Las empresas guatemaltecas Pollo Campero, al Macarone, Helados Sarita, pastelería Genba o marcas internacionales como McDonald´s, GoGreen, Helados Pops o Starbucks vieron una ventaja en el modelo de negocio de franquicia para crecer a nivel nacional o internacional.

En Centroamérica este modelo se ha convertido en una opción de inversión y desarrollo empresarial para emprendedores e inversionistas que desean comenzar un negocio de helados, comida, pastelerías, paquetería, mensajería, materiales de construcción, salones de belleza y academias, entre otros.

Por ejemplo, en Guatemala existen 450 marcas de franquicias instaladas y más de siete mil unidades franquiciadas según los datos de la Asociación Guatemalteca de Franquicias (AGF).

“En la ciudad de Guatemala se localiza la mayor cantidad de franquicias. Le siguen los departamentos de Quetzaltenango y Alta Verapaz”, dice Juan Felipe Destarac, presidente de la AGF. Aclara que la población y el nivel de urbanización también son fundamentales para elegir uno de los diferentes modelos de franquicias que existen.

Se estima que el monto mínimo que una persona debe invertir en este modelo de negocio es de Q70 mil (US$9 mil), pero también puede llegar a costar varios millones, según Fernández, aunque considera que estos rangos son buenos porque son amplios.

Mientras que para una microfranquicia una persona debe necesitar mínimo Q20 mil, unos US$2 mil 500, hasta un máximo de Q150 mil, es decir unos US$20 mil, incluyendo en esta inversión todo lo necesario para que el negocio pueda funcionar, de acuerdo con el sitio web Franquicias502.com

Cobertura

“La apuesta de las franquicias, pero sobre todo de los negocios, está en las ciudades intermedias ya que se convertirán en centros urbanos muy importantes", señala José Fernández, director Ejecutivo de la AGF.

Agrega que Cobán, San Pedro Carchá, Tactic y Chimaltenango, son algunos de los destinos en donde hay más posibilidades de crecimiento. Además, los sectores de restaurantes y alimentos y bebidas representa el 50% de la oferta.

Y los servicios personales como: gimnasios, estéticas, salones de belleza, centros de aprendizaje de idiomas y educación, también han reportado crecimiento, así como el comercio a minoristas, las tiendas al detalle y tiendas de barrio.

Ventajas del modelo de negocio

El propietario de un negocio o gerente (el franquiciador) le permite a alguien comercializar productos o servicios utilizando su nombre, marca registrada y lo más importante, su formato de negocio prescrito. A cambio del uso del nombre y el sistema, el franquiciado – como se llama a esa persona u organización – paga una cuota de entrada o de franquicia y, por lo general, una regalía continua, de acuerdo con Vesco Consultores.

Y el franquiciado también asume los costes de la puesta en marcha del negocio franquiciado.

Con este modelo de negocio las marcas y los guatemaltecos pueden crecer en conjunto con socios locales. Las primeras se podrán expandir de forma rápida y confiable y los segundos podrán hacer crecer su localidad y generar fuentes de empleo en sus municipios o departamentos donde operen estos comercios, explica Fernández.

Además, considera que la principal ventaja es la reducción del riesgo, porque cuando se invierte en un modelo de negocio probado, se reduce el riesgo, "no se tiene que inventar el negocio, alguien ya lo hizo", confirma Fernández.

Agrega que "la gran propuesta del valor del modelo de una franquicia para un emprendedor o inversionista es la reducción de riesgo. En esencia es reducir el riesgo y aumentar las oportunidades de éxito. La tasa de éxito de una franquicia es más del 70%", asegura Fernández.

Por último, comenta que "la actitud y aptitud del emprendedor son esenciales, pero también es importante que sigan los consejos, instrucciones para que el esquema de franquicia funcione de una mejor manera, y de preferencia deben de tener un perfil comercial, es decir, que tenga gusto por las ventas y trato con las personas".