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Objetivismo y la naturaleza de la cognición

Redacción
12 de mayo, 2014
El principio de racionalidad del Objetivismoexige examinar racionalmente la naturaleza de la cognición del hombre.Observamos primero, que la función biológica de la mente es la cognición,evaluación y la regulación de la acción. La función básica de la conscienciahumana es la cognición, es decir, el darse cuenta de y conocer los hechos de larealidad. Como el hombre debe actuar, su supervivencia depende de queidentifique los hechos de la realidad para poder regular su acción de acuerdo alo identificado. Lo que conecta su cognición con la regulación de su acción esla evaluación. La evaluación es el proceso de identificar la relación benéficao dañina de algún aspecto de la realidad consigo mismo. Las evaluacionesgeneran deseos, emociones y metas. Si los valores y metas del hombre están enconflicto con los hechos de la realidad y con sus propias necesidades comoorganismo vivo, necesariamente y sin quererlo se encamina a la autodestrucción.Por eso es que la supervivencia del hombre requiere que la función evaluativade su consciencia se fundamente en una función cognitiva correcta, es decir,que sus valores y metas sean elegidos en el contexto de su conocimiento yentendimiento racional.Rand introdujo el término“psico-epistemomlogía” para designar el estudio de las operaciones mentales enlos niveles conscientes y subconscientes de la mente humana. Los procesosmentales pueden ser conscientes o subconscientes, volitivos o automáticos. Entodo acto de pensamiento existe una constante interacción entre las operacionesconscientes volitivas y las subconscientes automáticas.
La mente –la facultad de conocer, percibir, pensar, deliberar, juzgar ymemorizar –se forma por ejercitar laatención, observación, comparación y clasificación. La habilidad adquiridapor este ejercicio le permite a uno hacer observaciones ordenadas en suambiente. La mente consciente observa y establece conexiones entre susexperiencias. El subconsciente integra las conexiones y las automatiza. Eldesarrollo cognitivo de la mente involucra un proceso continuo deautomatización, por lo que al percibir o experimentar el mundo, no lo hacemosen un vacío cognitivo, sino que en un contexto automatizado. La eficacia de nuestras operacionesmentales depende del tipo de contexto que ha automatizado nuestro subconsciente.El proceso deformar, integrar y usar conceptos no es automático, sino volitivo. Recordemosque el hombre es un ser de consciencia volitiva.[1]Este proceso consiste en dirigir volitivamente como usar material nuevoconjuntamente con el automatizado. Ésta no es una habilidad innata, sinoadquirida, por lo que tiene que aprenderse. Esta habilidad de enfocar laatención en los hechos, observarlos, compararlos, clasificarlos e integrarlossin contradicción con el conocimiento previo, es la más importante de todo elaprendizaje, ya que todas las demás habilidades humanas dependen de que tanbien o tan mal se haya adquirido ésta.Esta habilidad es del método de adquirir yorganizar conocimiento, no el conocimientoparticular en sí. El método, por el cual la mente trata con su contenidocognitivo, programa el subconsciente determinando que tan eficiente oineficiente será su proceso de adquirir conocimiento, al establecer los hábitoscognitivos que adquiere. Esta habilidad le permitirá al hombre captar ladistinción entre consciencia y existencia, entre su mente y el mundo que lorodea, lo que le permite comprender que la función del primero es percibir elsegundo, desarrollando así su facultad crítica y su control sobre susoperaciones mentales.Pero la mente del hombre es maleable. Se puededesarrollar hasta convertirse en un formidable instrumento, o atrofiarse hastaconvertirse en un aparato inútil. La mente puede atrofiarse cuando en lugar de ejercitar la atención,observación, comparación y clasificación, reacciona a las aprobaciones odesaprobaciones de otros, reemplaza la evidencia con las opiniones de losdemás, y memoriza palabras cuya denotación permanecen confusas. Desarrolla asíun mal hábito cognitivo, originado, ya sea por negarse a ejercer su facultadracional, o porque de niño le enseñan a depender de una tutela que le enseña aaceptar contradicciones. Aprende, erróneamente, que no hay cosa que  se conecta con otra, que no hay respuestas, queno hay juicio certero, que lo incomprensible e impredecible  es lo normal. Aprende que lo importante no essaber, sino que llevarse bien con  elgrupo, de acuerdo a las vibraciones emocionales que cree adivinar en ellos. Seajusta por repetición, imitación y contagio emocional. Aprende que haypreguntas tabú, preguntas que no se hacen so pena de ser culpable de algún malinnato. Aprende que, sin importar lo que haga –ya sea que su acción sea buena omala, honesta o deshonesta –si la comunidad lo aprueba está bien, y si lodesaprueba está mal. La mente, así atrofiada, queda separada de la realidad a la que no haaprendido a identificar, y en su lugar se ve sumergida en un mundo de fantasíasy mentiras, las cuales cree reales. Pierde la capacidad de distinguir el entereal del ente de razón. No puede estar segura de lo que es verdad y de lo queno lo es, de lo que está allá afuera y lo que está sólo en su mente. Noadquiere la capacidad de distinguir entre existencia y consciencia.Como “siente” que debe agradar a la comunidad para conseguir suaprobación, oculta lo que realmente siente, sus auténticas emociones y aprendea simular las que cree se esperan, y así aprende a evadir y a reprimir. Llega atener tanto éxito en ocultar sus emociones a los otros que se las ocultaigualmente a sí mismo. Su subconsciente lo automatiza creando una crisis deidentidad. Carece de autoestima –pues nunca la formó –porque no tiene confianzaen su habilidad para identificar los hechos de la realidad, y por tanto se veincapaz de evaluar objetivamente, y por consiguiente actúa sin direcciónalguna. No llega a descubrir que las emociones no son instrumentos cognitivos,que su único instrumento cognitivo es la razón –la facultad que identifica eintegra el material proveído por los sentidos.El desarrollar el método racional de adquirir y organizar conocimiento es pues, una necesidadvital del hombre.


[1] Ver mi artículo: Objetivismo y el Hombre. República.gt.  Mayo 6, 2014.

Objetivismo y la naturaleza de la cognición

Redacción
12 de mayo, 2014
El principio de racionalidad del Objetivismoexige examinar racionalmente la naturaleza de la cognición del hombre.Observamos primero, que la función biológica de la mente es la cognición,evaluación y la regulación de la acción. La función básica de la conscienciahumana es la cognición, es decir, el darse cuenta de y conocer los hechos de larealidad. Como el hombre debe actuar, su supervivencia depende de queidentifique los hechos de la realidad para poder regular su acción de acuerdo alo identificado. Lo que conecta su cognición con la regulación de su acción esla evaluación. La evaluación es el proceso de identificar la relación benéficao dañina de algún aspecto de la realidad consigo mismo. Las evaluacionesgeneran deseos, emociones y metas. Si los valores y metas del hombre están enconflicto con los hechos de la realidad y con sus propias necesidades comoorganismo vivo, necesariamente y sin quererlo se encamina a la autodestrucción.Por eso es que la supervivencia del hombre requiere que la función evaluativade su consciencia se fundamente en una función cognitiva correcta, es decir,que sus valores y metas sean elegidos en el contexto de su conocimiento yentendimiento racional.Rand introdujo el término“psico-epistemomlogía” para designar el estudio de las operaciones mentales enlos niveles conscientes y subconscientes de la mente humana. Los procesosmentales pueden ser conscientes o subconscientes, volitivos o automáticos. Entodo acto de pensamiento existe una constante interacción entre las operacionesconscientes volitivas y las subconscientes automáticas.
La mente –la facultad de conocer, percibir, pensar, deliberar, juzgar ymemorizar –se forma por ejercitar laatención, observación, comparación y clasificación. La habilidad adquiridapor este ejercicio le permite a uno hacer observaciones ordenadas en suambiente. La mente consciente observa y establece conexiones entre susexperiencias. El subconsciente integra las conexiones y las automatiza. Eldesarrollo cognitivo de la mente involucra un proceso continuo deautomatización, por lo que al percibir o experimentar el mundo, no lo hacemosen un vacío cognitivo, sino que en un contexto automatizado. La eficacia de nuestras operacionesmentales depende del tipo de contexto que ha automatizado nuestro subconsciente.El proceso deformar, integrar y usar conceptos no es automático, sino volitivo. Recordemosque el hombre es un ser de consciencia volitiva.[1]Este proceso consiste en dirigir volitivamente como usar material nuevoconjuntamente con el automatizado. Ésta no es una habilidad innata, sinoadquirida, por lo que tiene que aprenderse. Esta habilidad de enfocar laatención en los hechos, observarlos, compararlos, clasificarlos e integrarlossin contradicción con el conocimiento previo, es la más importante de todo elaprendizaje, ya que todas las demás habilidades humanas dependen de que tanbien o tan mal se haya adquirido ésta.Esta habilidad es del método de adquirir yorganizar conocimiento, no el conocimientoparticular en sí. El método, por el cual la mente trata con su contenidocognitivo, programa el subconsciente determinando que tan eficiente oineficiente será su proceso de adquirir conocimiento, al establecer los hábitoscognitivos que adquiere. Esta habilidad le permitirá al hombre captar ladistinción entre consciencia y existencia, entre su mente y el mundo que lorodea, lo que le permite comprender que la función del primero es percibir elsegundo, desarrollando así su facultad crítica y su control sobre susoperaciones mentales.Pero la mente del hombre es maleable. Se puededesarrollar hasta convertirse en un formidable instrumento, o atrofiarse hastaconvertirse en un aparato inútil. La mente puede atrofiarse cuando en lugar de ejercitar la atención,observación, comparación y clasificación, reacciona a las aprobaciones odesaprobaciones de otros, reemplaza la evidencia con las opiniones de losdemás, y memoriza palabras cuya denotación permanecen confusas. Desarrolla asíun mal hábito cognitivo, originado, ya sea por negarse a ejercer su facultadracional, o porque de niño le enseñan a depender de una tutela que le enseña aaceptar contradicciones. Aprende, erróneamente, que no hay cosa que  se conecta con otra, que no hay respuestas, queno hay juicio certero, que lo incomprensible e impredecible  es lo normal. Aprende que lo importante no essaber, sino que llevarse bien con  elgrupo, de acuerdo a las vibraciones emocionales que cree adivinar en ellos. Seajusta por repetición, imitación y contagio emocional. Aprende que haypreguntas tabú, preguntas que no se hacen so pena de ser culpable de algún malinnato. Aprende que, sin importar lo que haga –ya sea que su acción sea buena omala, honesta o deshonesta –si la comunidad lo aprueba está bien, y si lodesaprueba está mal. La mente, así atrofiada, queda separada de la realidad a la que no haaprendido a identificar, y en su lugar se ve sumergida en un mundo de fantasíasy mentiras, las cuales cree reales. Pierde la capacidad de distinguir el entereal del ente de razón. No puede estar segura de lo que es verdad y de lo queno lo es, de lo que está allá afuera y lo que está sólo en su mente. Noadquiere la capacidad de distinguir entre existencia y consciencia.Como “siente” que debe agradar a la comunidad para conseguir suaprobación, oculta lo que realmente siente, sus auténticas emociones y aprendea simular las que cree se esperan, y así aprende a evadir y a reprimir. Llega atener tanto éxito en ocultar sus emociones a los otros que se las ocultaigualmente a sí mismo. Su subconsciente lo automatiza creando una crisis deidentidad. Carece de autoestima –pues nunca la formó –porque no tiene confianzaen su habilidad para identificar los hechos de la realidad, y por tanto se veincapaz de evaluar objetivamente, y por consiguiente actúa sin direcciónalguna. No llega a descubrir que las emociones no son instrumentos cognitivos,que su único instrumento cognitivo es la razón –la facultad que identifica eintegra el material proveído por los sentidos.El desarrollar el método racional de adquirir y organizar conocimiento es pues, una necesidadvital del hombre.


[1] Ver mi artículo: Objetivismo y el Hombre. República.gt.  Mayo 6, 2014.