En Guatemala 11 ingenios producen azúcar y han tomado medidas para hacer uso eficiente del agua, lo que les permite ser ambientalmente sostenibles.
Entre las medidas adoptadas por los ingenios figura la inversión en equipos de riego más eficientes; así como el desarrollo de tecnologías para reducir el uso del agua en riego.
Una de ellas es la app Cengiriegos, la cual utiliza la información de estaciones meteorológicas respecto de condiciones de suelos, humedad, y la etapa de crecimiento de la caña para determinar la cantidad de agua que se necesita.
Adicional, el 72% del agua que la caña necesita para crecer, lo obtiene de la lluvia, y el 70% de la caña de azúcar es agua, ese líquido también es aprovechado durante el proceso industrial.
Además, los ingenios han implementado sistemas de recirculación y reutilización de agua que permiten una reducción del vital líquido en el proceso de producción de azúcar.
De esa cuenta es que cada tonelada de caña producida en Guatemala utiliza un 38% menos agua que la producida a nivel mundial de acuerdo con el estudio de Huella Hídrica, realizado por el Instituto Privado de Investigación sobre Cambio Climático (ICC).
Además, los ingenios azucareros, mediante el Centro Guatemalteco de Investigación y Capacitación de la Caña de Azúcar (Cengicaña), han promovido el desarrollo de variedades de caña más resistentes al estrés hídrico y tienen mejor adaptación al cambio climático.
Gestión integral del agua
En Guatemala, el agua de los ríos es usada por comunidades y municipalidades para abastecimiento de poblaciones y por productores agrícolas. Los ingenios usan agua de los ríos con tomas controladas sin interrumpir el curso natural del afluente.
Todos los ingenios participan de manera activa en mesas técnicas de usuarios en ríos de la Costa Sur. Las cuales son un modelo exitoso de gestión del agua y están integradas por comunitarios, autoridades locales y usuarios del agua.
La Agroindustria Azucarera, desde 2011, en alianza con el ICC, inició un programa para el cuidado de las cuencas. Se ha enfocado principalmente en la reforestación en las cuencas de la vertiente del Pacífico.
Se han sembrado alrededor de 6 millones de árboles hasta 2020 para mejorar la capacidad de recarga hídrica. Con ello se contribuye al incremento de la cobertura boscosa del país.
En Guatemala 11 ingenios producen azúcar y han tomado medidas para hacer uso eficiente del agua, lo que les permite ser ambientalmente sostenibles.
Entre las medidas adoptadas por los ingenios figura la inversión en equipos de riego más eficientes; así como el desarrollo de tecnologías para reducir el uso del agua en riego.
Una de ellas es la app Cengiriegos, la cual utiliza la información de estaciones meteorológicas respecto de condiciones de suelos, humedad, y la etapa de crecimiento de la caña para determinar la cantidad de agua que se necesita.
Adicional, el 72% del agua que la caña necesita para crecer, lo obtiene de la lluvia, y el 70% de la caña de azúcar es agua, ese líquido también es aprovechado durante el proceso industrial.
Además, los ingenios han implementado sistemas de recirculación y reutilización de agua que permiten una reducción del vital líquido en el proceso de producción de azúcar.
De esa cuenta es que cada tonelada de caña producida en Guatemala utiliza un 38% menos agua que la producida a nivel mundial de acuerdo con el estudio de Huella Hídrica, realizado por el Instituto Privado de Investigación sobre Cambio Climático (ICC).
Además, los ingenios azucareros, mediante el Centro Guatemalteco de Investigación y Capacitación de la Caña de Azúcar (Cengicaña), han promovido el desarrollo de variedades de caña más resistentes al estrés hídrico y tienen mejor adaptación al cambio climático.
Gestión integral del agua
En Guatemala, el agua de los ríos es usada por comunidades y municipalidades para abastecimiento de poblaciones y por productores agrícolas. Los ingenios usan agua de los ríos con tomas controladas sin interrumpir el curso natural del afluente.
Todos los ingenios participan de manera activa en mesas técnicas de usuarios en ríos de la Costa Sur. Las cuales son un modelo exitoso de gestión del agua y están integradas por comunitarios, autoridades locales y usuarios del agua.
La Agroindustria Azucarera, desde 2011, en alianza con el ICC, inició un programa para el cuidado de las cuencas. Se ha enfocado principalmente en la reforestación en las cuencas de la vertiente del Pacífico.
Se han sembrado alrededor de 6 millones de árboles hasta 2020 para mejorar la capacidad de recarga hídrica. Con ello se contribuye al incremento de la cobertura boscosa del país.