La marca país es un término asociado al mercadeo, y se refiere al signo distintivo que identifica a un país. Este signo es creado principalmente para promover el turismo, pero también es utilizado para potenciar las oportunidades comerciales de un país, mejorar su imagen y reputación, hacerlo más competitivo y generar condiciones que permitan un desarrollo sostenible.
Es a través de una marca país que se busca ayudar a promover el turismo y de esta manera impulsar la inversión extranjera.
En Guatemala, en años recientes han sido tres las marcas de país que se han estipulado como los eslóganes: Espíritu Maya, Corazón del Mundo Maya y Alma de la Tierra. Si bien estas marcas constituyen un símbolo importante para el turismo, aún no es suficiente para entrar a un escenario de competencia internacional.
Escenas como la ocurrida ayer donde decenas de manifestantes bloquean la entrada al aeropuerto Internacional La Aurora, revelan claramente la poca importancia de las autoridades por mostrar la imagen de un país próspero y con enorme potencial, más allá del cultural.
Ayer decenas de viajeros se vieron obligados a cargar con maletas a pie porque la protesta bloqueaba el acceso de vehículos al aeropuerto. Diariamente, ante la imperante ingobernalidad derivada de los incesantes bloqueos en las últimas semanas, son exorbitantes las pérdidas económicas en el país. Estimaciones de la SAT revelan que la entidad deja de recibir Q43.76 millones diarios por impuestos al comercio exterior. Por concepto de bloqueos en carreteras y fronteras, las aduanas pierden en importaciones al día unos Q349.11 millones y por exportaciones, Q227.56 millones. Lo que se traduce en otras palabras en pérdidas de empleo.
El jueves último, ante los bloqueos realizados por maestros y salubristas en tres puertos, siete pasos fronterizos, tres tramos carreteros y el Aeropuerto Internacional Mundo Maya, Petén, el saldo fue de unos 200 mil contenedores que no pudieron ingresar o salir de los puertos, según estimaciones de Cutrigua.
Esto es una verdadera pena para un país con 9.6 millones de habitantes en condiciones de pobreza general y un 23.4% de pobreza extrema.
Luego de semanas de constantes manifestaciones de diversa índole pareciera que esto aún no es lo suficientemente alarmante para las autoridades, ya que no es motivo suficiente para hacerlos actuar. Todo lo contrario, las demandas parecieran ser cada día mayores. Prueba de ello, es que ayer estas muestras de insatisfacción y demandas sociales llegaron al límite de bloquear la entrada de los turistas y visitantes al aeropuerto La Aurora.
Esto lanza un nuevo mensaje. Ya no somos solamente un país inseguro y con pobreza latente, también prevalece el irrespeto a la libre locomoción de las personas y obstruyendo la vía pública a costa de lo que sea, inclusive la imagen del turista extranjero.
¿En estas condiciones qué inversión productiva puede venir a instalarse al país? ¿Cómo podremos fomentar empleo productivo y mejores condiciones? Simple, con reglas claras y un gobierno que en vez de tanta propuesta empiece a actuar en aras de un mejor país. Lo que todos esperamos: reglas claras, transparencia y gasto público eficiente que se refleje en mejores condiciones de vida para los guatemaltecos. La mejor marca país será aquella que más allá de un nombre lleve el slogan de un país libre de corrupción, donde los recursos del pueblo se inviertan en bienes públicos de calidad e infraestructura productiva que coadyuve a la atracción de inversiones en aras de promover mayores y mejores fuentes de empleo.
República.gt es ajena a la opinión expresada en este artículo
La marca país es un término asociado al mercadeo, y se refiere al signo distintivo que identifica a un país. Este signo es creado principalmente para promover el turismo, pero también es utilizado para potenciar las oportunidades comerciales de un país, mejorar su imagen y reputación, hacerlo más competitivo y generar condiciones que permitan un desarrollo sostenible.
Es a través de una marca país que se busca ayudar a promover el turismo y de esta manera impulsar la inversión extranjera.
En Guatemala, en años recientes han sido tres las marcas de país que se han estipulado como los eslóganes: Espíritu Maya, Corazón del Mundo Maya y Alma de la Tierra. Si bien estas marcas constituyen un símbolo importante para el turismo, aún no es suficiente para entrar a un escenario de competencia internacional.
Escenas como la ocurrida ayer donde decenas de manifestantes bloquean la entrada al aeropuerto Internacional La Aurora, revelan claramente la poca importancia de las autoridades por mostrar la imagen de un país próspero y con enorme potencial, más allá del cultural.
Ayer decenas de viajeros se vieron obligados a cargar con maletas a pie porque la protesta bloqueaba el acceso de vehículos al aeropuerto. Diariamente, ante la imperante ingobernalidad derivada de los incesantes bloqueos en las últimas semanas, son exorbitantes las pérdidas económicas en el país. Estimaciones de la SAT revelan que la entidad deja de recibir Q43.76 millones diarios por impuestos al comercio exterior. Por concepto de bloqueos en carreteras y fronteras, las aduanas pierden en importaciones al día unos Q349.11 millones y por exportaciones, Q227.56 millones. Lo que se traduce en otras palabras en pérdidas de empleo.
El jueves último, ante los bloqueos realizados por maestros y salubristas en tres puertos, siete pasos fronterizos, tres tramos carreteros y el Aeropuerto Internacional Mundo Maya, Petén, el saldo fue de unos 200 mil contenedores que no pudieron ingresar o salir de los puertos, según estimaciones de Cutrigua.
Esto es una verdadera pena para un país con 9.6 millones de habitantes en condiciones de pobreza general y un 23.4% de pobreza extrema.
Luego de semanas de constantes manifestaciones de diversa índole pareciera que esto aún no es lo suficientemente alarmante para las autoridades, ya que no es motivo suficiente para hacerlos actuar. Todo lo contrario, las demandas parecieran ser cada día mayores. Prueba de ello, es que ayer estas muestras de insatisfacción y demandas sociales llegaron al límite de bloquear la entrada de los turistas y visitantes al aeropuerto La Aurora.
Esto lanza un nuevo mensaje. Ya no somos solamente un país inseguro y con pobreza latente, también prevalece el irrespeto a la libre locomoción de las personas y obstruyendo la vía pública a costa de lo que sea, inclusive la imagen del turista extranjero.
¿En estas condiciones qué inversión productiva puede venir a instalarse al país? ¿Cómo podremos fomentar empleo productivo y mejores condiciones? Simple, con reglas claras y un gobierno que en vez de tanta propuesta empiece a actuar en aras de un mejor país. Lo que todos esperamos: reglas claras, transparencia y gasto público eficiente que se refleje en mejores condiciones de vida para los guatemaltecos. La mejor marca país será aquella que más allá de un nombre lleve el slogan de un país libre de corrupción, donde los recursos del pueblo se inviertan en bienes públicos de calidad e infraestructura productiva que coadyuve a la atracción de inversiones en aras de promover mayores y mejores fuentes de empleo.
República.gt es ajena a la opinión expresada en este artículo