La Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) desistió de contratar a a una empresa privada para aumentar la recaudación de los impuestos a cambio de una comisión del 30 por ciento después del rechazo y las críticas que recibió de diversos sectores del país.

El anunció lo hizo el jefe de la SAT, Carlos Muñoz, por medio de un comunicado, siguiendo las instrucciones del Directorio que desistió de la medida. Muñoz desmintió también que la empresa argentina Kolektor fuera la designada para otorgar esa asesoría. 

El jefe de la SAT dijo que ahora el Directorio le dio instrucciones para que se instalen mesas técnicas para analizar estrategias que permitan mejorar la recaudación. 

El pasado lunes durante una citación con la bancada de la UNE, los funcionarios de la SAT reconocieron que tenían intención de contratar a una empresa extranjera  para que diera asesoría para aumentar la recaudación de los tributos. 

El contrato costaría unos Q80 millones y una comisión de hasta 30 por ciento sobre la recaudación, pero la SAT negó haber solicitado recursos adiciones al Ministerio de Finanzas para implementar el plan. Sin embargo, el traslado de fondos se oficializó con el decreto 10-2014 que se publicó el 29 de mayo. 

El presidente Otto Pérez negó que la contratación de esta empresa fuera a sustituir o privatizar a la SAT. El mandatario dijo que se trabajaría en una licitación con la participación de varias empresas, entre ellas, la argentina, una mexicana, y otras, pero no dio nombres ni detalles. 

Al conocerse la noticia, el Sindicato de Trabajadores de la SAT (Sitrasat) exigió la renuncia de Carlos Muñoz por encabezar un proceso poco transparente e innecesario que delegaba las funciones de esa entidad. Muñoz nunca respondió sobre la petición para que renunciara al cargo. 

Durante la avalancha de criticas se conoció también que la SAT cobra el 2 por ciento de lo que recauda por impuestos, aproximadamente mil millones de quetzales anuales.
Varios analistas coincidieron en señalar que no era correcto por parte de la SAT ceder una parte de sus funciones, porque hacerlo significaba que se estaba declarando incompetente de hacer el trabajo. Los integrantes de la SAT habían realizado 12 viajes a la Argentina donde están las oficinas de Kolektor. 

El Directorio había conocido y aprobado el dictamen 45-2014, que justificaba la contratación de una empresa que preste “servicios de asesoría con acompañamiento para la mejora de los sistemas y procedimientos para la recaudación”, con el objetivo de “fortalecer la administración tributaria y aduanera”.

A mayo de este año, la SAT tenía un agujero fiscal de Q600 millones por baja recaudación, lo que se ha traducido en la contención del gasto público, que provocó, entre otras cosas en la renuncia de la Ministra de Finanzas, Maria Castro. 

El Gobierno debe pagar el próximo mes, el Bono 14 por un monto de Q600 millones, más otra cantidad igual por el sueldo de los burócratas. Asimismo, Q22 millones de deuda electoral que se paga a los partidos políticos, según los votos obtenidos en las pasadas elecciones y que se cancelan en el mes de julio durante cuatro años.