Política
Política
Empresa
Empresa
Investigación y Análisis
Investigación y Análisis
Internacional
Internacional
Opinión
Opinión
Inmobiliaria
Inmobiliaria
Agenda Empresarial
Agenda Empresarial

¿Será el gatillo?

Betty Marroquin
07 de noviembre, 2017

Con el pasar del tiempo hemos visto que si un ser humano quiere asesinar a otro, u otros, hasta un lápiz le funciona. Hemos visto asesinatos con un stiletto, piedras, cuchillos de cocina, pica-hielo, secadora de pelo, vehículo, y no digamos bombas caseras, entre otros miles de objetos. Prácticamente, cualquier cosa en casa puede ser usada para matar, queriendo. Fabricar una bomba es tan fácil como hacer una búsqueda en Google o en YouTube. Le dan a uno instrucciones escritas, dibujadas y hasta con video. Y en este mundo globalizado, sabemos muy bien que esto no es un problema exclusivo de los Estados Unidos. Ah, pero Dios libre atentar contra la sacrosanta libertad de expresión de las mentes enfermas que postean esa información.

Pregunto entonces, ¿es el gatillo el problema? Que yo sepa el gatillo normalmente no se dispara solito, como tampoco un carro se va sobre la gente sin que sea dirigido para hacerlo, ni una secadora cae en la bañera sólo “porque sí”. En todos los casos tiene que haber un ser humano detrás que aprieta el gatillo, empuña el cuchillo o maneja el vehículo. O sea que, no son “las cosas” solitas las que matan, son los individuos con mentes enfermas los que las utilizan para el efecto. Los individuos asesinan.

Los acontecimientos de Texas, Florida, New York, etc de las últimas semanas me llevan nuevamente a preguntarme, qué hace a un ser humano desear asesinar a otro, obviamente no estando en una situación de combate. Creo que se necesita tener más de un tornillo fuera de lugar en el cerebro para desear matar a otra persona, aunque algunos hacen de todo para que a uno se le zafe y uno se resiste… pero ese es otro tema. El punto es que siempre hay formas de resolver lo que nos molesta de otra persona sin necesidad de matarla. No quiere a su pareja, pues hay divorcio o separación, pero no la mate. No quiere a su vecino, a la maestra, a sus compañeros de clase, a la gente que reza en una iglesia que no le gusta, ¡ignórelos!

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

Pero estamos viviendo tiempos realmente absurdos. Haciendo research para este artículo puse diferentes palabras y combinaciones de palabras en Google y en todos los casos me salieron ejemplos espantosos de maldad humana. La locura no discrimina, evidentemente. Padres, madres, hijos, compañeros de colegio, niños, maestros, novios, ex lo que sea, se les zafa el tornillo y matan a quien caiga usando lo que se les pase por enfrente.

No es pues con control de armas que vamos a resolver los problemas. Si fuera así, en Guatemala los mareros ya no tendrían armas. Mientras haya mercado negro, el que quiere, encuentra. Mientras hayan enfermos mentales que buscan asesinar a otro, siempre habrá con que hacerlo.

El problema está en casa, en la TV, en los medios y estímulos que afectan mentes débiles. Vamos al cine y vanagloriamos la muerte. Hasta la música es violenta. El regetón, por ejemplo, es vulgar al máximo grado y habla de sexo y muerte. La música regiomontana, Texmex como le dicen, super violenta y vanagloria a los narcos. ¿Que dice todo eso de nuestra sociedad?

Los progres abogan por mayor tolerancia, pero sólo para lo que ellos quieren. He leído posts en Tweeter que instigan a asesinar a los políticos o incluso a nosotros analistas, que les resultamos incómodos. Así que de pacifistas, no tienen un sólo cabello.

Estudios del ramo han concluido que un niño que goza torturando animales indefensos demuestra los primeros síntomas de sociopatia y son psicópatas potenciales. Quizás si eso no fuera ignorado y fuera en su lugar tratado con cuidado ese niño no crecería torcido. Quizás. Todos asesino fue niño y debieran estudiar como fue esa niñez. ¿Qué habrán sufrido para llegar a convertirse en seres sin piedad, sin empatía, sin respeto por la vida ajena? Eso es lo que habría que resolver.

Es difícil esto, pero que falta guía espiritual, que la gente debe buscar más a Dios sin fanatismos, que es bueno tratar de entender que no todos vamos a pensar igual y que eso está bien. Es importante que quienes necesitan un medicamento para funcionar en sociedad lo tomen y tengan acceso al mismo reguladamente por expertos en el tema. Me parece obvio que se necesita más guía desde la niñez y más amor en lugar de tanto odio. Eso, es innegable.

Que hacer, pues no lo se. Pero siento que con prohibir cosas no se resuelve el problema, porque el problema somos los humanos.

República es ajena a la opinión expresada en este artículo

¿Será el gatillo?

Betty Marroquin
07 de noviembre, 2017

Con el pasar del tiempo hemos visto que si un ser humano quiere asesinar a otro, u otros, hasta un lápiz le funciona. Hemos visto asesinatos con un stiletto, piedras, cuchillos de cocina, pica-hielo, secadora de pelo, vehículo, y no digamos bombas caseras, entre otros miles de objetos. Prácticamente, cualquier cosa en casa puede ser usada para matar, queriendo. Fabricar una bomba es tan fácil como hacer una búsqueda en Google o en YouTube. Le dan a uno instrucciones escritas, dibujadas y hasta con video. Y en este mundo globalizado, sabemos muy bien que esto no es un problema exclusivo de los Estados Unidos. Ah, pero Dios libre atentar contra la sacrosanta libertad de expresión de las mentes enfermas que postean esa información.

Pregunto entonces, ¿es el gatillo el problema? Que yo sepa el gatillo normalmente no se dispara solito, como tampoco un carro se va sobre la gente sin que sea dirigido para hacerlo, ni una secadora cae en la bañera sólo “porque sí”. En todos los casos tiene que haber un ser humano detrás que aprieta el gatillo, empuña el cuchillo o maneja el vehículo. O sea que, no son “las cosas” solitas las que matan, son los individuos con mentes enfermas los que las utilizan para el efecto. Los individuos asesinan.

Los acontecimientos de Texas, Florida, New York, etc de las últimas semanas me llevan nuevamente a preguntarme, qué hace a un ser humano desear asesinar a otro, obviamente no estando en una situación de combate. Creo que se necesita tener más de un tornillo fuera de lugar en el cerebro para desear matar a otra persona, aunque algunos hacen de todo para que a uno se le zafe y uno se resiste… pero ese es otro tema. El punto es que siempre hay formas de resolver lo que nos molesta de otra persona sin necesidad de matarla. No quiere a su pareja, pues hay divorcio o separación, pero no la mate. No quiere a su vecino, a la maestra, a sus compañeros de clase, a la gente que reza en una iglesia que no le gusta, ¡ignórelos!

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

Pero estamos viviendo tiempos realmente absurdos. Haciendo research para este artículo puse diferentes palabras y combinaciones de palabras en Google y en todos los casos me salieron ejemplos espantosos de maldad humana. La locura no discrimina, evidentemente. Padres, madres, hijos, compañeros de colegio, niños, maestros, novios, ex lo que sea, se les zafa el tornillo y matan a quien caiga usando lo que se les pase por enfrente.

No es pues con control de armas que vamos a resolver los problemas. Si fuera así, en Guatemala los mareros ya no tendrían armas. Mientras haya mercado negro, el que quiere, encuentra. Mientras hayan enfermos mentales que buscan asesinar a otro, siempre habrá con que hacerlo.

El problema está en casa, en la TV, en los medios y estímulos que afectan mentes débiles. Vamos al cine y vanagloriamos la muerte. Hasta la música es violenta. El regetón, por ejemplo, es vulgar al máximo grado y habla de sexo y muerte. La música regiomontana, Texmex como le dicen, super violenta y vanagloria a los narcos. ¿Que dice todo eso de nuestra sociedad?

Los progres abogan por mayor tolerancia, pero sólo para lo que ellos quieren. He leído posts en Tweeter que instigan a asesinar a los políticos o incluso a nosotros analistas, que les resultamos incómodos. Así que de pacifistas, no tienen un sólo cabello.

Estudios del ramo han concluido que un niño que goza torturando animales indefensos demuestra los primeros síntomas de sociopatia y son psicópatas potenciales. Quizás si eso no fuera ignorado y fuera en su lugar tratado con cuidado ese niño no crecería torcido. Quizás. Todos asesino fue niño y debieran estudiar como fue esa niñez. ¿Qué habrán sufrido para llegar a convertirse en seres sin piedad, sin empatía, sin respeto por la vida ajena? Eso es lo que habría que resolver.

Es difícil esto, pero que falta guía espiritual, que la gente debe buscar más a Dios sin fanatismos, que es bueno tratar de entender que no todos vamos a pensar igual y que eso está bien. Es importante que quienes necesitan un medicamento para funcionar en sociedad lo tomen y tengan acceso al mismo reguladamente por expertos en el tema. Me parece obvio que se necesita más guía desde la niñez y más amor en lugar de tanto odio. Eso, es innegable.

Que hacer, pues no lo se. Pero siento que con prohibir cosas no se resuelve el problema, porque el problema somos los humanos.

República es ajena a la opinión expresada en este artículo