El partido Movimiento Semilla solamente logró una alcaldía, mientras que el partido Vamos alcanzó 132, Cabal 50 y la UNE 39; lo que implicaría que Bernardo Arévalo asumiría con un poder local adverso a su gestión, siempre que los jefes ediles decidan mantener la fidelidad ideológica y política con el actual partido oficial. 

• Sin embargo, la historia ha demostrado que la mayoría de los alcaldes prefiere mantener una cálida relación con el Ejecutivo, pues en este organismo es donde se delinea el listado geográfico de obras y el presupuesto de la nación.

Panorama general. Semilla solo ganó una de las 340 municipalidades, se trata de Palestina de Los Altos, Quetzaltenango que solo cuenta con 16 mil 205 habitantes, según el censo 2018. En tanto, el partido Vamos arrasó con la mayoría de las alcaldías. Sumado a que aseguró 40 curules en el Congreso, y se consolidó como la primera fuerza en el Organismo Legislativo.

• Si el partido, que llevó a la presidencia a Giammattei, logra mantenerse unido y decide complicar el trabajo del Ejecutivo, podría poner cuesta arriba la relación con los alcaldes que al final buscan proyectos para congraciarse con sus electores. 
   
• No obstante, el Ejecutivo no puede tomar distancia de las comunas, pues necesita ese enlace con los 340 municipios.

En el radar. En el primer año de gobierno de Arévalo será la elección de las nuevas autoridades de la Asociación Nacional de Municipalidades (ANAM), entidad creada para defender la autonomía y los intereses de los gobiernos locales. El Ejecutivo suele tener un favorito, pero habrá que esperar cómo lo manejará el gobierno de Semilla, que ha insistido en no caer en prácticas similares a las del pasado.

• La ANAM tiene participación en las directivas de 14 entidades. Entre ellas, el Instituto Nacional de Electrificación (INDE), el Instituto de Fomento Municipal, Plan de Prestaciones del Empleado Municipal y Registro de Información Catastral.

Voces. La politóloga Celia Luna considera que algunos alcaldes buscarán al partido oficial para contar con su apoyo, lo que no significa que vayan a sumarse a sus filas. Sin embargo, el gobierno electo también podría iniciar con ese acercamiento para tener respaldo, pues no cuenta con mayoría en el Congreso.

• “Las comunas necesitan hacer obra, aunque no sea obra física, pero sí necesitan llevar a la población proyectos que están muy centralizados”, destacó.

Visto y no visto. Para la consultora Diestra, el hecho de que Semilla haya logrado menos alcaldías que el proceso anterior, donde sumó tres, evidencia dos teorías: Es un partido débil respecto a sus liderazgos internos, por lo que no ha entendido cómo funciona el poder local o no ha querido doblegarse a los cacicazgos locales. 

• “La otra teoría se debe al voto cruzado, pues antes se miraba con fuerza en el área metropolitana y ahora lo hemos visto presente en el área rural”, según el análisis de Diestra. 
   
• “El partido Semilla necesita tener el mayor número de aliados posibles, pues solo logró una comuna. No hay duda que el gobierno se tendrá que acercar a algunas municipalidades que tienen bastante fuerza, incluso a nivel departamental y otras no dudarán en acercarse al gobierno”, resaltó la consultora. 

Hemeroteca.  En el proceso de 2019, el partido Semilla, que competía por primera vez, logró tres alcaldías en los municipios de San José la Máquina y Santo Tomás la Unión, del departamento de Suchitepéquez, y en el municipio de Chiché, del departamento de Quiché.