Política
Política
Empresa
Empresa
Investigación y Análisis
Investigación y Análisis
Internacional
Internacional
Opinión
Opinión
Inmobiliaria
Inmobiliaria
Agenda Empresarial
Agenda Empresarial

¿Porqué se debe impulsar una ley que proteja las variedades vegetales?

Allan Martinez
12 de septiembre, 2017

Una ley que proteja las Variedades Vegetales no existe en Guatemala. El decreto 19-2014 que impulsaba esta protección fue rechazada por el Congreso ante la conflictividad que iba a provocar. Esto porque no se supo informar de una mejor manera la investigación científica que implica mejorar las variedades de frutas, vegetales. Su fin último es hacer variedades resistentes al cambio climático y de mejor calidad. La ley también debía proteger la innovación científica y los nuevos descubrimientos.

Según Mariano Rayo, uno de los promotores de la Ley de Variedades Vegetales, se falló por la gran desinformación que se produjo en su momento. Además señalaban que la iniciativa favorecía los transgénicos, como pretendía la Ley Monsanto y esta nueva ley era otro intento de emularla. Diversos sectores de la sociedad se opusieron a la iniciativa, la cual tacharon de favorecer a empresas transnacionales.

La ley también sufrió varias “extrañas casualidades”. Luego de su publicación entraría en vigencia hasta 90 días después. El día después de su vigencia fue derogada, entre otras cosas por una enmienda que incluía la ampliación presupuestaria de un ministerio que nada tenía que ver con la ley.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER DE EMPRESA

El artículo 8 de la Ley del Organismo Judicial reza que no se puede revivir una ley derogada. Por lo tanto, cayó en el olvido.

¿Qué es una variedad vegetal?

Una de las incógnitas que tocó el panel “Situación Actual de las variedades vegetales en Guatemala” en el 1st Intellectual Property Summit fue definir qué es una variedad vegetal, su creación y su registro.

“La variedad vegetal es una subdivisión del rango más bajo del reino vegetal. Es un conjunto de plantas de un solo taxón o categoría botánica del rango más bajo conocido”, según explica la Unión Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales (UPOV).

“Una variedad debe definirse por medio de sus caracteres claramente distintos de los de cualquier otra variedad. Y que se mantendrán inalterados a través del proceso de reproducción o multiplicación” añade la entidad.

Iniciativa UPOV

Recientemente estuvo una misión de la UPOV en el país. Buscaba que el gobierno retome la iniciativa para que se promueva la investigación científica agrícola. Esto porque Guatemala posee uno de los más altos porcentajes de población que se dedica a la agricultura.

Tanto exponentes como representantes de la misión insistieron en que el mundo necesita nuevas tecnologías de investigación y diseño de variedades que puedan ser resistentes y de mejor calidad. Se mencionaron casos como en Nicaragua y Costa Rica, en donde hay variedades de café que resisten a la Roya. Además de otras variedades de frutas y vegetales que han sido modificados como banano, tomate, sandía, piña, caña de azúcar, frambuesa, entre otros.

Guatemala es de los últimos países en Latinoamérica que no protege los derechos de la variedad vegetal. Por lo tanto, está perdiendo competitividad en el mundo frente a países que están a la vanguardia en investigación agrícola. Los panelistas ven que esta problemática llegará a “morderlos en un futuro cercano si no se discute el tema y se hace algo al respecto”.

Una de las desventajas que ha provocado la falta de legislación es el retiro de universidades estadounidenses que querían invertir en investigación agrícola en Guatemala. Tal es el caso de la Universidad de IOWA.  Esta ya había iniciado a trabajar. Sin embargo, ante la falta de ratificación de tratados internacionales que impulsan esta área científica optó por irse. Esta situación ha desalentado la inversión. Por ejemplo, empresas que querían aprovechar la posición geográfica de Guatemala tuvieron que irse a México, en donde se sabe que han prosperado.

Se trabaja en una iniciativa técnica

Según Carla Caballeros, directora ejecutiva de la Cámara del Agro, lo que se hace en estos momentos es una iniciativa técnica con el acompañamiento de la UPOV para que cumpla con todos los estándares técnicos. Así no se crearán suspicacias. “Primero debe ser aprobada por la entidad que es reconocida a nivel mundial. Luego será presentada al Congreso para su discusión y que en algún momento se pueda aprobar”, comenta.

“Los representantes de UPOV se reúnen en octubre de cada año. Para entonces debe estar revisada y aprobada por el organismo internacional. Si no logran aprobarla en el tiempo establecido deberán esperar un año a la próxima reunión”, añade Caballeros.

Otra de las intenciones de la ley es reactivar el Instituto de Ciencias Tecnológicas Agrícolas ICTA. Esto para que confluyan entidades técnicas del gobierno, cooperativas y academia para realizar investigación y la creación de nuevas variedades de frutas y vegetales. Además, que se designe un presupuesto a la entidad para que pueda hacer investigación. Ya que según comentan, está en total abandono.

Otro de los puntos discutidos fue la conflictividad que puede tener la creación de la variedad frente a la protección de alimentos ancestrales. Se tomó en cuenta lo sucedido en Bolivia y Ecuador. En dichos países, las comunidades indígenas trabajan con el Estado para crear y mejorar los vegetales con el fin de exportarlos. Así se favorece a las comunidades y se generan ingresos para el Estado. Según informes científicos, la creación de una nueva especie ronda entre los 10 y 15 años.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER DE EMPRESA

¿Porqué se debe impulsar una ley que proteja las variedades vegetales?

Allan Martinez
12 de septiembre, 2017

Una ley que proteja las Variedades Vegetales no existe en Guatemala. El decreto 19-2014 que impulsaba esta protección fue rechazada por el Congreso ante la conflictividad que iba a provocar. Esto porque no se supo informar de una mejor manera la investigación científica que implica mejorar las variedades de frutas, vegetales. Su fin último es hacer variedades resistentes al cambio climático y de mejor calidad. La ley también debía proteger la innovación científica y los nuevos descubrimientos.

Según Mariano Rayo, uno de los promotores de la Ley de Variedades Vegetales, se falló por la gran desinformación que se produjo en su momento. Además señalaban que la iniciativa favorecía los transgénicos, como pretendía la Ley Monsanto y esta nueva ley era otro intento de emularla. Diversos sectores de la sociedad se opusieron a la iniciativa, la cual tacharon de favorecer a empresas transnacionales.

La ley también sufrió varias “extrañas casualidades”. Luego de su publicación entraría en vigencia hasta 90 días después. El día después de su vigencia fue derogada, entre otras cosas por una enmienda que incluía la ampliación presupuestaria de un ministerio que nada tenía que ver con la ley.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER DE EMPRESA

El artículo 8 de la Ley del Organismo Judicial reza que no se puede revivir una ley derogada. Por lo tanto, cayó en el olvido.

¿Qué es una variedad vegetal?

Una de las incógnitas que tocó el panel “Situación Actual de las variedades vegetales en Guatemala” en el 1st Intellectual Property Summit fue definir qué es una variedad vegetal, su creación y su registro.

“La variedad vegetal es una subdivisión del rango más bajo del reino vegetal. Es un conjunto de plantas de un solo taxón o categoría botánica del rango más bajo conocido”, según explica la Unión Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales (UPOV).

“Una variedad debe definirse por medio de sus caracteres claramente distintos de los de cualquier otra variedad. Y que se mantendrán inalterados a través del proceso de reproducción o multiplicación” añade la entidad.

Iniciativa UPOV

Recientemente estuvo una misión de la UPOV en el país. Buscaba que el gobierno retome la iniciativa para que se promueva la investigación científica agrícola. Esto porque Guatemala posee uno de los más altos porcentajes de población que se dedica a la agricultura.

Tanto exponentes como representantes de la misión insistieron en que el mundo necesita nuevas tecnologías de investigación y diseño de variedades que puedan ser resistentes y de mejor calidad. Se mencionaron casos como en Nicaragua y Costa Rica, en donde hay variedades de café que resisten a la Roya. Además de otras variedades de frutas y vegetales que han sido modificados como banano, tomate, sandía, piña, caña de azúcar, frambuesa, entre otros.

Guatemala es de los últimos países en Latinoamérica que no protege los derechos de la variedad vegetal. Por lo tanto, está perdiendo competitividad en el mundo frente a países que están a la vanguardia en investigación agrícola. Los panelistas ven que esta problemática llegará a “morderlos en un futuro cercano si no se discute el tema y se hace algo al respecto”.

Una de las desventajas que ha provocado la falta de legislación es el retiro de universidades estadounidenses que querían invertir en investigación agrícola en Guatemala. Tal es el caso de la Universidad de IOWA.  Esta ya había iniciado a trabajar. Sin embargo, ante la falta de ratificación de tratados internacionales que impulsan esta área científica optó por irse. Esta situación ha desalentado la inversión. Por ejemplo, empresas que querían aprovechar la posición geográfica de Guatemala tuvieron que irse a México, en donde se sabe que han prosperado.

Se trabaja en una iniciativa técnica

Según Carla Caballeros, directora ejecutiva de la Cámara del Agro, lo que se hace en estos momentos es una iniciativa técnica con el acompañamiento de la UPOV para que cumpla con todos los estándares técnicos. Así no se crearán suspicacias. “Primero debe ser aprobada por la entidad que es reconocida a nivel mundial. Luego será presentada al Congreso para su discusión y que en algún momento se pueda aprobar”, comenta.

“Los representantes de UPOV se reúnen en octubre de cada año. Para entonces debe estar revisada y aprobada por el organismo internacional. Si no logran aprobarla en el tiempo establecido deberán esperar un año a la próxima reunión”, añade Caballeros.

Otra de las intenciones de la ley es reactivar el Instituto de Ciencias Tecnológicas Agrícolas ICTA. Esto para que confluyan entidades técnicas del gobierno, cooperativas y academia para realizar investigación y la creación de nuevas variedades de frutas y vegetales. Además, que se designe un presupuesto a la entidad para que pueda hacer investigación. Ya que según comentan, está en total abandono.

Otro de los puntos discutidos fue la conflictividad que puede tener la creación de la variedad frente a la protección de alimentos ancestrales. Se tomó en cuenta lo sucedido en Bolivia y Ecuador. En dichos países, las comunidades indígenas trabajan con el Estado para crear y mejorar los vegetales con el fin de exportarlos. Así se favorece a las comunidades y se generan ingresos para el Estado. Según informes científicos, la creación de una nueva especie ronda entre los 10 y 15 años.