Los tomates tan cotidianos y simples, llenan de sabor a las comidas y en especial a las salsas .
Entonces, en esta ocasión, nuestro ingrediente estrella es el tomate. Referente a su sabor, el mismo, estará de acuerdo a su variedad como forma de cultivarse, ya que los que crecen al aire libre serán más aromáticos o por su tamaño y colorido, los más pequeños y rojos intensos aportarán un mejor sabor.
Existen diversos tipos: los tomates en forma de pera, son ideales para cocinarlos en sopas, guisos o salsas, mientras los tomates redondos, con una pulpa gruesa, son apreciados para comerlos sin cocinar como en una ensalada.
Los tomates cereza, apropiados para las ensaladas, son pequeños de color rojo o amarillo, siendo estos últimos menos ácidos. Asimismo, están los tomates secos que se secan al sol, con un sabor bastante intenso. Se pueden hidratar antes de agregarlos a la preparación o simplemente se adicionan secos cortados finamente y lograrán impregnar con su característico sabor.
Su selección hará la diferencia, entonces, al adquirir los tomates, selecciones los consistentes, sin manchas, de color uniforme.
Nutricionalmente, los tomates son importantes en la dieta, ya que son una buena fuente de carotenoides llamados licopenos y de potasio y son una fuente apreciable de vitaminas C y E.
Para conservarlos y lograr que complementen de mejor manera su proceso de maduración, deje al aire libre o guarde en refrigeración y de forma aislada para evitar que alteren los sabores del resto de vegetales.
Los tomates, son utilizados en casi todas las cocinas del mundo, en especial la italiana que lo incluye fresco o como ingrediente básico de sus salsas. Asimismo, en la cocina guatemalteca es ampliamente empleado en la elaboración de recados o salsas tradicionales.
Para lograr resaltar de mejor manera los tomates recurra a diversos condimentos como laurel, tomillo, albahaca u orégano y combina bien con ajo, cebolla, perejil, hierbabuena o culantro entre otros.
Los métodos de preparación son diversos, desde el tomate concassé, pelado y sin semillas para lo que se escaldan los tomates brevemente para poder retirarles la piel o tomates rellenos con arroz o vegetales o ensaladas, salsas o guisos, estofados, entre otros.
Algunos cuidados a tener: cuando cocine los tomates, evite el fuego alto y adicione una pizca de azúcar para neutralizar la acidez de los mismos.
Hoy les comparto una receta de papas en salsa de tomate. Es un acompañamiento perfecto para un pescado o pollo. Está salsa es conocida como “amarillo” y también preparada con costilla de res o pollo o diversas verduras.
Necesitamos los siguientes ingredientes:
1 libra de papas
3 hojas de laurel
1 ramita de tomillo
1 libra tomate
2 onzas miltomate
1 chile pimiento rojo
1 cebolla pequeña
2 dientes ajo
2 panes franceses ( bollos)
1 trocito achiote
1 cucharada aceite
Sal y pimienta al gusto
Preparación:
Cocinamos las papas cortadas en rodajas gruesas en agua con laurel y tomillo. Retiramos, escurrimos y reservamos.
Cocinamos en una taza del líquido donde se cocinaron las papas: tomate, miltomate, chile pimiento, cebolla, ajo y 2 hojas de laurel.
Al final de la cocción agregamos el pan francés y el achiote.
Licuamos la salsa y colamos
Sofreímos en aceite la salsa.
Agregamos las papas cocinadas
Condimentamos con sal y pimienta.
Los tomates tan cotidianos y simples, llenan de sabor a las comidas y en especial a las salsas .
Entonces, en esta ocasión, nuestro ingrediente estrella es el tomate. Referente a su sabor, el mismo, estará de acuerdo a su variedad como forma de cultivarse, ya que los que crecen al aire libre serán más aromáticos o por su tamaño y colorido, los más pequeños y rojos intensos aportarán un mejor sabor.
Existen diversos tipos: los tomates en forma de pera, son ideales para cocinarlos en sopas, guisos o salsas, mientras los tomates redondos, con una pulpa gruesa, son apreciados para comerlos sin cocinar como en una ensalada.
Los tomates cereza, apropiados para las ensaladas, son pequeños de color rojo o amarillo, siendo estos últimos menos ácidos. Asimismo, están los tomates secos que se secan al sol, con un sabor bastante intenso. Se pueden hidratar antes de agregarlos a la preparación o simplemente se adicionan secos cortados finamente y lograrán impregnar con su característico sabor.
Su selección hará la diferencia, entonces, al adquirir los tomates, selecciones los consistentes, sin manchas, de color uniforme.
Nutricionalmente, los tomates son importantes en la dieta, ya que son una buena fuente de carotenoides llamados licopenos y de potasio y son una fuente apreciable de vitaminas C y E.
Para conservarlos y lograr que complementen de mejor manera su proceso de maduración, deje al aire libre o guarde en refrigeración y de forma aislada para evitar que alteren los sabores del resto de vegetales.
Los tomates, son utilizados en casi todas las cocinas del mundo, en especial la italiana que lo incluye fresco o como ingrediente básico de sus salsas. Asimismo, en la cocina guatemalteca es ampliamente empleado en la elaboración de recados o salsas tradicionales.
Para lograr resaltar de mejor manera los tomates recurra a diversos condimentos como laurel, tomillo, albahaca u orégano y combina bien con ajo, cebolla, perejil, hierbabuena o culantro entre otros.
Los métodos de preparación son diversos, desde el tomate concassé, pelado y sin semillas para lo que se escaldan los tomates brevemente para poder retirarles la piel o tomates rellenos con arroz o vegetales o ensaladas, salsas o guisos, estofados, entre otros.
Algunos cuidados a tener: cuando cocine los tomates, evite el fuego alto y adicione una pizca de azúcar para neutralizar la acidez de los mismos.
Hoy les comparto una receta de papas en salsa de tomate. Es un acompañamiento perfecto para un pescado o pollo. Está salsa es conocida como “amarillo” y también preparada con costilla de res o pollo o diversas verduras.
Necesitamos los siguientes ingredientes:
1 libra de papas
3 hojas de laurel
1 ramita de tomillo
1 libra tomate
2 onzas miltomate
1 chile pimiento rojo
1 cebolla pequeña
2 dientes ajo
2 panes franceses ( bollos)
1 trocito achiote
1 cucharada aceite
Sal y pimienta al gusto
Preparación:
Cocinamos las papas cortadas en rodajas gruesas en agua con laurel y tomillo. Retiramos, escurrimos y reservamos.
Cocinamos en una taza del líquido donde se cocinaron las papas: tomate, miltomate, chile pimiento, cebolla, ajo y 2 hojas de laurel.
Al final de la cocción agregamos el pan francés y el achiote.
Licuamos la salsa y colamos
Sofreímos en aceite la salsa.
Agregamos las papas cocinadas
Condimentamos con sal y pimienta.