Juan Manuel Asturias participó en las elecciones generales de 2023 con el Comité Cívico Futuro para la alcaldía de Antigua Guatemala (Sacatepéquez), obteniendo el puesto con 24.29% de los votos. Con experiencia en Administración de Empresas, Evaluación y Formación de Proyectos, gestión municipal, políticas públicas y desarrollo y conservación de ciudades patrimoniales, propuso un cambio para los antigüeños y sus visitantes.

La reforma municipal de Asturias promueve la transparencia, el ordenamiento territorial y la planificación de aldeas.

Uno de los primeros cambios realizados por el nuevo alcalde fue anunciado el segundo domingo de Cuaresma. Este involucra el proyecto de “La Antigua peatonal”, que, aunque ha sido elogiado, también ha sido criticado por guatemaltecos e internacionales. Asturias indica que esta medida no busca cerrar la ciudad, sino limitar el área, promoviendo la comodidad de los visitantes y la ruta de los peatones y procesiones. El objetivo primordial es dignificar la ciudad y resguardar sus tradiciones, pero ¿a qué costo?

El proyecto provee recomendaciones generales como:

• Los vehículos dentro del perímetro peatonal deben mantenerse bajo la velocidad de 20hm/h.
• Prohibición del estacionamiento en la vía pública dentro del perímetro peatonal. Con excepción de vehículos que buscan recoger o dejar personas de la tercera edad, embarazadas o con capacidades especiales.
• Dentro del perímetro se permite el uso de bicicleta, Tuc Tuc o el bus de la municipalidad.
• Los buses de la municipalidad están habilitados desde domingo a las 5:00 hasta la 1:00 del lunes posterior.
• Provisión de parqueos privados y públicos. Estos últimos tienen precio de Q. 20 el día completo (equivalente a la compra de marbete para visitantes).

Todas estas medidas parecen adecuadas para resguardar la ciudad colonial, sus tradiciones (principalmente en Semana Santa) y continuar conservado la ciudad para promover el turismo, dado que solamente en 2022, la Antigua Guatemala fue visitada por más de 300 mil turistas de todas partes del mundo.

No obstante, es necesario reconocer el costo de este plan y las pérdidas que se pueden sufrir por las nuevas limitaciones. De hecho, han surgido críticas y resistencia al cierre vehicular en el casco. Muchos empresarios critican que, dentro de las recomendaciones generales se restringen los horarios de abastecimiento para los negocios, para más tardar el sábado anterior al cierre de la Antigua a las 23:00.

El descontento deriva de que Semana Santa es la época más importante económicamente para la ciudad por la cantidad de turismo interno e internacional que atrae. Las fechas de la celebración coinciden con descansos en la mayoría de los países (Día de San Patricio —IRL—, Vacaciones de Primavera —EE. UU.—, Ramadán —EAU—, Pascua y otros), por lo que muchas personas se ven atraídas a vacacionar en Antigua Guatemala por su comodidad y atractivas festividades.

Estas limitaciones amenazan con reducir el turismo en la ciudad, a pesar de las conocidas tradiciones de Semana Santa, lo que puede resultar en una caída en la demanda de servicios, principalmente en el sector alimenticio.

El domingo era el día más productivo y de mayor consumo en la ciudad, sin embargo, en los primeros dos domingos del proyecto muchos negocios redujeron sus ventas hasta en un 50%. La mayoría de los restaurantes que han mantenido sus ventas lo han logrado debido a su cercanía con el parque central.

Las externalidades demuestran aspectos a solucionar en el proyecto. Aunque la protección de la ciudad colonial tendrá un efecto positivo en la defensa de la tradición y cultura guatemalteca, existen aspectos a solucionar con el fin de proteger al sector productivo —y motor económico— del país. El debilitamiento de estos también puede significar una reducción turística y económica para la Antigua.