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Las verdades eléctricas y desafiantes de RATM

Redacción República
01 de octubre, 2017

Versión Deluxe, es el blog de música de Luis Fernando Alejos y República

El DVD: Rage Against The Machine, Live at the Grand Olympic Auditorium. Editado en 2003, el material recopila lo que hubiera sido el concierto final del cuarteto poderoso en 2000. La desintegración, por fortuna, no fue eterna; aunque no han vuelto a entrar al estudio de grabación (y tal vez nunca lo hagan), sí han estado de gira, apoyados en un catálogo de al menos cuatro discos.

Pero Rage fue más que ventas de discos, listas de popularidad y rotación en MTV (Tim C., el bajista, fue arrestado temporalmente cuando interrumpió el discurso de aceptación de Limp Bizkit en los VMAs de 2000…, un acto performático bastante heroico). Su música siempre ha sido la voz necesaria para ilustrar la disparidad entre quienes ostentan el poder, y las poblaciones que reciben la mierda desde arriba.

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https://youtu.be/UQGtaI8sOgs

Bulls on Parade arranca la rebelión. No sería sino hasta escuchar el álbum Toxicity de System of a Down (o el Downward Spiral de Nine Inch Nails), que sentí la ira de un grupo de rock. O tal vez no estaba poniendo atención. Hace 17 años empezaba la era de George W. Bush, y el desencanto se palpaba. Killing in the name y Born of a broken man te hacen sentir en vivo las derrotas por venir. Una estrella roja enorme en el fondo del escenario, otra en la batería de Brad Wilk. Revolución. Revolución, amigos.

El rap de Zach De La Rocha fluye como el de un profeta moderno. Le recuerda al público acerca del asesinato del imigrante Amadou Diallo a manos de policías encubiertos de Nueva York, que luego fueron absueltos.

Denuncia el excesivo uso de fuerza policial durante la presentación de la banda, afuera de la Convención del Partido Demócrata. “American eyes, view the world from American eyes” escupe en No Shelter. Y eso que todavía no ocurría el 11 de septiembre, y eso que el magnate de bienes raíces todavía se dedicaba a amasar fortunas y a construir rascacielos, campos de golf, casinos. El culto al billete, pues.

La armonía entre Tim Commerford y el genio guitarrista Tom Morello es evidente en la primera parte del set, con Bombtrack, Calm like a Bomb y Bullet in the Head. How Could I Just Kill A Man introduce a Sen Dog y B. Real de Cypress Hill, un anticipo de lo que en 2016 escucharíamos con una semi-reencarnación alineada como Prophets of Rage; Chuck D. de Public Enemy también estaría en ese super grupo de hip hop y hard rock. “Tu ira es un regalo” nos recordaba De La Rocha, en un orgasmo sonoro como pocos.

La libertad venía con obligaciones en 2000. Freedom se siente igual de relevante en 2017, cuando la xenofobia, la supremacía blanca y una Casa Blanca estilo reality show son parte de lo que ahora llamamos “realidad”.

http://gph.is/1UObGPo

Los bonus tracks incluyen las canciones People of The Sun y Know Your Enemy, con un estilo progresivo bárbaro. Además, el mini concierto en la Convención del Partido Demócrata (con su respectivo despliegue de policías, caballos y balas de hule), además de los video clips de How Could I Just Kill A Man y Bombtrack.

https://youtu.be/EvtG1WlTwIg

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01 de octubre, 2017

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El DVD: Rage Against The Machine, Live at the Grand Olympic Auditorium. Editado en 2003, el material recopila lo que hubiera sido el concierto final del cuarteto poderoso en 2000. La desintegración, por fortuna, no fue eterna; aunque no han vuelto a entrar al estudio de grabación (y tal vez nunca lo hagan), sí han estado de gira, apoyados en un catálogo de al menos cuatro discos.

Pero Rage fue más que ventas de discos, listas de popularidad y rotación en MTV (Tim C., el bajista, fue arrestado temporalmente cuando interrumpió el discurso de aceptación de Limp Bizkit en los VMAs de 2000…, un acto performático bastante heroico). Su música siempre ha sido la voz necesaria para ilustrar la disparidad entre quienes ostentan el poder, y las poblaciones que reciben la mierda desde arriba.

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Bulls on Parade arranca la rebelión. No sería sino hasta escuchar el álbum Toxicity de System of a Down (o el Downward Spiral de Nine Inch Nails), que sentí la ira de un grupo de rock. O tal vez no estaba poniendo atención. Hace 17 años empezaba la era de George W. Bush, y el desencanto se palpaba. Killing in the name y Born of a broken man te hacen sentir en vivo las derrotas por venir. Una estrella roja enorme en el fondo del escenario, otra en la batería de Brad Wilk. Revolución. Revolución, amigos.

El rap de Zach De La Rocha fluye como el de un profeta moderno. Le recuerda al público acerca del asesinato del imigrante Amadou Diallo a manos de policías encubiertos de Nueva York, que luego fueron absueltos.

Denuncia el excesivo uso de fuerza policial durante la presentación de la banda, afuera de la Convención del Partido Demócrata. “American eyes, view the world from American eyes” escupe en No Shelter. Y eso que todavía no ocurría el 11 de septiembre, y eso que el magnate de bienes raíces todavía se dedicaba a amasar fortunas y a construir rascacielos, campos de golf, casinos. El culto al billete, pues.

La armonía entre Tim Commerford y el genio guitarrista Tom Morello es evidente en la primera parte del set, con Bombtrack, Calm like a Bomb y Bullet in the Head. How Could I Just Kill A Man introduce a Sen Dog y B. Real de Cypress Hill, un anticipo de lo que en 2016 escucharíamos con una semi-reencarnación alineada como Prophets of Rage; Chuck D. de Public Enemy también estaría en ese super grupo de hip hop y hard rock. “Tu ira es un regalo” nos recordaba De La Rocha, en un orgasmo sonoro como pocos.

La libertad venía con obligaciones en 2000. Freedom se siente igual de relevante en 2017, cuando la xenofobia, la supremacía blanca y una Casa Blanca estilo reality show son parte de lo que ahora llamamos “realidad”.

http://gph.is/1UObGPo

Los bonus tracks incluyen las canciones People of The Sun y Know Your Enemy, con un estilo progresivo bárbaro. Además, el mini concierto en la Convención del Partido Demócrata (con su respectivo despliegue de policías, caballos y balas de hule), además de los video clips de How Could I Just Kill A Man y Bombtrack.

https://youtu.be/EvtG1WlTwIg

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