La habitual magia que ostentaba el astro Tiger Woods en Torrey Pines desapareció este sábado, luego de que el número uno del mundo quedara fuera de la disputa del título tras entregar en tercera ronda del Abierto una mala tarjeta de 79 golpes, siete sobre el par.

En el mismo campo de Torrey Pines donde ha ganado ocho títulos – siete trofeos del PGA Tour y el Abierto de Estados Unidos de 2008- Woods estuvo inseguro en sus tiros para una inusual ronda de siete bogeys, dos doble bogeys y sólo cuatro birdies.

‘Definitivamente fue diferente verlo hacer tantos bogeys’, dijo su compañero de jornada, el venezolano Jhonattan Vegas. ‘Uno no espera a ver que sea él quien cometa tantos errores’.

No es sorprendente que Woods, ganador de 14 títulos de Grand Slam y quien compite por primera vez desde el torneo World Challenge en diciembre, no hiciera comentarios sobre su pobre desempeño.

Fue la tercera peor ronda de su carrera en el PGA Tour estadounidense, casi igualando su peor desempeño como profesional cuando firmó un cartón de 81 golpes en el Abierto Británico de 2002 en Muirfield.

De esta forma, Woods no podrá jugar el domingo en la última ronda.

Después que un gran número de jugadores hizo el corte a mitad de camino el jueves, la nómina de competidores quedó reducida aún más después de la tercera ronda, que definió a los 70 mejores jugadores a la jornada final.

Woods estaba empatado en el puesto 80, 14 golpes alejado del líder del día, el estadounidense Gary Woodland.