Versión Deluxe, es el blog de música de Luis Fernando Alejos y República lo publicará los domingos
Escuchar discos recopilatorios puede ser como reunirse con un viejo grupo de amigos: la familiaridad, las pequeñas sorpresas y –ante todo– la nostalgia. Oh, la nostalgia. En el caso de Sép7timo Día, la colección de remixes de Soda Stereo publicada este año (como soundtrack para la producción homónima del Cirque du Soleil), la nostalgia es nuestra amiga, pero se puso sus mejores vestidos. Está impecable. Vamos a llevarla al altar.
Soy la persona correcta para escribir sobre Soda y esta colección de canciones; no soy un fanboy del trío argentino, pero realmente disfruto muchas de sus canciones. Crecí con ellas, como muchos de ustedes. Nunca los vi en concierto, pero sí recuerdo su primera despedida en 1997: El Último Concierto lo transmitían por televisión y yo estaba recién operado de las cuatro muelas cordales. El estupor analgésico que experimentaba, sumado a las papillas que intentaba consumir, me daban a entender que presenciaba un momento irrepetible, a un si yo estuviera “a un millón de años luz (de casa)”.
http://gph.is/2dpiZjm
La Wikipedia anota sobre Sép7imo Día: “La producción corrió a cargo de Zeta Bosio, Charly Alberti más Adrián Taverna, quien en 2009 trabajó con Gustavo Cerati para su último trabajo, Fuerza Natural.
Fue un arduo proceso de investigación en el que se digitalizaron y restauraron las cintas originales de la banda. Luego se abrieron los multi-tracks, para trabajar en estas nuevas versiones. En las mezclas finales podrán escuchar hallazgos en vivo, out-takes de estudio, fragmentos de las canciones originales y mash-ups. Un dato curioso es que para este disco se usó el mismo sistema de trabajo que utilizaban The Beatles con su productor George Martin”.
Como les decía, conozco varios de los pasajes de esta antología, pero hay canciones que escuché por primera vez. La cultura del mash-up, precisamente, unir melodías y/o letras de canciones diferentes, deja un sabor agradable al oído. Es la influencia del hip-hip, el remix aplicado al cóctel melódico que era Soda Stereo.
http://gph.is/2cEps9n
“El comienzo fue un big bang y fue caliente” empieza la voz de Cerati En el séptimo día, e incluye una letra que refleja literalmente mi sentir en ese día del número impar: “Odio este domingo híbrido de siempre”. No importa que la canción la haya escuchado por primera vez hace poco, en un anuncio para un desodorante femenino, es una canción… animal (como el álbum homónimo donde fue incluida en su versión original). “Empezamos bien”, pienso, a medida que avanzan las canciones en Spotify. Ella usó, un misil evoca la época del Confort y música para volar y Sueño Stereo, una viñeta de un minuto con 29 segundos que cualquier fan sabrá atesorar. Es también el caso de Planeador.
En remolinos sentencia: “gira el mundo, gira dios”. Florece un arreglo armónico y redondo. La apuesta del trío es entre profana y sagrada. Persiana Americana suena tan bien como lo hizo en los ochentas, sobrevivió a la rapiña del repertorio de bares latinoamericanos, de cada banda de covers que empieza a tocar lo que le gusta.
El intro de Signos me hace pensar en los primeros discos de Bohemia Suburbana. Encuentro el eco generacional, y es inevitable para mí sonreír. Un millón de años luz y Luna rota son poéticas. Retan al paso del tiempo: “Mi alimento son las cenizas de una noche larga”. Crema de estrellas es un manjar acústico y vulnerable. Hombre al agua se empalma con naturalidad a una versión minimalista de Sueles Dejarme Solo (mi canción favorita de la banda).
http://gph.is/XKhmlr
No tengo mayores expectativas sobre la producción del Cirque du Soleil, pero si fue el catalizador obligatorio para reunir a los integrantes sobrevivientes de Soda, y elegir estos momentos de su catálogo y carrera, me quito el sombrero de antemano. La primavera será 0, habrá música ligera. Nostalgia que no será engañosa.
Escucha el álbum aquí
Versión Deluxe, es el blog de música de Luis Fernando Alejos y República lo publicará los domingos
Escuchar discos recopilatorios puede ser como reunirse con un viejo grupo de amigos: la familiaridad, las pequeñas sorpresas y –ante todo– la nostalgia. Oh, la nostalgia. En el caso de Sép7timo Día, la colección de remixes de Soda Stereo publicada este año (como soundtrack para la producción homónima del Cirque du Soleil), la nostalgia es nuestra amiga, pero se puso sus mejores vestidos. Está impecable. Vamos a llevarla al altar.
Soy la persona correcta para escribir sobre Soda y esta colección de canciones; no soy un fanboy del trío argentino, pero realmente disfruto muchas de sus canciones. Crecí con ellas, como muchos de ustedes. Nunca los vi en concierto, pero sí recuerdo su primera despedida en 1997: El Último Concierto lo transmitían por televisión y yo estaba recién operado de las cuatro muelas cordales. El estupor analgésico que experimentaba, sumado a las papillas que intentaba consumir, me daban a entender que presenciaba un momento irrepetible, a un si yo estuviera “a un millón de años luz (de casa)”.
http://gph.is/2dpiZjm
La Wikipedia anota sobre Sép7imo Día: “La producción corrió a cargo de Zeta Bosio, Charly Alberti más Adrián Taverna, quien en 2009 trabajó con Gustavo Cerati para su último trabajo, Fuerza Natural.
Fue un arduo proceso de investigación en el que se digitalizaron y restauraron las cintas originales de la banda. Luego se abrieron los multi-tracks, para trabajar en estas nuevas versiones. En las mezclas finales podrán escuchar hallazgos en vivo, out-takes de estudio, fragmentos de las canciones originales y mash-ups. Un dato curioso es que para este disco se usó el mismo sistema de trabajo que utilizaban The Beatles con su productor George Martin”.
Como les decía, conozco varios de los pasajes de esta antología, pero hay canciones que escuché por primera vez. La cultura del mash-up, precisamente, unir melodías y/o letras de canciones diferentes, deja un sabor agradable al oído. Es la influencia del hip-hip, el remix aplicado al cóctel melódico que era Soda Stereo.
http://gph.is/2cEps9n
“El comienzo fue un big bang y fue caliente” empieza la voz de Cerati En el séptimo día, e incluye una letra que refleja literalmente mi sentir en ese día del número impar: “Odio este domingo híbrido de siempre”. No importa que la canción la haya escuchado por primera vez hace poco, en un anuncio para un desodorante femenino, es una canción… animal (como el álbum homónimo donde fue incluida en su versión original). “Empezamos bien”, pienso, a medida que avanzan las canciones en Spotify. Ella usó, un misil evoca la época del Confort y música para volar y Sueño Stereo, una viñeta de un minuto con 29 segundos que cualquier fan sabrá atesorar. Es también el caso de Planeador.
En remolinos sentencia: “gira el mundo, gira dios”. Florece un arreglo armónico y redondo. La apuesta del trío es entre profana y sagrada. Persiana Americana suena tan bien como lo hizo en los ochentas, sobrevivió a la rapiña del repertorio de bares latinoamericanos, de cada banda de covers que empieza a tocar lo que le gusta.
El intro de Signos me hace pensar en los primeros discos de Bohemia Suburbana. Encuentro el eco generacional, y es inevitable para mí sonreír. Un millón de años luz y Luna rota son poéticas. Retan al paso del tiempo: “Mi alimento son las cenizas de una noche larga”. Crema de estrellas es un manjar acústico y vulnerable. Hombre al agua se empalma con naturalidad a una versión minimalista de Sueles Dejarme Solo (mi canción favorita de la banda).
http://gph.is/XKhmlr
No tengo mayores expectativas sobre la producción del Cirque du Soleil, pero si fue el catalizador obligatorio para reunir a los integrantes sobrevivientes de Soda, y elegir estos momentos de su catálogo y carrera, me quito el sombrero de antemano. La primavera será 0, habrá música ligera. Nostalgia que no será engañosa.