El Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, sostien que “la corrupción es una amenaza para el desarrollo, la democracia y la estabilidad. Distorsiona los mercados, frena el crecimiento económico y desalienta la inversión extranjera”. Es por ello que debemos exigir a nuestras autoridades un uso eficiente, transparente y eficaz de los recursos públicos. Debemos dar seguimiento a que rindan cuentas sobre la aplicación de dichos recursos y los resultados obtenidos. La Convención Interamericana contra la Corrupción establece que “el combate contra la corrupción fortalece las instituciones democráticas, evita distorsiones de la economía, vicios en la gestión pública y el deterioro de la moral social”. 

Cuando vemos los diferentes noticieros del país y observamos a alcaldes, diputados, ministros y tantos funcionarios involucrados en actos de corrupción, muchas veces justificamos esas malas acciones y no nos percatamos del daño que le están haciendo al país y el robo que están haciendo a tantos guatemaltecos que viven en condiciones de pobreza.
Debemos dejar de ser tolerantes y velar porque la Contraloría General de Cuentas que cumpla su papel de fiscalizar a todas las organizaciones que administren o inviertan fondos del Estado y al Ministerio Público, que investigue aquellos casos de corrupción, con el objetivo de llevar ante los tribunales de Justica, a aquellos que quieren aprovechar su posición para robar dinero que podría ser utilizado para programas sociales y generar mayor desarrollo en el país.
El papel de la sociedad civil es fundamental para fortalecer las instituciones del Estado, es por ello que es importante que exijamos una reforma a la Ley de Compras y Contrataciones del Estado. @jczapata_s