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De panzaso

María Dolores Arias
01 de diciembre, 2015

A última hora y de “panzaso”, los diputados en el Congreso aprobaron el presupuesto de “mal gasto” público para el 2016. Menos de diez minutos faltaban para que venciera el plazo fatal, por lo que a la carrera y de forma atropellada se terminó la lectura del mismo y se aprobó el Decreto 14-2015 con 100 votos a favor, 8 en contra y 50 ausentes.

El presupuesto para el 2016 será de Q70, 796 millones, de los cuales más Q45,800 millones son para funcionamiento, Q12,400 para “inversión” –listado geográfico- y Q12,400 para pagar parte de lo que ya se debe.

Algunos políticos pretenden que las discusiones alrededor del presupuesto sean con respecto a los ingresos, es decir, tratan de vender la idea de que los ingresos no son suficientes con respecto a todas las funciones que debe cumplir el gobierno. Incluso hace unos días escuché que algunas personas comentaban que el dinero del presupuesto era insuficiente para atender las necesidades más urgentes de la población, como salud y educación.

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La visión de estas personas parece ser que el dinero del presupuesto sale de alguna olla mágica al final del arco iris y que una vez localizada se puede disponer infinitamente de sus recursos. Por supuesto que siempre habrá más necesidades que recursos, es por eso que la asignación de recursos de manera eficiente es prioritaria para cualquier individuo.

Ahora bien, en el ámbito gubernamental no existen los incentivos para cuidar los recursos, ya que ni son propios ni hay consecuencias del robo, malversación o, en el menor de los casos, despilfarro. Es decir, no hay consecuencias buenas o malas en el manejo de los recursos públicos.

Por consiguiente, lo que nos queda hacer a los ciudadanos es minimizar la cantidad de dinero que maneja el gobierno y esto sólo se consigue quitándole funciones a los burócratas. En lugar de crear más burocracia hay que reducirla. Pero no se trata de reducirla indiscriminadamente sino en aquellas funciones que hacemos mejor los individuos de manera más eficiente.

Por ejemplo, el subsidio al transporte ha sido un inmoral desperdicio de recursos, primero porque le quitamos el dinero a quienes nunca usarán el servicio, ya sea porque viven en otra ciudad o porque han ahorrado para comprarse una moto o auto, segundo porque no ha mejorado las condiciones del servicio y sólo ha servido para darle dinero a los líderes gremiales y allegados.

El programa de fertilizantes es otra asignación que el politiquillo ávido de oportunidades para “hacer negocios” ha utilizado como un mecanismo para robarse los recursos del presupuesto, ya ni hablar de la compra de medicinas, servicios médicos como el caso PISA, plazas fantasmas, carreteras fantasmas, caminos fantasmas o dragados fantasmas de ríos, por solo mencionar algunos.

Desafortunadamente este presupuesto es más de lo mismo, el listado geográfico de obras continúa, las ONG’s fantasmas o con vínculos a disputados persisten y la debilidad de organismos como la Contraloría General de Cuentas se mantiene.

Este presupuesto pasó de panzaso en muchos sentidos, tendremos que estar vigilantes del uso de los recursos y los candados que se hayan impuesto.   Esto sólo es la primera parte, lo más importante será quitarle poder al gobernante.

@Md30

Facebook.com/mda30

De panzaso

María Dolores Arias
01 de diciembre, 2015

A última hora y de “panzaso”, los diputados en el Congreso aprobaron el presupuesto de “mal gasto” público para el 2016. Menos de diez minutos faltaban para que venciera el plazo fatal, por lo que a la carrera y de forma atropellada se terminó la lectura del mismo y se aprobó el Decreto 14-2015 con 100 votos a favor, 8 en contra y 50 ausentes.

El presupuesto para el 2016 será de Q70, 796 millones, de los cuales más Q45,800 millones son para funcionamiento, Q12,400 para “inversión” –listado geográfico- y Q12,400 para pagar parte de lo que ya se debe.

Algunos políticos pretenden que las discusiones alrededor del presupuesto sean con respecto a los ingresos, es decir, tratan de vender la idea de que los ingresos no son suficientes con respecto a todas las funciones que debe cumplir el gobierno. Incluso hace unos días escuché que algunas personas comentaban que el dinero del presupuesto era insuficiente para atender las necesidades más urgentes de la población, como salud y educación.

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Ahora bien, en el ámbito gubernamental no existen los incentivos para cuidar los recursos, ya que ni son propios ni hay consecuencias del robo, malversación o, en el menor de los casos, despilfarro. Es decir, no hay consecuencias buenas o malas en el manejo de los recursos públicos.

Por consiguiente, lo que nos queda hacer a los ciudadanos es minimizar la cantidad de dinero que maneja el gobierno y esto sólo se consigue quitándole funciones a los burócratas. En lugar de crear más burocracia hay que reducirla. Pero no se trata de reducirla indiscriminadamente sino en aquellas funciones que hacemos mejor los individuos de manera más eficiente.

Por ejemplo, el subsidio al transporte ha sido un inmoral desperdicio de recursos, primero porque le quitamos el dinero a quienes nunca usarán el servicio, ya sea porque viven en otra ciudad o porque han ahorrado para comprarse una moto o auto, segundo porque no ha mejorado las condiciones del servicio y sólo ha servido para darle dinero a los líderes gremiales y allegados.

El programa de fertilizantes es otra asignación que el politiquillo ávido de oportunidades para “hacer negocios” ha utilizado como un mecanismo para robarse los recursos del presupuesto, ya ni hablar de la compra de medicinas, servicios médicos como el caso PISA, plazas fantasmas, carreteras fantasmas, caminos fantasmas o dragados fantasmas de ríos, por solo mencionar algunos.

Desafortunadamente este presupuesto es más de lo mismo, el listado geográfico de obras continúa, las ONG’s fantasmas o con vínculos a disputados persisten y la debilidad de organismos como la Contraloría General de Cuentas se mantiene.

Este presupuesto pasó de panzaso en muchos sentidos, tendremos que estar vigilantes del uso de los recursos y los candados que se hayan impuesto.   Esto sólo es la primera parte, lo más importante será quitarle poder al gobernante.

@Md30

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