Chris Froome extendió en el Tour de 2013 el dominio británico que comenzó el año anterior su compañero en el equipo Sky Bradley Wiggins, pero el gran protagonista de la 100ª edición de la carrera francesa fue Nairo Quintana, auténtico resucitador del ciclismo colombiano y sudamericano.
En un año en el que el palmarés de las grandes vueltas lo completaron el italiano Vincenzo Nibali, ganador del Giro, y el estadounidense Chris Horner, de 41 años, que logró la Vuelta a España, la gran noticia fue la eclosión de Quintana.
‘La perla de Boyacá’, de 23 años, ganó una etapa, fue segundo en la general, y logró los trofeos al mejor joven y al mejor escalador en su primera participación en el Tour de Francia, lo que ha disparado sus aspiraciones para las próximas ediciones de la carrera más importante del mundo.
Su sensacional papel le convirtió en el mejor latinoamericano clasificado en la historia del Tour y en el primer ciclista que consigue el ‘maillot’ blanco (al mejor joven) y el de puntos rojos (mejor escalador) en la misma edición.
Producto genuino de la estirpe de escaladores del país cafetero, Quintana, que compite con el equipo español Movistar, mide 1,67 metros de altura y 56 kilos de peso, y fue el rival más complicado para el vencedor final, Froome.
El ciclista nacido en Kenia se coronó vencedor un año después de ser el mejor gregario de Wiggins. Entonces quedó claro que tenía piernas para disputar la carrera y en 2013 ya fue el jefe de filas del Sky, el equipo ciclista más potente del mundo.
No defraudó, y con un botín de tres etapas venció en la general con gran autoridad, con más de cuatro minutos de diferencia sobre Quintana y tras lucir la casaca amarilla durante 14 etapas.
En el Giro el triunfo fue para Nibali, que logró dos etapas y aventajó en más de cuatro minutos a otro colombiano, Rigoberto Urán, integrante del Sky y otra de las caras visibles del nuevo ciclismo cafetero.
El buen momento sudamericano quedó refrendado por otro colombiano, Carlos Betancur, que finalizó en el quinto puesto y logró el ‘maillot’ de mejor joven, y el brasileño Rafael Andriato, que se impuso en las metas volantes.
Más apretada estuvo la clasificación de la Vuelta a España, en la que el veterano Horner dio la gran sorpresa y logró la victoria por delante de un favorito como Nibali, al que sacó 37 segundos. El podio lo completó el español Alejandro Valverde.
Fuera de las tres grandes, en los clásicas fue el suizo Fabian Cancellara el que dominó al llevarse dos de los cinco ‘Monumentos’ del curso. En primavera se hizo con el Tour de Flandes y la París-Roubaix. El alemán Gerald Ciolek venció en la Milán-San Remo y el irlandés Daniel Martin en la Lieja-Bastoña-Lieja.
Ya en otoño, el Giro de Lombardia lo ganó por segunda vez consecutiva el español Joaquim ‘Purito’ Rodríguez, que demostró su capacidad para brillar en pruebas de un día y grandes rondas al acabar también tercero en el Tour y cuarto en la Vuelta.
El veterano ciclista del equipo ruso Katusha, de 34 años, concluyó el curso con el primer puesto de la UCI World Tour, por delante de Chris Froome. El ‘Purito’ logra esta distinción por segundo año consecutivo.
Pero el excelente año del ciclista catalán no tuvo su guinda al perder el Mundial de Ruta disputado en Florencia en los últimos metros ante el portugués Rui Costa, que le ganó al esprín.
Sin duda una de las imágenes del año, ‘Purito’, con la medalla de plata en el cuello, no pudo reprimir las lágrimas por la ocasión perdida en el último suspiro cuando parecía que tenía todo a favor para ganar. Su compatriota Valverde logró el bronce.
En la categoría de contrarreloj la victoria fue para el alemán Tony Martin. Wiggins con la plata y Cancellara con el bronce completaron el podio.
El 2013 ha sido también el año en el que el ciclismo ha vivido la ‘resaca’ del terremoto que le sacudió en 2012, cuando la UCI decidió desposeer a Lance Armstrong de sus siete Tours consecutivos (1999-2005) por dopaje.
Finalmente el 17 de enero de 2013 el estadounidense confesó haber recurrido a diversas sustancias prohibidas durante su carrera en una entrevista en el programa de Oprah Winfrey.
El mundo entero presenció la caída definitiva de uno de sus grandes mitos y el ciclismo cerró una de las páginas más oscuras de su historia.
Chris Froome extendió en el Tour de 2013 el dominio británico que comenzó el año anterior su compañero en el equipo Sky Bradley Wiggins, pero el gran protagonista de la 100ª edición de la carrera francesa fue Nairo Quintana, auténtico resucitador del ciclismo colombiano y sudamericano.
En un año en el que el palmarés de las grandes vueltas lo completaron el italiano Vincenzo Nibali, ganador del Giro, y el estadounidense Chris Horner, de 41 años, que logró la Vuelta a España, la gran noticia fue la eclosión de Quintana.
‘La perla de Boyacá’, de 23 años, ganó una etapa, fue segundo en la general, y logró los trofeos al mejor joven y al mejor escalador en su primera participación en el Tour de Francia, lo que ha disparado sus aspiraciones para las próximas ediciones de la carrera más importante del mundo.
Su sensacional papel le convirtió en el mejor latinoamericano clasificado en la historia del Tour y en el primer ciclista que consigue el ‘maillot’ blanco (al mejor joven) y el de puntos rojos (mejor escalador) en la misma edición.
Producto genuino de la estirpe de escaladores del país cafetero, Quintana, que compite con el equipo español Movistar, mide 1,67 metros de altura y 56 kilos de peso, y fue el rival más complicado para el vencedor final, Froome.
El ciclista nacido en Kenia se coronó vencedor un año después de ser el mejor gregario de Wiggins. Entonces quedó claro que tenía piernas para disputar la carrera y en 2013 ya fue el jefe de filas del Sky, el equipo ciclista más potente del mundo.
No defraudó, y con un botín de tres etapas venció en la general con gran autoridad, con más de cuatro minutos de diferencia sobre Quintana y tras lucir la casaca amarilla durante 14 etapas.
En el Giro el triunfo fue para Nibali, que logró dos etapas y aventajó en más de cuatro minutos a otro colombiano, Rigoberto Urán, integrante del Sky y otra de las caras visibles del nuevo ciclismo cafetero.
El buen momento sudamericano quedó refrendado por otro colombiano, Carlos Betancur, que finalizó en el quinto puesto y logró el ‘maillot’ de mejor joven, y el brasileño Rafael Andriato, que se impuso en las metas volantes.
Más apretada estuvo la clasificación de la Vuelta a España, en la que el veterano Horner dio la gran sorpresa y logró la victoria por delante de un favorito como Nibali, al que sacó 37 segundos. El podio lo completó el español Alejandro Valverde.
Fuera de las tres grandes, en los clásicas fue el suizo Fabian Cancellara el que dominó al llevarse dos de los cinco ‘Monumentos’ del curso. En primavera se hizo con el Tour de Flandes y la París-Roubaix. El alemán Gerald Ciolek venció en la Milán-San Remo y el irlandés Daniel Martin en la Lieja-Bastoña-Lieja.
Ya en otoño, el Giro de Lombardia lo ganó por segunda vez consecutiva el español Joaquim ‘Purito’ Rodríguez, que demostró su capacidad para brillar en pruebas de un día y grandes rondas al acabar también tercero en el Tour y cuarto en la Vuelta.
El veterano ciclista del equipo ruso Katusha, de 34 años, concluyó el curso con el primer puesto de la UCI World Tour, por delante de Chris Froome. El ‘Purito’ logra esta distinción por segundo año consecutivo.
Pero el excelente año del ciclista catalán no tuvo su guinda al perder el Mundial de Ruta disputado en Florencia en los últimos metros ante el portugués Rui Costa, que le ganó al esprín.
Sin duda una de las imágenes del año, ‘Purito’, con la medalla de plata en el cuello, no pudo reprimir las lágrimas por la ocasión perdida en el último suspiro cuando parecía que tenía todo a favor para ganar. Su compatriota Valverde logró el bronce.
En la categoría de contrarreloj la victoria fue para el alemán Tony Martin. Wiggins con la plata y Cancellara con el bronce completaron el podio.
El 2013 ha sido también el año en el que el ciclismo ha vivido la ‘resaca’ del terremoto que le sacudió en 2012, cuando la UCI decidió desposeer a Lance Armstrong de sus siete Tours consecutivos (1999-2005) por dopaje.
Finalmente el 17 de enero de 2013 el estadounidense confesó haber recurrido a diversas sustancias prohibidas durante su carrera en una entrevista en el programa de Oprah Winfrey.
El mundo entero presenció la caída definitiva de uno de sus grandes mitos y el ciclismo cerró una de las páginas más oscuras de su historia.