidades básicas?

República es ajena a la opinión expresada en este artículo