Nos debemos preguntar si como sociedad estamos dispuestos a participar en debates en donde las posturas y propuestas sean realmente discutidas para buscar una solución representativa con apoyo y entrar al debate con el ánimo de mejorar propuestas y dejar por un lado el pensamiento que todo tiene que ser blanco o negro. En este aspecto por experiencia propia he participado en diversos debates donde realmente las posturas y las propuestas son debatidas separadas de argumentos falaces; y de igual forma también he participado en procesos de dialogo en donde los organizadores lo único que pretenden con el dialogo era validar su propuesta original con un supuesto dialogo ya que el debate y argumentos expuestos tienen poco valor en la propuesta final.
Una virtud de debatir propuestas que buscan convertirse en política públicas o reformas Institucionales es que al momento en que un debate es realizado correctamente la propuesta que resulta de dicho debate tiene el apoyo de diversos sectores por lo que su implementación puede ser más eficiente que una propuesta sin consenso alguno ni apoyo de ningún tipo, más que el apoyo de quien impulsa el cambio.
Actualmente en Guatemala urge un debate serio sobre el diseño y funciones que tengan las diversas Instituciones de Guatemala, cómo podemos asegurar una justicia pronta, cómo podemos crear los incentivos económicos necesarios para ampliar las oportunidades a más ciudadanos, cómo podemos aprovechar la tecnología para el bienestar de los ciudadanos, cuál es el marco regulatorio que deberían tener los partidos políticos y los incentivos para ampliar la competencia y profesionalismo de los mismos. Hay muchos temas por debatir para proponer soluciones que tengan una representación y sean efectivos en su implementación para buscar el desarrollo del país pero el primer paso es estar dispuestos a debatir propuestas con argumentos reales y no querer imponer o hacer debates con el único objetivo de validar la propuesta original.
@joseecheve
República es ajena a la opinión expresada en este artículo
Nos debemos preguntar si como sociedad estamos dispuestos a participar en debates en donde las posturas y propuestas sean realmente discutidas para buscar una solución representativa con apoyo y entrar al debate con el ánimo de mejorar propuestas y dejar por un lado el pensamiento que todo tiene que ser blanco o negro. En este aspecto por experiencia propia he participado en diversos debates donde realmente las posturas y las propuestas son debatidas separadas de argumentos falaces; y de igual forma también he participado en procesos de dialogo en donde los organizadores lo único que pretenden con el dialogo era validar su propuesta original con un supuesto dialogo ya que el debate y argumentos expuestos tienen poco valor en la propuesta final.
Una virtud de debatir propuestas que buscan convertirse en política públicas o reformas Institucionales es que al momento en que un debate es realizado correctamente la propuesta que resulta de dicho debate tiene el apoyo de diversos sectores por lo que su implementación puede ser más eficiente que una propuesta sin consenso alguno ni apoyo de ningún tipo, más que el apoyo de quien impulsa el cambio.
Actualmente en Guatemala urge un debate serio sobre el diseño y funciones que tengan las diversas Instituciones de Guatemala, cómo podemos asegurar una justicia pronta, cómo podemos crear los incentivos económicos necesarios para ampliar las oportunidades a más ciudadanos, cómo podemos aprovechar la tecnología para el bienestar de los ciudadanos, cuál es el marco regulatorio que deberían tener los partidos políticos y los incentivos para ampliar la competencia y profesionalismo de los mismos. Hay muchos temas por debatir para proponer soluciones que tengan una representación y sean efectivos en su implementación para buscar el desarrollo del país pero el primer paso es estar dispuestos a debatir propuestas con argumentos reales y no querer imponer o hacer debates con el único objetivo de validar la propuesta original.
@joseecheve
República es ajena a la opinión expresada en este artículo