En las profundidades del lago Petén Itzá, un equipo de exploradores liderado por la organización Ecobuceo-Petén, encabezada por Francisco David Penados, ha realizado descubrimientos que podrían cambiar la percepción que tenemos sobre la historia precolombina de la región. Entre lo hallado, se encuentra un cenote con peculiaridades únicas y formaciones rocosas que evocan a antiguas edificaciones mayas.

Lo que se debe saber. El comunicador Cesar Soler, a través de su plataforma en redes sociales, ha sido el encargado de difundir estas maravillas. Según relata, el equipo se ha sumergido más allá de los 45 metros de profundidad, encontrando desde formaciones piramidales hasta lo que parece ser una ciudad sumergida.

• La exploración reveló un cenote denominado Joboo, caracterizado por sus distintas coloraciones de agua a diversas profundidades, y una concentración de azufre que desafía la resistencia de los buzos.
• “El lago parece infinito por sus maravillas,” explica Penados, destacando la rica biodiversidad y los misterios históricos que aún aguardan ser descubiertos.
• Además de las formaciones naturales, el equipo de Ecobuceo-Petén se encontró con una formación rocosa similar a un cocodrilo y otras que recuerdan a los templos mayas. Esta especie de "ciudad sumergida" hallada a 43.2 metros de profundidad plantea interrogantes sobre la posible existencia de una civilización maya en esta ubicación y si el área pudo haber sido parte del mar en el pasado, como sugieren los restos de conchas encontrados.