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Sobre disputas y puntos de vista

Redacción
16 de octubre, 2017

Política en Guatemala es una palabra colectiva en la que no solo intervienen politólogos. Abarca todo lo sideral de la economía guatemalteca y se focaliza en una persona a la cual se mediatiza.

Abarca las necesidades de la comunidad mundial que en pro de un protagonismo satisface sus necesidades arrebatando al pueblo guatemalteco lo poco de su sentido de unidad para lograr sus propósitos. Esto es en cuanto a los comentarios vertidos en redes sociales sobre el actuar del guatemalteco.

Un ejemplo emblemático lo representa el partido de futbol jugado entre la selección de Panamá y Costa Rica que ha disputado discordia en el segundo gol del partido pues las cámaras televisivas captan que el balón no ingresó a la portería.

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Ese juego, donde el árbitro central es Walter Alexander López Castellanos validó el gol que dejó fuera a la selección de América. Sus actuaciones en Concacaf han sido comentadas por críticos lo que provoca decenas de millones de dólares de pérdidas en transmisión de partidos y artículos promocionales por la decisión de una sola persona.

Esa semana también en el ámbito político Zury Maité Ríos Sosa de Weller y Juan Francisco Soto intercambiaron opiniones sobre el caso de la comunidad Ixil en la cual fueron asesinadas 1,771 de su población en la cual se incluye mujeres y niños, ancianos, jóvenes. La disputa del encuentro entre la señora Ríos de Weller y El Señor Soto de Caldh polemizaron sobre el problema de destrucción cultural cuya participación de América aun es clasificada.

Los datos del cronista español Francisco Fuentes y Guzmán al referirse a los ixiles los considera una población rebelde ubicados en lo que ahora es Nebaj, San Juan Cotzal y Chajul los cuales entendían bien de guerra desde la época precolombina, sin embargo, fueron integrados a una república democrática dentro del consorcio de organizaciones que integra la Organización de las Naciones Unidas y que hoy empieza a ser cuestionada por las decisiones del presidente Donald Trump.

Ni la señora Ríos de Weller, ni el señor Soto, ni menos Juan José Gerardi Conedera podrán argumentar una reconstrucción forense sobre si los motivos son de política exterior y no de decisiones internas cuya validación corresponderá a otras generaciones.

Las disputas entre la abogada Telma Aldana y el abogado Iván Velásquez contra el Señor Presidente del Ejecutivo y por último los antejuicios promovidos contra el señor alcalde Álvaro Arzú, magnificados malignamente como Caja de Pandora dañaron la institucionalidad de Guatemala como república democrática y hoy debe decidirse sobre una corrupción que no rebasa un 1.6% de producto interno bruto era necesaria para el desgaste político guatemalteco. Cuál será el porcentaje de los países que respaldan el deterioro político del país más importante del continente para los guatemaltecos, el nuestro.

República es ajena a la opinión expresada en este artículo

Sobre disputas y puntos de vista

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16 de octubre, 2017

Política en Guatemala es una palabra colectiva en la que no solo intervienen politólogos. Abarca todo lo sideral de la economía guatemalteca y se focaliza en una persona a la cual se mediatiza.

Abarca las necesidades de la comunidad mundial que en pro de un protagonismo satisface sus necesidades arrebatando al pueblo guatemalteco lo poco de su sentido de unidad para lograr sus propósitos. Esto es en cuanto a los comentarios vertidos en redes sociales sobre el actuar del guatemalteco.

Un ejemplo emblemático lo representa el partido de futbol jugado entre la selección de Panamá y Costa Rica que ha disputado discordia en el segundo gol del partido pues las cámaras televisivas captan que el balón no ingresó a la portería.

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Ese juego, donde el árbitro central es Walter Alexander López Castellanos validó el gol que dejó fuera a la selección de América. Sus actuaciones en Concacaf han sido comentadas por críticos lo que provoca decenas de millones de dólares de pérdidas en transmisión de partidos y artículos promocionales por la decisión de una sola persona.

Esa semana también en el ámbito político Zury Maité Ríos Sosa de Weller y Juan Francisco Soto intercambiaron opiniones sobre el caso de la comunidad Ixil en la cual fueron asesinadas 1,771 de su población en la cual se incluye mujeres y niños, ancianos, jóvenes. La disputa del encuentro entre la señora Ríos de Weller y El Señor Soto de Caldh polemizaron sobre el problema de destrucción cultural cuya participación de América aun es clasificada.

Los datos del cronista español Francisco Fuentes y Guzmán al referirse a los ixiles los considera una población rebelde ubicados en lo que ahora es Nebaj, San Juan Cotzal y Chajul los cuales entendían bien de guerra desde la época precolombina, sin embargo, fueron integrados a una república democrática dentro del consorcio de organizaciones que integra la Organización de las Naciones Unidas y que hoy empieza a ser cuestionada por las decisiones del presidente Donald Trump.

Ni la señora Ríos de Weller, ni el señor Soto, ni menos Juan José Gerardi Conedera podrán argumentar una reconstrucción forense sobre si los motivos son de política exterior y no de decisiones internas cuya validación corresponderá a otras generaciones.

Las disputas entre la abogada Telma Aldana y el abogado Iván Velásquez contra el Señor Presidente del Ejecutivo y por último los antejuicios promovidos contra el señor alcalde Álvaro Arzú, magnificados malignamente como Caja de Pandora dañaron la institucionalidad de Guatemala como república democrática y hoy debe decidirse sobre una corrupción que no rebasa un 1.6% de producto interno bruto era necesaria para el desgaste político guatemalteco. Cuál será el porcentaje de los países que respaldan el deterioro político del país más importante del continente para los guatemaltecos, el nuestro.

República es ajena a la opinión expresada en este artículo