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Objetivismo: Estética

Redacción
09 de agosto, 2016

El arte, nos dice Rand, es una re-creación selectiva de la realidad de acuerdo a los juicios de valor metafísicos del autor. Es pues una imagen, del latín imago, un artefacto que representa un parecido a, o la apariencia de la realidad percibida. Principalmente se entiende como representación visual, pero también se aplica como extensión para otros tipos de percepción, como imágenes auditivas, olfativas, táctiles, gustativas, así como mentales, producto de la inducción lingüística. Como producto, como imagen, tiene que ser un todo integral. De lo contrario, se percibiría como un producto inconcluso. Como se compone de partes, el compositor o productor tiene que lograr unidad en la variedad, logrando a la vez, variedad en la unidad. Y para ser arte, debe ser una obra excelente. Debe ser producto de la aplicación lógica y con maestría de conocimiento técnico. Por lo tanto la configuración formal de la imagen debe ser tal que la relación acorde entre partes diversas y el todo sea de manera que se establezca unidad en la variedad y variedad en la unidad, es decir, perfectamente armónica. El propósito del orden en la composición de la imagen es conseguir la armonía perfecta entre sus elementos.
¿Y qué diferencia hay entre un gráfico y una pintura, una escultura, una danza, una obra literaria, una obra de teatro, una ópera, una película, una obra arquitectónica? El gráfico no es una imagen de la realidad, sino que es la realidad misma. El gráfico no es una apariencia de la realidad percibida, es la realidad. El gráfico es el significante o soporte formal que apunta al significado. El significante es lo que designa, mientras el significado es lo designado. Si bien es cierto, el soporte formal del significado, el significante como grafismo, para ser una obra de arte gráfica, debe ser una composición bella.
El grafismo denota e indica un significado que es un símbolo que representa un concepto moral o intelectual, por analogía o por convención. Por ejemplo el “listón rojo” de Gary van der Merwe, que significa: ayudemos a los que tienen sida. O la calavera, que significa ‘muerte’.
El gráfico es un símbolo lingüístico, mientras que la imagen que es una pintura, o escultura, o arquitectura, o teatro, o danza, o música, o cine, o pieza literaria, u opera, es una concepción de la realidad, en forma de entidad concreta, perceptible sensorialmente. Esta concepción de la realidad o visión del mundo que muestra la imagen, no es un símbolo, sino más bien una alegoría, una ficción que da a entender esa concepción de la realidad del autor, en su más estricta valoración ontológica. Mientras el gráfico indica un referente distinto de sí mismo, la imagen en cuestión es auto referencial. El signo gráfico indica la realidad; la imagen es una ficción, no indica la realidad, sino que presenta una valoración de ésta. La imagen es una reconstrucción crítica de la realidad. El criterio de selección se basa en la visión ontológica o metafísica que el artista tiene del mundo. Estas imágenes, que pueden ser visuales, auditivas, táctiles, y/o inducidas, se perciben por medio de los sentidos. La característica única de la obra de Arte es la de ser una conceptualización critica de la realidad que puede ser percibida en forma sensual como un objeto concreto.
En tanto imagen expresiva contiene dos aspectos: la ‘forma’ o estructura compositiva, y la ‘materia’ o contenido del argumento. El objeto de la estructura formal es la belleza. El objeto de la materia es la actualización de la idea. Comprende la pintura, la escultura, la música, la danza, el teatro, la literatura, la fotografía, el cine y la arquitectura. Estas se pueden clasificar según su dimensión y medio de expresión: pintura es el Arte bidimensional que utiliza pigmentos como medio de expresión; la escultura es tridimensional y utiliza los sólidos como medio de expresión; la danza es el Arte tetra-dimensional que utiliza el movimiento corporal como medio de expresión; la arquitectura es en tanto Arte, tetra-dimensional y utiliza la edificación como medio de expresión; la música es el Arte tetra-dimensional que utiliza los sonidos como medio de expresión; el teatro es el Arte tetra-dimensional que utiliza el dialogo y la gesticulación como medio de expresión.
El Arte no tiene un fin práctico o material, no es utilitario. Su propósito es el de ser contemplado, y el placer que provoca esa contemplación es tan intensa y profundamente personal, que uno la experimenta como auto-suficiente y auto-justificada. Su función es psicológica. Esta experiencia es un valor en sí misma. Es una experiencia de la cual podemos decir: “Me alegro de haber conocido esto en mi vida.”
La razón de esa experiencia consiste en que la imagen en cuestión expresa una visión del mundo que coincide con nuestro sentido de vida. El sentido de vida, nos dice Rand, es un equivalente pre-conceptual de una visión metafísica, una apreciación emocional, subconscientemente integrada, del hombre y de la existencia. Antes de que el hombre entienda qué es metafísica, el humano hace elecciones que son juicios de valor, experimenta emociones, y adquiere cierta visión implícita de la vida. Cada elección y juicio de valor implica alguna estimación de sí mismo y del mundo, en particular de su capacidad de enfrentarse y de tratar con el mundo. Su mecanismo subconsciente integra sus actividades psicológicas, sus conclusiones, reacciones, evasiones, sean verdaderas o falsas, en una suma emocional que establece un patrón habitual que se convierte en su respuesta automática al mundo que lo rodea.
Lo que empieza como una serie de conclusiones discretas, o de evasiones, sobre sus problemas particulares, se vuelve una sensación generalizada sobre la existencia, una visión metafísica motivada emocionalmente por una emoción básica que es parte de todas sus otras emociones y que subyace en todas sus experiencias. Esto es el sentido de vida, nos dice Rand.
El sentido de vida se forma por un proceso de generalización emocional, que Rand describe como un equivalente subconsciente del proceso de abstracción, ya que es un método de clasificación e integración. Las emociones que invocan las cosas que el humano ve en el mundo, dependerán de qué tipo de cosas conforman su visión de sí mismo y de su existencia. El criterio subconsciente de selección que forma su abstracción emocional es: “Aquello que es importante para mí”, o: “El tipo de universo que es correcto para mí, en el cual me siento en casa.” El concepto clave en la formación del sentido de vida, es el término “importante”. Es un concepto que pertenece al ámbito de los valores.
Lo que la obra de Arte expresa es: “Esta es la vida como la veo.” El significado esencial de la respuesta del observador es: “Esto es, o no es, la vida como la veo.”
El proceso de creación es como un proceso de deducción. El artista empieza con una abstracción amplia que debe concretizar, traerla a la realidad por medio de los particulares apropiados. El proceso de ver la obra de arte es un proceso que se parece el proceso de inducción, pues el observador percibe los particulares, los integra y comprende las abstracciones de donde proceden, completando así el círculo.
El sujeto de la obra de Arte expresa una visión del hombre y de la existencia. El estilo de la obra de arte expresa una visión de la consciencia humana. La obra de Arte puede expresar una visión del mundo con la que no estemos de acuerdo, pero de forma impecablemente magistral. Por eso es que no hay contradicción alguna al decir: “Esta es una gran obra de Arte, pero a mí no me gusta.”
La importancia del Arte reside en que presenta las cosas, no como son, sino como pueden y deben ser. Crea un mundo poético al lado del mundo ordinario, en donde el observador vive, aunque sea por un tiempo breve, una existencia extraordinaria.
Rand se define a sí misma como Romántico Realista. Pero, ¿qué es Romanticismo? Es una categoría de Arte basada en el reconocimiento del principio que el hombre tiene facultad volitiva. Lo que quiere decir que el aspecto crucial de la vida del hombre es la elección de valores, los cuales le mueven a actuar para conseguirlos y/o conservarlos. Por tanto debe establecer sus fines y actuar de acuerdo a un propósito. La forma de expresar la esencia de esa acción es la trama.
Se diferencia del Naturalismo en que éste niega que el hombre sea un ser volitivo, y por tanto su vida y su carácter están determinados por fuerzas fuera de su control. Por tanto, la elección de valores es imposible para él.
Los Románticos aportaron la primacía de los valores, un elemento que según Rand, había estado ausente en las fórmulas copistas de la repetición de Clásicos. Los juicios de valor son la fuente de las emociones. Las obras Románticas proyectaron emociones intensas, al igual que abundante color, imaginación, y originalidad. Sin embargo, la ignorancia de que la facultad de la razón es la facultad volitiva, les llevó a asociar el libre albedrío con el misticismo y la defensa de la individualidad fue en términos de sentimientos, dejando la bandera de la razón a sus enemigos.
El Realismo Romántico, como define Ayn Rand su arte, es un Romanticismo expresado en nuestra época, donde los héroes son productores. La influencia aristotélica en el Realismo Romántico lleva a describir lo que puede y debe ser. Rand nos dice que el propósito de sus novelas no es moralizar, sino mostrar. Describir al hombre ideal.

Objetivismo: Estética

Redacción
09 de agosto, 2016

El arte, nos dice Rand, es una re-creación selectiva de la realidad de acuerdo a los juicios de valor metafísicos del autor. Es pues una imagen, del latín imago, un artefacto que representa un parecido a, o la apariencia de la realidad percibida. Principalmente se entiende como representación visual, pero también se aplica como extensión para otros tipos de percepción, como imágenes auditivas, olfativas, táctiles, gustativas, así como mentales, producto de la inducción lingüística. Como producto, como imagen, tiene que ser un todo integral. De lo contrario, se percibiría como un producto inconcluso. Como se compone de partes, el compositor o productor tiene que lograr unidad en la variedad, logrando a la vez, variedad en la unidad. Y para ser arte, debe ser una obra excelente. Debe ser producto de la aplicación lógica y con maestría de conocimiento técnico. Por lo tanto la configuración formal de la imagen debe ser tal que la relación acorde entre partes diversas y el todo sea de manera que se establezca unidad en la variedad y variedad en la unidad, es decir, perfectamente armónica. El propósito del orden en la composición de la imagen es conseguir la armonía perfecta entre sus elementos.
¿Y qué diferencia hay entre un gráfico y una pintura, una escultura, una danza, una obra literaria, una obra de teatro, una ópera, una película, una obra arquitectónica? El gráfico no es una imagen de la realidad, sino que es la realidad misma. El gráfico no es una apariencia de la realidad percibida, es la realidad. El gráfico es el significante o soporte formal que apunta al significado. El significante es lo que designa, mientras el significado es lo designado. Si bien es cierto, el soporte formal del significado, el significante como grafismo, para ser una obra de arte gráfica, debe ser una composición bella.
El grafismo denota e indica un significado que es un símbolo que representa un concepto moral o intelectual, por analogía o por convención. Por ejemplo el “listón rojo” de Gary van der Merwe, que significa: ayudemos a los que tienen sida. O la calavera, que significa ‘muerte’.
El gráfico es un símbolo lingüístico, mientras que la imagen que es una pintura, o escultura, o arquitectura, o teatro, o danza, o música, o cine, o pieza literaria, u opera, es una concepción de la realidad, en forma de entidad concreta, perceptible sensorialmente. Esta concepción de la realidad o visión del mundo que muestra la imagen, no es un símbolo, sino más bien una alegoría, una ficción que da a entender esa concepción de la realidad del autor, en su más estricta valoración ontológica. Mientras el gráfico indica un referente distinto de sí mismo, la imagen en cuestión es auto referencial. El signo gráfico indica la realidad; la imagen es una ficción, no indica la realidad, sino que presenta una valoración de ésta. La imagen es una reconstrucción crítica de la realidad. El criterio de selección se basa en la visión ontológica o metafísica que el artista tiene del mundo. Estas imágenes, que pueden ser visuales, auditivas, táctiles, y/o inducidas, se perciben por medio de los sentidos. La característica única de la obra de Arte es la de ser una conceptualización critica de la realidad que puede ser percibida en forma sensual como un objeto concreto.
En tanto imagen expresiva contiene dos aspectos: la ‘forma’ o estructura compositiva, y la ‘materia’ o contenido del argumento. El objeto de la estructura formal es la belleza. El objeto de la materia es la actualización de la idea. Comprende la pintura, la escultura, la música, la danza, el teatro, la literatura, la fotografía, el cine y la arquitectura. Estas se pueden clasificar según su dimensión y medio de expresión: pintura es el Arte bidimensional que utiliza pigmentos como medio de expresión; la escultura es tridimensional y utiliza los sólidos como medio de expresión; la danza es el Arte tetra-dimensional que utiliza el movimiento corporal como medio de expresión; la arquitectura es en tanto Arte, tetra-dimensional y utiliza la edificación como medio de expresión; la música es el Arte tetra-dimensional que utiliza los sonidos como medio de expresión; el teatro es el Arte tetra-dimensional que utiliza el dialogo y la gesticulación como medio de expresión.
El Arte no tiene un fin práctico o material, no es utilitario. Su propósito es el de ser contemplado, y el placer que provoca esa contemplación es tan intensa y profundamente personal, que uno la experimenta como auto-suficiente y auto-justificada. Su función es psicológica. Esta experiencia es un valor en sí misma. Es una experiencia de la cual podemos decir: “Me alegro de haber conocido esto en mi vida.”
La razón de esa experiencia consiste en que la imagen en cuestión expresa una visión del mundo que coincide con nuestro sentido de vida. El sentido de vida, nos dice Rand, es un equivalente pre-conceptual de una visión metafísica, una apreciación emocional, subconscientemente integrada, del hombre y de la existencia. Antes de que el hombre entienda qué es metafísica, el humano hace elecciones que son juicios de valor, experimenta emociones, y adquiere cierta visión implícita de la vida. Cada elección y juicio de valor implica alguna estimación de sí mismo y del mundo, en particular de su capacidad de enfrentarse y de tratar con el mundo. Su mecanismo subconsciente integra sus actividades psicológicas, sus conclusiones, reacciones, evasiones, sean verdaderas o falsas, en una suma emocional que establece un patrón habitual que se convierte en su respuesta automática al mundo que lo rodea.
Lo que empieza como una serie de conclusiones discretas, o de evasiones, sobre sus problemas particulares, se vuelve una sensación generalizada sobre la existencia, una visión metafísica motivada emocionalmente por una emoción básica que es parte de todas sus otras emociones y que subyace en todas sus experiencias. Esto es el sentido de vida, nos dice Rand.
El sentido de vida se forma por un proceso de generalización emocional, que Rand describe como un equivalente subconsciente del proceso de abstracción, ya que es un método de clasificación e integración. Las emociones que invocan las cosas que el humano ve en el mundo, dependerán de qué tipo de cosas conforman su visión de sí mismo y de su existencia. El criterio subconsciente de selección que forma su abstracción emocional es: “Aquello que es importante para mí”, o: “El tipo de universo que es correcto para mí, en el cual me siento en casa.” El concepto clave en la formación del sentido de vida, es el término “importante”. Es un concepto que pertenece al ámbito de los valores.
Lo que la obra de Arte expresa es: “Esta es la vida como la veo.” El significado esencial de la respuesta del observador es: “Esto es, o no es, la vida como la veo.”
El proceso de creación es como un proceso de deducción. El artista empieza con una abstracción amplia que debe concretizar, traerla a la realidad por medio de los particulares apropiados. El proceso de ver la obra de arte es un proceso que se parece el proceso de inducción, pues el observador percibe los particulares, los integra y comprende las abstracciones de donde proceden, completando así el círculo.
El sujeto de la obra de Arte expresa una visión del hombre y de la existencia. El estilo de la obra de arte expresa una visión de la consciencia humana. La obra de Arte puede expresar una visión del mundo con la que no estemos de acuerdo, pero de forma impecablemente magistral. Por eso es que no hay contradicción alguna al decir: “Esta es una gran obra de Arte, pero a mí no me gusta.”
La importancia del Arte reside en que presenta las cosas, no como son, sino como pueden y deben ser. Crea un mundo poético al lado del mundo ordinario, en donde el observador vive, aunque sea por un tiempo breve, una existencia extraordinaria.
Rand se define a sí misma como Romántico Realista. Pero, ¿qué es Romanticismo? Es una categoría de Arte basada en el reconocimiento del principio que el hombre tiene facultad volitiva. Lo que quiere decir que el aspecto crucial de la vida del hombre es la elección de valores, los cuales le mueven a actuar para conseguirlos y/o conservarlos. Por tanto debe establecer sus fines y actuar de acuerdo a un propósito. La forma de expresar la esencia de esa acción es la trama.
Se diferencia del Naturalismo en que éste niega que el hombre sea un ser volitivo, y por tanto su vida y su carácter están determinados por fuerzas fuera de su control. Por tanto, la elección de valores es imposible para él.
Los Románticos aportaron la primacía de los valores, un elemento que según Rand, había estado ausente en las fórmulas copistas de la repetición de Clásicos. Los juicios de valor son la fuente de las emociones. Las obras Románticas proyectaron emociones intensas, al igual que abundante color, imaginación, y originalidad. Sin embargo, la ignorancia de que la facultad de la razón es la facultad volitiva, les llevó a asociar el libre albedrío con el misticismo y la defensa de la individualidad fue en términos de sentimientos, dejando la bandera de la razón a sus enemigos.
El Realismo Romántico, como define Ayn Rand su arte, es un Romanticismo expresado en nuestra época, donde los héroes son productores. La influencia aristotélica en el Realismo Romántico lleva a describir lo que puede y debe ser. Rand nos dice que el propósito de sus novelas no es moralizar, sino mostrar. Describir al hombre ideal.