La esfera cerrada, descubierta alrededor del siglo XVI, rompió los límites de las comunidades antiguas y desnudas con las comunicaciones tomando como punto de referencia Europa y sin importar día o noche la simultaneidad de comunicación hizo obsoleto el tiempo. La semántica pasado y futuro mantiene como cuatro ejes lo ecológico, lo humano, lo económico y lo tecnológico.

Guatemala no es esa aldea perdida en su pétrea ascendencia maya. Guatemala es parte de la sociedad mundial y eso implica la pérdida de patrones regionales de justicia y las castas de unas cuantas familias. Las sociedades regionales desaparecen y las fronteras espaciales no se respetan, ni por tratados, ni por verdades ni por educación.

Guatemala se ha vuelto dependiente del sistema económico global en cuanto a producción ventas, trabajo y crédito. Los factores centro periferia han vuelto a Guatemala depender de ordenes delictivos globales y de combate global. La estratificación no se da ahora por estatus sino por el nivel de organización que logre la competencia global. Los países se han vuelto periféricos en el desenvolvimiento del mercado mundial y con ello el ocaso de las constituciones y por consecuencia de las instituciones que las coordinan.

Es por ello que la Corte de Constitucionalidad es un organismo obsoleto, limitante del desarrollo y la justicia y alejado de la codificación legal e ilegal que corresponde a la sociedad del mundo global. En lugar de estratificación tenemos escisión que dio al traste con las familias cuyos miembros biológicamente se encuentran diseminados en el mundo y han superado los cánones de origen que tienen que ver con la superación de sus familias, de nivelación económica o de redistribución de bienes.

Los malentendidos interculturales, los problemas de comunicación intercultural o las dificultades idiomáticas han quedado atrás y donde cada etnocentrismo se disipa partiendo de la ingobernabilidad de los gobiernos y de los Estados de iure. El surgimiento del concepto de sociedad unitaria ha chocado con la racionalidad entendida de cualquier forma. Ahora la racionalidad es procedimiental y las acciones pierden certeza de lo que se hace y la frontera entre ser justo o injusto no puede reconocerse en una república como Guatemala.

La amenaza latente en Guatemala a los medios de comunicación. La comunicación se vuelve acción probable. La comunicación comunica y eso representa amenaza para la agonía de la gobernabilidad e institucionalidad. La comunicación ya no supera su improbabilidad que los fenómenos que predica sucedan.

Los componentes de la comunicación son considerados por sí mismos  y ahora dependemos de los grados de desarrollo y la dependencia social depende del grado de individualización alcanzado por la vida social.

República es ajena a la opinión expresada en este artículo