Política
Política
Empresa
Empresa
Investigación y Análisis
Investigación y Análisis
Internacional
Internacional
Opinión
Opinión
Inmobiliaria
Inmobiliaria
Agenda Empresarial
Agenda Empresarial

No le pidan a Dios que guíe sus pasos, si no están dispuestos a mover los pies

Qué difícil es para la AGG el poder reconocer el esfuerzo, innovación, liderazgo y trayectoria de los gerentes que, por medio de sus empresas, generan empleos y solucionan cientos de problemas para tener un país más productivo…

Gerente del año
Melanie Müllers |
22 de noviembre, 2022

La semana pasada fue la premiación del Gerente del Año por parte de la Asociación de Gerentes de Guatemala, durante el evento se reconoce la labor de los Gerentes destacados a lo largo de su trayectoria.  Quisiera nuevamente expresar mi admiración a los nominados y a los premiados: Yeimy Moreno de Tigo Milicom, Héctor Paredes de Pharmalat (un genio la verdad), Carlos Solares de Elektra, Juan Pablo de León de Bantrab, Jeannette de Flores de Arrocera, Los Corrales, Adriana Lazcano de Grupo EPM, EEGSA, Nelly Castañeda de Grupo Génesis, Ramiro Castillo de Aceros de Guatemala, Waldim Rossal de Grupo Lala, Pablo Cordón de Ethikos Global, David Orozco de CianCoders, Jorge Shippers de Pacifko.com, Juan Luis Bosch Gutiérrez, de CMI Capital y Carlos Guzmán de Xelapan (felicidades también por el resultado en la maratón).

Qué difícil es para la AGG el poder reconocer el esfuerzo, innovación, liderazgo y trayectoria de los gerentes que, por medio de sus empresas, generan empleos y solucionan cientos de problemas para tener un país más productivo, para mí todos ellos son admirables y que orgullo contar con este calibre de gerentes para Guatemala.

¿Qué hace a un buen Gerente?

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

Habilidad para trabajar en equipo: Los buenos jefes son verdaderos jugadores de equipo, ven el potencial y las fortalezas de su equipo y sabe cómo funcionan mejor individualmente y en conjunto

Orientación con valores: Los valores que debe encarnar son: apertura, honestidad, transparencia y confianza. 

Confiabilidad: Si existe un alto nivel de confianza mutua en el equipo, se crea un buen ambiente de equipo. Ofrezca a su equipo la libertad que necesitan para desarrollarse. 

Equidad: Ser respetuoso y justo. A través de un comportamiento transparente y consistente, es importante establecer una interacción respetuosa en el equipo. Comunicar los errores en privado y proporciona comentarios regulares en reuniones individuales. Si su equipo tiene éxito, se celebra y todos estarán reconocidos. Sin embargo, por supuesto, también puede ser un caso de éxito individual. Es importante no escatimar en elogios y reconocimientos por un buen trabajo, de esta manera todos se sienten valorados.

Visión: Inspira a los buenos líderes, los buenos jefes comparten una visión clara y la comunican continuamente. De esta forma garantizan que todos entiendan el significado del trabajo en equipo. Una visión compartida hace que sus prioridades estén establecidas y sean accesibles. 

Empatía: Puedes empatizar bien con tus empleados, en los momentos críticos no te escondes, sino que estás presente y listo para el diálogo. 

Interés: Los buenos jefes están interesados ​​en nuevas ideas. Las nuevas ideas y puntos de vista amplían su perspectiva y le brindan la oportunidad de abordar nuevas tareas de manera crítica.

Claridad: Actúas con claridad y coherencia. Al hacer las órdenes de trabajo lo más claras posibles y actuar de manera consistente, se deja poco espacio para acusaciones y malentendidos.

Orientado al desempeño: Los buenos jefes apoyan y hacen el mejor uso posible del potencial de rendimiento de su equipo.

Retos: Aumentar la productividad de tu equipo, descubrir qué necesita su equipo para ser productivo. 

Autenticidad: Mantenerse fiel a sí mismo, su equipo perdonará sus errores si eres genuino y sincero al respecto.

Valentía: Los buenos jefes son valientes, comunicar los errores como un proceso de aprendizaje. Es la única forma en poder crecer y desarrollarse.  

Si tiene todas las cualidades mencionadas y puede atribuírselas a usted mismo, felicidades. Si aún no está seguro acerca de algunos puntos, no es un problema, porque siempre se puede aprender. Pero no le pidan a Dios que guíen sus pasos, si no están dispuestos a mover los pies.

No le pidan a Dios que guíe sus pasos, si no están dispuestos a mover los pies

Qué difícil es para la AGG el poder reconocer el esfuerzo, innovación, liderazgo y trayectoria de los gerentes que, por medio de sus empresas, generan empleos y solucionan cientos de problemas para tener un país más productivo…

Melanie Müllers |
22 de noviembre, 2022
Gerente del año

La semana pasada fue la premiación del Gerente del Año por parte de la Asociación de Gerentes de Guatemala, durante el evento se reconoce la labor de los Gerentes destacados a lo largo de su trayectoria.  Quisiera nuevamente expresar mi admiración a los nominados y a los premiados: Yeimy Moreno de Tigo Milicom, Héctor Paredes de Pharmalat (un genio la verdad), Carlos Solares de Elektra, Juan Pablo de León de Bantrab, Jeannette de Flores de Arrocera, Los Corrales, Adriana Lazcano de Grupo EPM, EEGSA, Nelly Castañeda de Grupo Génesis, Ramiro Castillo de Aceros de Guatemala, Waldim Rossal de Grupo Lala, Pablo Cordón de Ethikos Global, David Orozco de CianCoders, Jorge Shippers de Pacifko.com, Juan Luis Bosch Gutiérrez, de CMI Capital y Carlos Guzmán de Xelapan (felicidades también por el resultado en la maratón).

Qué difícil es para la AGG el poder reconocer el esfuerzo, innovación, liderazgo y trayectoria de los gerentes que, por medio de sus empresas, generan empleos y solucionan cientos de problemas para tener un país más productivo, para mí todos ellos son admirables y que orgullo contar con este calibre de gerentes para Guatemala.

¿Qué hace a un buen Gerente?

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

Habilidad para trabajar en equipo: Los buenos jefes son verdaderos jugadores de equipo, ven el potencial y las fortalezas de su equipo y sabe cómo funcionan mejor individualmente y en conjunto

Orientación con valores: Los valores que debe encarnar son: apertura, honestidad, transparencia y confianza. 

Confiabilidad: Si existe un alto nivel de confianza mutua en el equipo, se crea un buen ambiente de equipo. Ofrezca a su equipo la libertad que necesitan para desarrollarse. 

Equidad: Ser respetuoso y justo. A través de un comportamiento transparente y consistente, es importante establecer una interacción respetuosa en el equipo. Comunicar los errores en privado y proporciona comentarios regulares en reuniones individuales. Si su equipo tiene éxito, se celebra y todos estarán reconocidos. Sin embargo, por supuesto, también puede ser un caso de éxito individual. Es importante no escatimar en elogios y reconocimientos por un buen trabajo, de esta manera todos se sienten valorados.

Visión: Inspira a los buenos líderes, los buenos jefes comparten una visión clara y la comunican continuamente. De esta forma garantizan que todos entiendan el significado del trabajo en equipo. Una visión compartida hace que sus prioridades estén establecidas y sean accesibles. 

Empatía: Puedes empatizar bien con tus empleados, en los momentos críticos no te escondes, sino que estás presente y listo para el diálogo. 

Interés: Los buenos jefes están interesados ​​en nuevas ideas. Las nuevas ideas y puntos de vista amplían su perspectiva y le brindan la oportunidad de abordar nuevas tareas de manera crítica.

Claridad: Actúas con claridad y coherencia. Al hacer las órdenes de trabajo lo más claras posibles y actuar de manera consistente, se deja poco espacio para acusaciones y malentendidos.

Orientado al desempeño: Los buenos jefes apoyan y hacen el mejor uso posible del potencial de rendimiento de su equipo.

Retos: Aumentar la productividad de tu equipo, descubrir qué necesita su equipo para ser productivo. 

Autenticidad: Mantenerse fiel a sí mismo, su equipo perdonará sus errores si eres genuino y sincero al respecto.

Valentía: Los buenos jefes son valientes, comunicar los errores como un proceso de aprendizaje. Es la única forma en poder crecer y desarrollarse.  

Si tiene todas las cualidades mencionadas y puede atribuírselas a usted mismo, felicidades. Si aún no está seguro acerca de algunos puntos, no es un problema, porque siempre se puede aprender. Pero no le pidan a Dios que guíen sus pasos, si no están dispuestos a mover los pies.