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Así construyó Alejandro Sinibaldi su red de corrupción, según testigo

Glenda Sanchez
07 de septiembre, 2018

Alejandro Sinibaldi, exministro de Comunicaciones que se encuentra prófugo de la justicia, es acusado de cobrar sobornos de hasta el 15% a los contratistas y constructoras que prestaban sus servicios en esa dependencia.

La declaración de una de sus asistentes reveló el origen de la estructura que usó Sinibaldi para exigir, presionar, cobrar y depositar los sobornos de los contratistas del Estado.

Además, habló con las autoridades del Ministerio Público (MP), acerca de los millonarios sobornos que exigió, las formas cómo pagaban los contratistas y la creación de más de 40 empresas, previó a su llegada al Ministerio, las cuales fueron usadas para depositar los sobornos.

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El expediente de la red

En un folio de 147 páginas se encuentra la declaración de Aneliese Mercedes Herrera Monterroso, exasistente de Alejandro Sinibaldi, quien dio su testimonio al Ministerio Público (MP), en febrero de este año.

La declaración resume los casi diez años que ella acompañó al exministro de Comunicaciones en sus operaciones y negocios, desde antes de llegar como titular de la cartera.

El documento al que tuvo acceso República, detalla los negocios de empresas de publicidad que funcionaban legalmente, pero que conforme el tiempo Sinibaldi las vendió porque las consideró un obstáculo, pues ya tenía pensado postularse para alcalde y de permanecer con las compañías, podría causarle problemas con el Tribunal Supremo Electoral (TSE).

“El señor Sinibaldi; ellos empezaron con la empresa de publicidad de los muppies en la zona viva, muppies que los compraba la empresa dueña de ellos, valga la aclaración que era Astel Guatemala”, se lee en el documento.

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Empresas y offshores

La testigo cuenta que Sinibaldi, con apoyo de varias personas, en 2008 creó más de 40 empresas Offshore que más adelante serían utilizadas para depositar los sobornos. Aclaró que a finales de 2005 le pidieron que fuera presidenta de una de estas empresas constituida en Panamá, Summerhill Holdings lnc.

“En ese momento no me dieron explicación del porqué, solamente me dijeron ‘mire esta offshore es nuestra y necesito cambiar a los directivos (…) usted va ser la presidenta, y los contadores van hacer los secretarios y tesoreros’, esa orden yo la recibo por parte del licenciado Jegerlehner”, contó Herrera Monterroso.

Luego de recordar que asumió como presidente de esa offshore, citó varias de las firmas que fueron creadas en 2008. Entre esas empresas mencionó: Inversiones Napoleón, Espectaculares Urbanos, Inversiones Napoleón, Gigantes Urbanos, Servicios Troya, Impresos Urbanos.

Herrera Monterroso resumió todos los negocios de Sinibaldi y las personas que lo ayudaron hasta llegar al Ministerio de Comunicaciones.

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Reuniones y sobornos

Ya estando como Ministro, según la testigo, Sinibaldi empieza a coordinar cuándo, a quién y cómo se le iba a pagar a las empresas que se les debía por trabajos carreteros, limpia, construcciones.

En 2012 recién llegado al CIV, Sinibaldi crea otras tres constructoras Benelli, Agua Azul y Florido.

“Esas empresas no tenían movimiento. Recuerdo que en Benelli se depositó mucho del dinero que se pedía a los contratistas”, agregó la testigo.

En reuniones privadas que en muchas ocasiones tenía en su oficina privada en la zona 10, era donde gestionaba cómo sería el pago, pero además pactaba cuánto les cobraría de soborno.

“Esta cuota variaba, iba desde 5 hasta el 15%”, contó Herrera Monterroso.

Citó que Guillermo Sosa, alias Botox, quien era viceministro, era el encargado de cobrar los sobornos de los pequeños proyectos. Mucho de ese dinero era pagado en efectivo y se guardaba en cajas fuertes que fueron instaladas en la oficina y baño de Sinibaldi, y en la oficina de Herrera Monterroso.

“El dinero en efectivo que se manejaba era dinero que recibía el señor Alejandro Sinibaldi, y se guardaba en su oficina. él tiene una caja fuerte en su oficina. posteriormente se compró otra que estaba ubicada en mi oficina, un archivo tipo caja fuerte”, agregó.

La distribución del dinero

Las cantidades de dinero que se recolectaban y depositaban en las cajas fuertes en ocasiones llegaban hasta Q5 millones. Sinibaldi era quien repartía el dinero entre las persona que le ayudaban.

“Rubencito (el viceministro Rúben Mejía) démosle un millón, Guillermo Sosa 1.5 millones, Miguelón un millón. Luego de que hacía la distribución me tocaba recoger el dinero en efectivo y ordenarlo para entregarlo”, narró la testigo.

Añadió que compraba cajas de cartón en Office Depot para guardar el dinero luego sellaba las cajas para entregarlas a los que apoyaban a Sinibaldi.

Cuenta en su declaración que mucho del dinero que adquirió Sinibald,i lo usó para comprar propiedades, vehículos, helicópteros, fincas en Izabal y Petén, casas en Antigua Guatemala, apartamentos (Tiffany, Gaudi, Murakamy, Margaritas) y un terreno (Premier Campestre).

Además, detalla que después que Sinibaldi dejó el Ministerio de Comunicaciones para dedicarse de lleno a su campaña política, aún siguió teniendo el mando de la cartera. Víctor Corado fue quien sustituyó a Sinibaldi, pero le rendía cuentas siempre.

Incluso cuenta que parte del personal de confianza renunció al Ministerio y lo acompañó para trabajar en la campaña. Agrega que algunas personas de confianza del Ministro, fueron ubicadas en el Ministerio de Desarrollo Social, porque desde allí dirigiría su brazo social.

El relato cita una serie de nombres de personas, firmas y transacciones que Sinibaldi hizo desde antes de llegar al ministerio hasta después de su campaña política, nombres de algunos sindicados, de prófugos y de otros que ya tiemblan con el testimonio de la testigo.

Así construyó Alejandro Sinibaldi su red de corrupción, según testigo

Glenda Sanchez
07 de septiembre, 2018

Alejandro Sinibaldi, exministro de Comunicaciones que se encuentra prófugo de la justicia, es acusado de cobrar sobornos de hasta el 15% a los contratistas y constructoras que prestaban sus servicios en esa dependencia.

La declaración de una de sus asistentes reveló el origen de la estructura que usó Sinibaldi para exigir, presionar, cobrar y depositar los sobornos de los contratistas del Estado.

Además, habló con las autoridades del Ministerio Público (MP), acerca de los millonarios sobornos que exigió, las formas cómo pagaban los contratistas y la creación de más de 40 empresas, previó a su llegada al Ministerio, las cuales fueron usadas para depositar los sobornos.

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El expediente de la red

En un folio de 147 páginas se encuentra la declaración de Aneliese Mercedes Herrera Monterroso, exasistente de Alejandro Sinibaldi, quien dio su testimonio al Ministerio Público (MP), en febrero de este año.

La declaración resume los casi diez años que ella acompañó al exministro de Comunicaciones en sus operaciones y negocios, desde antes de llegar como titular de la cartera.

El documento al que tuvo acceso República, detalla los negocios de empresas de publicidad que funcionaban legalmente, pero que conforme el tiempo Sinibaldi las vendió porque las consideró un obstáculo, pues ya tenía pensado postularse para alcalde y de permanecer con las compañías, podría causarle problemas con el Tribunal Supremo Electoral (TSE).

“El señor Sinibaldi; ellos empezaron con la empresa de publicidad de los muppies en la zona viva, muppies que los compraba la empresa dueña de ellos, valga la aclaración que era Astel Guatemala”, se lee en el documento.

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La testigo cuenta que Sinibaldi, con apoyo de varias personas, en 2008 creó más de 40 empresas Offshore que más adelante serían utilizadas para depositar los sobornos. Aclaró que a finales de 2005 le pidieron que fuera presidenta de una de estas empresas constituida en Panamá, Summerhill Holdings lnc.

“En ese momento no me dieron explicación del porqué, solamente me dijeron ‘mire esta offshore es nuestra y necesito cambiar a los directivos (…) usted va ser la presidenta, y los contadores van hacer los secretarios y tesoreros’, esa orden yo la recibo por parte del licenciado Jegerlehner”, contó Herrera Monterroso.

Luego de recordar que asumió como presidente de esa offshore, citó varias de las firmas que fueron creadas en 2008. Entre esas empresas mencionó: Inversiones Napoleón, Espectaculares Urbanos, Inversiones Napoleón, Gigantes Urbanos, Servicios Troya, Impresos Urbanos.

Herrera Monterroso resumió todos los negocios de Sinibaldi y las personas que lo ayudaron hasta llegar al Ministerio de Comunicaciones.

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Ya estando como Ministro, según la testigo, Sinibaldi empieza a coordinar cuándo, a quién y cómo se le iba a pagar a las empresas que se les debía por trabajos carreteros, limpia, construcciones.

En 2012 recién llegado al CIV, Sinibaldi crea otras tres constructoras Benelli, Agua Azul y Florido.

“Esas empresas no tenían movimiento. Recuerdo que en Benelli se depositó mucho del dinero que se pedía a los contratistas”, agregó la testigo.

En reuniones privadas que en muchas ocasiones tenía en su oficina privada en la zona 10, era donde gestionaba cómo sería el pago, pero además pactaba cuánto les cobraría de soborno.

“Esta cuota variaba, iba desde 5 hasta el 15%”, contó Herrera Monterroso.

Citó que Guillermo Sosa, alias Botox, quien era viceministro, era el encargado de cobrar los sobornos de los pequeños proyectos. Mucho de ese dinero era pagado en efectivo y se guardaba en cajas fuertes que fueron instaladas en la oficina y baño de Sinibaldi, y en la oficina de Herrera Monterroso.

“El dinero en efectivo que se manejaba era dinero que recibía el señor Alejandro Sinibaldi, y se guardaba en su oficina. él tiene una caja fuerte en su oficina. posteriormente se compró otra que estaba ubicada en mi oficina, un archivo tipo caja fuerte”, agregó.

La distribución del dinero

Las cantidades de dinero que se recolectaban y depositaban en las cajas fuertes en ocasiones llegaban hasta Q5 millones. Sinibaldi era quien repartía el dinero entre las persona que le ayudaban.

“Rubencito (el viceministro Rúben Mejía) démosle un millón, Guillermo Sosa 1.5 millones, Miguelón un millón. Luego de que hacía la distribución me tocaba recoger el dinero en efectivo y ordenarlo para entregarlo”, narró la testigo.

Añadió que compraba cajas de cartón en Office Depot para guardar el dinero luego sellaba las cajas para entregarlas a los que apoyaban a Sinibaldi.

Cuenta en su declaración que mucho del dinero que adquirió Sinibald,i lo usó para comprar propiedades, vehículos, helicópteros, fincas en Izabal y Petén, casas en Antigua Guatemala, apartamentos (Tiffany, Gaudi, Murakamy, Margaritas) y un terreno (Premier Campestre).

Además, detalla que después que Sinibaldi dejó el Ministerio de Comunicaciones para dedicarse de lleno a su campaña política, aún siguió teniendo el mando de la cartera. Víctor Corado fue quien sustituyó a Sinibaldi, pero le rendía cuentas siempre.

Incluso cuenta que parte del personal de confianza renunció al Ministerio y lo acompañó para trabajar en la campaña. Agrega que algunas personas de confianza del Ministro, fueron ubicadas en el Ministerio de Desarrollo Social, porque desde allí dirigiría su brazo social.

El relato cita una serie de nombres de personas, firmas y transacciones que Sinibaldi hizo desde antes de llegar al ministerio hasta después de su campaña política, nombres de algunos sindicados, de prófugos y de otros que ya tiemblan con el testimonio de la testigo.