La defensa mediática de José Rubén Zamora
elPeriódico tergiversa o falla en trasladar información veraz al atribuir a una persona la autoría de la nota de The Economist, cuando en ese medio NO se firman las notas
El 12 de agosto recién pasado, el diario elPeriódico, publicó una nota que se tituló: “The Economist” José Rubén Zamora ha hecho una cruzada en contra de la corrupción en Guatemala. En ella, atribuyen a Mirza Shehnaz la autoría del artículo en The Economist en la sección Bello -que trata de asuntos latinoamericanos- y que en esa edición abordó la captura de Zamora. Esa nota se tituló: "The drift to authoritarianism accelerates in Central America. Guatemala arrests a crusading journalist"
Como ha sucedido desde la detención de Zamora, ha habido un esfuerzo nacional e internacional para defenderlo de lo que alegan es una "persecución política". Esa defensa ha tomado muchas formas y direcciones; la gran mayoría alegando la inocencia de Zamora y atacando el “carácter" de quienes le acusan, pero las instituciones y personas más serias, aunque preocupadas por la captura, se han limitado a exigir que en todo momento se respeten las garantías procesales y los derechos de Zamora; exigencias del todo atendibles, por supuesto.
La solidez del caso que se perfila en contra de Zamora se sabrá luego de que se cumpla el plazo de 3 meses que diera el juez al Ministerio Publico para investigar y presentar acusación. Entonces, el juez contralor deberá considerar si los elementos aportados por el MP son suficientes para sustentar la acusación y si se debe enviar a debate oral a los acusados (también ha sido sindicada la fiscal Samari Carolina Gómez).
Entonces, el fondo del asunto -de la acusación- no es lo que acá se aborda, sino cómo elPeriódico tergiversa o falla en trasladar información veraz al atribuir a una persona la autoría de la nota de The Economist, cuando en ese medio NO se firman las notas, pues adhiere a una vieja tradición, como ellos mismos lo explicaron hace algunos años
https://www.economist.com/the-economist-explains/2013/09/04/why-are-the-economists-writers-anonymous
En todo caso, el responsable de la sección Bello de esa publicación es su editor en jefe, Michel Reid, no Mirza Shehnaz, como se lo atribuye elPeriódico. Es posible que Sehnhaz haya sido la periodista junior que contactó a las fuentes en Guatemala para la elaboración de la nota, pero eso no la convierte en la autora de la nota como afirma elPeriódico que Shehnaz "firma" (sic) el artículo publicado en The Economist. Cuando se advierte que existe un articulado esfuerzo para defender a Zamora, se puede especular -mas no asegurar- que Shehnaz sea una pieza en el engranaje de la maquinaria de defensa. Eso pareciese.
Los méritos del caso en contra de Zamora deben sustanciarse en el proceso y no en medios internacionales que no tienen más que la limitada información que les proveen las fuentes conseguidas por los fixers que usualmente tienen sesgo. En periodismo, un fixer es una persona local que agiliza el trabajo de un corresponsal que trabaja en un país extranjero (Definición tomada de Wikipedia).
La campaña de defensa mediática de Zamora pretende ejercer presión en las autoridades judiciales y no solamente pronunciarse a favor de una persona, esto último algo que sería totalmente válido; ejercer presión, no lo es. Ejercer presión a autoridades judiciales para que resuelvan un asunto bajo su conocimiento por razones o argumentos distintos a los jurídicos es ilegal, tanto para que se condene, como para que se libere o se exima de responsabilidad a alguien que pudo haber cometido un delito.
La defensa mediática de José Rubén Zamora
elPeriódico tergiversa o falla en trasladar información veraz al atribuir a una persona la autoría de la nota de The Economist, cuando en ese medio NO se firman las notas
El 12 de agosto recién pasado, el diario elPeriódico, publicó una nota que se tituló: “The Economist” José Rubén Zamora ha hecho una cruzada en contra de la corrupción en Guatemala. En ella, atribuyen a Mirza Shehnaz la autoría del artículo en The Economist en la sección Bello -que trata de asuntos latinoamericanos- y que en esa edición abordó la captura de Zamora. Esa nota se tituló: "The drift to authoritarianism accelerates in Central America. Guatemala arrests a crusading journalist"
Como ha sucedido desde la detención de Zamora, ha habido un esfuerzo nacional e internacional para defenderlo de lo que alegan es una "persecución política". Esa defensa ha tomado muchas formas y direcciones; la gran mayoría alegando la inocencia de Zamora y atacando el “carácter" de quienes le acusan, pero las instituciones y personas más serias, aunque preocupadas por la captura, se han limitado a exigir que en todo momento se respeten las garantías procesales y los derechos de Zamora; exigencias del todo atendibles, por supuesto.
La solidez del caso que se perfila en contra de Zamora se sabrá luego de que se cumpla el plazo de 3 meses que diera el juez al Ministerio Publico para investigar y presentar acusación. Entonces, el juez contralor deberá considerar si los elementos aportados por el MP son suficientes para sustentar la acusación y si se debe enviar a debate oral a los acusados (también ha sido sindicada la fiscal Samari Carolina Gómez).
Entonces, el fondo del asunto -de la acusación- no es lo que acá se aborda, sino cómo elPeriódico tergiversa o falla en trasladar información veraz al atribuir a una persona la autoría de la nota de The Economist, cuando en ese medio NO se firman las notas, pues adhiere a una vieja tradición, como ellos mismos lo explicaron hace algunos años
https://www.economist.com/the-economist-explains/2013/09/04/why-are-the-economists-writers-anonymous
En todo caso, el responsable de la sección Bello de esa publicación es su editor en jefe, Michel Reid, no Mirza Shehnaz, como se lo atribuye elPeriódico. Es posible que Sehnhaz haya sido la periodista junior que contactó a las fuentes en Guatemala para la elaboración de la nota, pero eso no la convierte en la autora de la nota como afirma elPeriódico que Shehnaz "firma" (sic) el artículo publicado en The Economist. Cuando se advierte que existe un articulado esfuerzo para defender a Zamora, se puede especular -mas no asegurar- que Shehnaz sea una pieza en el engranaje de la maquinaria de defensa. Eso pareciese.
Los méritos del caso en contra de Zamora deben sustanciarse en el proceso y no en medios internacionales que no tienen más que la limitada información que les proveen las fuentes conseguidas por los fixers que usualmente tienen sesgo. En periodismo, un fixer es una persona local que agiliza el trabajo de un corresponsal que trabaja en un país extranjero (Definición tomada de Wikipedia).
La campaña de defensa mediática de Zamora pretende ejercer presión en las autoridades judiciales y no solamente pronunciarse a favor de una persona, esto último algo que sería totalmente válido; ejercer presión, no lo es. Ejercer presión a autoridades judiciales para que resuelvan un asunto bajo su conocimiento por razones o argumentos distintos a los jurídicos es ilegal, tanto para que se condene, como para que se libere o se exima de responsabilidad a alguien que pudo haber cometido un delito.