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¡Qué buen Patojo es Juan Pablo Romero!

Gabriel Arana Fuentes
02 de julio, 2017

El sitio de Los Patojos lo deja todo muy claro. Si se pregunta de qué trata Los Patojos ellos responden con que es un sueño y una idea en acción.

Pero Los Patojos también es un foco de luz y esperanza, un espacio abierto para la comunidad donde la creatividad y la libertad son lo más importante.

Por tanto, Los Patojos fortalecen mente y cuerpo y ese es el sueño, cada vez más tangible de uno de sus activistas más antiguos el Juan Pablo Romero, el Patojo Mayor.

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“¿Adivinen quiénes vendieron todos sus rábanos?”. Fotos: Cortesía de Los Patojos.

En la web de Los Patojos Juan Pablo Romero explica “Yo no hago coaching, ni me llega estar en lugares pretensiosos y menos con mara con excesivos privilegios, tampoco me invento frases para ganar prestigio o visibilidad.

A mí me gusta trabajar y construir con gente que está dispuesta a intentar siempre todo. Mi nombre es Juan Pablo Romero Fuentes y es lo único que es mío”.

En República decidimos acercarnos para hablar con él y que Juan Pablo Romero nos relatara en qué anda ahora, sobre todo porque está en la fase dos de Los Patojos, una fase que lo llevará a San Miguel Dueñas, en Sacatepéquez.

Mira las fotos de la 1a. Noche Cultural 2017 de los Patojos en este enlace.

¿Cuál es el objetivo de Los Patojos?

El objetivo del patojismo es que sea un sistema que se pueda plantear más allá de lo educativo en el país, Centroamérica y la región. Un proyecto importante y útil, como hablar de un Montessori, un Waldorf, solo que este sea local, nuestro.

Son 11 años de experimentación. Este año se termina la sistematización, y ya podemos implementarlo. Algo importante es la estética, los ambientes en materia de educación. Podés educar en una galera, en el monte, si querés, pero en el patojismo sí creemos que la estética, y los colores son fundamentales para el desarrollo de la educación.

En Redes Sociales se ve que Los Patojos se acercan a una fase dos. ¿Cómo va eso?

Lo que está en redes sociales es la expansión de la segunda escuela. Más que escuela es como un centro preuniversitario. La ciudad del patojismo, será un centro técnico. Uno donde la persona entra para encontrar opciones para desarrollar sus propios procesos personales, a nivel empresa, agricultura, tecnología, arte. Es un proyecto que está empezando.

Es un espacio grande para seguir el proceso que tenemos. Esto está en San Miguel Dueñas. Como a 20 minutos de Jocotenango.

Entonces, en Jocotenango tenemos niños de 3 años a 17 años y ahora en Dueñas tendremos la parte final. Ahí tendremos los de 14 años en adelante. Digamos que será un instituto que va graduar maestro y maestras. Preparamos a los Multiplicadores del patojismo, para expandir la metodología con nuevos liderazgos en magisterio.

Hay una convocatorio de fondos, ¿cómo es?

En 11 año nunca habíamos hecho una campaña global. Habíamos ignorado que en la red había una opción, se nos ocurrió una herramienta y encontramos en Global Giving eso. Hay proyectos de áreas de salud, de género y Derechos Humanos, y nosotros estamos en educación.

En lo global lo que quiero es que el proyecto le pertenezca a todos. Un cacho de ficha ayuda que el proyecto crezca, es el primer paso para ser autosostenibles. Link

Multiplicadores del patojismo

¿Hay apoya magisterial?

Mirá, seguimos el Pensum Nacional Base (PNB), pero realmente el currículum es una herramienta muy buena. Difiero que sea obsoleta, creo que es la forma en que se lleva a la acción pedagógica. Pero si un maestro tiene 60 años, ya está cansado, no se va poner a investigar recursos nuevos. O no optará necesariamente a la libertad de cátedra. Tampoco es que lo defienda, lo que si digo es que el país sí tiene una herramienta pero que está mal implementada.

Con los patojos descubrimos eso. El CNB te permite libertada de catedra, si sos educador comprometido te da chance a innovar. Para que el proyecto fuera reconocido por el ministerio de educación teníamos que implementarlo. Entonces aprendimos a utilizar e implementarlo a beneficio de la comunidad. Lo hicimos hace tres años y ahora ya estamos en la capacidad de implementar el nuestro.

Entonces el niño que sale de ahí ya sale con título académico

Claro, eso no se lo quitás al pueblo de Guatemala. Hay muchos padres de familia que tiene en su corazón eso, pese al desempleo y todo, es darle la satisfacción de que sus hijos tienen la primeraria. Son cosas más morales y de honor, que de ética y trascendencia.

Eso ya depende del sistema de Los Patojos, y todas las oportunidades que estamos ofreciendo. Pero el problema es muy local, respeta mucho el sentir de los guatemaltecos, la parte invisible de la ciudad, en este caso la periferia, en los Jocotes.

Nosotros le ponemos más atención a lo que ha sido invisibilizado. Y lo visibilizamos como una oportunidad de poder, a nivel nacional. Para nosotros no es impresionante que esté el PNB, el PNB es una herramienta más, como ahora es el Internet, o tener una laptop.

¿Cómo evitas que no se muera el patojismo en medio de los retos que te pone la vida?

Es un experimento muy íntimo que inició hace 11 años. Como joven seguía lo que ya estaba estructurado, seguía los pasos. Te comprás tu carro, te graduás, vas a la U, te casás, tenés 27 hijos. Empiezan las deudas, y la onda que ya sabés que vas hacer todos los días. O no.

La mía fue la segunda, crecí en un sector vulnerable, las opciones eran vender droga, chupar o llevártela de grueso. Entonces hice una fusión de esas dos experiencias y me di cuenta que tenía una oportunidad de oro para construir algo que no existía en Jocotenango. Un lugar creativo y seguro para que las niñas fueran y experimentaran de diversas formas.

Los Patojos si tienen mucha esencia mía, por supuesto es un proyecto íntimo, pero ya es un proyecto colectivo, ya es una institución pero aún hay detalles más emotivos, o por lo menos estéticos, que tienen que ver con lo que yo veo a nivel de planeta, no solo una escuela, tiene que ser comunitario. Para eso sirve el proyecto dos.

Para delegar a los multiplicadores, para delegar el potencial, la filosofía y la metodología para que Los Patojos y patojas puedan sentir el proyecto defenderlo y llevarlo más allá que solo una persona.

¿Parece que lo que proponés y hacés requiere de un esfuerzo doble o no?

Es triple, pero la organización es clave. El equipo actual es un equipazo que más que por cuestiones materiales está por compromisos, por creencias intimas de sus propias filosofías de servicio. De desprenderte, de trabajar y hacer grandes cosas, es el honor. El proyecto genera identidad.

Los multiplicadores han venido con el proyecto. De hecho, la mitad han crecido con el proyecto. Son parte del sistema, en este momento si a mí me pasa algo, el proyecto no se acaba. Hay directores, hay estrategia hay departamentos hay delegaciones que trabajan para el patojismo. Se que hay un buen equipo que está trabajando ahora mismo [en el momento de la entrevista] y quizá con más intensidad, que yo en su momento.

Los Patojos en acción.

Y ahora que me hablás del desprendimiento. ¿Qué pasa con el ego? sos héroe de CNN y uno se da cuenta de que es muy fácil inflarse, pero no lo hiciste ¿cómo lo lograste?

Es una cuestión de sentido común. Tenes una oportunidad de representar a tu país a tu comunidad, tenés la oportunidad de crecer y tenés que verlo como una estrategia, no ego. Verlo como un beneficio colectivo, ante la ausencia del Estado y las instituciones que tendrían que cuidar y velar la integridad de los niños.

Es una de las oportunidades que tenía de decir: “miren muchá, en Guatemala no todo está tan yuca. Allá hay mara que está chambiando” realmente los héroes y heroínas, son las chavitas y chavitos que a diario ganan su lucha y se mantienen. Ellos me inspiran.

Es que no fue fácil para mí. La cuestión de la fama y la atención no fue fácil. Yo soy un servidor comunitario, y activista social. Pero desde 2017 tengo que aprender a ser estratega.

Para crear proyectos autosostenibles tenés que tener credibilidad a través de tus acciones justas. Una cosa es tener el discurso semiperfecto y tenerlo de ideología, otra cosa es mostrar a través de acciones concretas que lo que decís y pensás se puede llevar a la práctica, y lo que decís es tangible y es de beneficio de un monto de mara. Si eso es efectivo y a CNN le interesó mostrarlo, nosotros encantados.

Los patojos no es un proyecto de héroes, es un proyecto de empoderar a la persona en su totalidad, el centro importante del patojismo es la persona.

Sin embargo, con lo que me estás diciendo es muy fácil que venga alguien, con la intensión que sea a ser parte, para jalar agua para su molino

Totalmente, todos los días. A cada minuto. Siempre hay mara que se quiere aprovechar del esfuerzo colectivo.

… Pienso en marcas y políticos porque es lo primero que se me viene a la mente…

Y sí, tenés razón. Marcas sería más rentable para nosotros vaa, porque tenemos que pagar las cuentas. Sería más rentable que asociarnos con presencia política.

Antes tenía cierta tendencia, ahora me gusta más sentirme un idealista, más de resolver cosas con mis capacidades. Los patojos ha sido un proyecto muy atractivo para gente que está buscando ciertas cosas.

Pero los Patojos no es un proyecto tan baboso.

¿Pero cómo lo identificas? Por ejemplo, viene una marca y te ofrece tantos escritorios con tal de poner una marca en tal lugar.

Vamos a usar ese ejemplo. Cuando viene una empresa de ese nivel y te ofrece escritorios, pues, nosotros ya no usamos escritorios. Solo con ese ofrecimiento ya sabés que esa marca no está interesada en cuestiones integrales.

Ahora, si viene una marca y me dice te vamos a dar 39 Google Chromes con Internet para tus güiros (niños) y te vamos a dar el servicio. Pues, eso es efectivo. No es malo, ni bueno. Pero hasta el momento ninguna marca, ni ningún político lo ha hecho así.

Los patojos son como mi pequeña bola de cristal que tengo en las manos, y antes de delegartela tengo que ver si tus manos no están temblando, si no están sudando, es lo mismo que cuando aparece una empresa, lo sabes, es algo que tenés adentro.

Si lo sentís lo podes hacer y luego tener una capacidad profesional de tener una relación con inversionistas o donaciones, no se base en la caridad ni la victimización. Estamos creando capital humano. Preparando un estrato social diferente.

Violencia común o ataque

¿Qué pasa con el tema del robo, cómo se enfrenta?

Creo que más que afectar al proyecto es buscar intimidarme. Buscar desestabilizar el proyecto. Lo que sucede es que le estamos quitado todas las oportunidades a los narcos, a los drug dealers, y al crimen organizado.

Antes estaba disponible Jocotenango y sus alrededores. Ahora no. Ahora los niños están soñando con ser empresarios, músicos. Si ahora viene un cuate y les dice, “mirá, llévate esto para el otro lado y te doy Q500”… Los Patojos ya no se impresionan con el pisto.

Hay algún sector oscuro, que no sé quién sea que ya ha intentado dos veces afectar al Patojismo dos veces. Esos robos, que en teoría fueron más vandalismo, iban dirigidos a mí, lo que se robaron fue mi bicicleta, y cosas mías. Pero eso me hizo más fuerte, más cabrón, y más creativo. Y a la comunidad de Los Patojos más organizada y más fuerte. Les salió al revés. Se requiere de mucho para que nos de miedo y nos retiremos, esto apenas empieza.

¿Cómo un voluntario puede ser parte de Los Patojos?

El programa es bien abierto, no hay tanta burocracia es una cuestión más de respeto. Si sos artista y es lo que te gusta, y estás listo para compartirlo, es de llegar nada más. Es de llegar y decir, “mirá, tengo un par de horas a la semana ¿puedo llegar?”. Hemos tenido apoyo de artistas guatemaltecos, pintores, poetas y llegan construye buenos proyectos con los niños.

Los niños son los más cabrones, para darse cuenta de esas cosas yo les pregunto a ellos todo. Y a través de sus ojos es que me doy cuenta como se mantiene el proyecto. Te dicen, “profe así están las cosas”.

Esa es mi bendición. Toda la mara puede llegar, buscamos compromiso, sentimiento y personalidad, tampoco es obligación de la mara, pero la gente llega a colaborar con Los patojos, no importa a qué te dediqués, lo importante es que tan dispuesto estás a compartir lo que te hace feliz. El conocimiento es poder.

¿Cómo hago que un niño sea un líder?

Lo más importante es un amor completo y total. Acompañar a la persona. Si vos lo amas más que a vos mismo a la otra persona, es porque sabés su dolor y lo entendés y respetas, fortalecés sus potenciales, hacés que sus miedos también sean parte integral en la toma de sus decisiones, lo haces sentir.

Cuando una persona aprende a sentir y pone atención a su alrededor aprende a decidir a qué hacer y que no. Yo creo que toda la banda tiene un poquito de liderazgo interno, porque todo el tiempo tenés que resolver, cómo pagás, cómo comés, o en este caso, cómo ayudas. Cómo compartís. No existe el liderazgo si no desarrollás el amor, un amor libre. Amor es amor, para todos y todas. Los Patojos es un concepto de amor. Estamos aquí para ser parte de la historia.

¡Qué buen Patojo es Juan Pablo Romero!

Gabriel Arana Fuentes
02 de julio, 2017

El sitio de Los Patojos lo deja todo muy claro. Si se pregunta de qué trata Los Patojos ellos responden con que es un sueño y una idea en acción.

Pero Los Patojos también es un foco de luz y esperanza, un espacio abierto para la comunidad donde la creatividad y la libertad son lo más importante.

Por tanto, Los Patojos fortalecen mente y cuerpo y ese es el sueño, cada vez más tangible de uno de sus activistas más antiguos el Juan Pablo Romero, el Patojo Mayor.

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“¿Adivinen quiénes vendieron todos sus rábanos?”. Fotos: Cortesía de Los Patojos.

En la web de Los Patojos Juan Pablo Romero explica “Yo no hago coaching, ni me llega estar en lugares pretensiosos y menos con mara con excesivos privilegios, tampoco me invento frases para ganar prestigio o visibilidad.

A mí me gusta trabajar y construir con gente que está dispuesta a intentar siempre todo. Mi nombre es Juan Pablo Romero Fuentes y es lo único que es mío”.

En República decidimos acercarnos para hablar con él y que Juan Pablo Romero nos relatara en qué anda ahora, sobre todo porque está en la fase dos de Los Patojos, una fase que lo llevará a San Miguel Dueñas, en Sacatepéquez.

Mira las fotos de la 1a. Noche Cultural 2017 de los Patojos en este enlace.

¿Cuál es el objetivo de Los Patojos?

El objetivo del patojismo es que sea un sistema que se pueda plantear más allá de lo educativo en el país, Centroamérica y la región. Un proyecto importante y útil, como hablar de un Montessori, un Waldorf, solo que este sea local, nuestro.

Son 11 años de experimentación. Este año se termina la sistematización, y ya podemos implementarlo. Algo importante es la estética, los ambientes en materia de educación. Podés educar en una galera, en el monte, si querés, pero en el patojismo sí creemos que la estética, y los colores son fundamentales para el desarrollo de la educación.

En Redes Sociales se ve que Los Patojos se acercan a una fase dos. ¿Cómo va eso?

Lo que está en redes sociales es la expansión de la segunda escuela. Más que escuela es como un centro preuniversitario. La ciudad del patojismo, será un centro técnico. Uno donde la persona entra para encontrar opciones para desarrollar sus propios procesos personales, a nivel empresa, agricultura, tecnología, arte. Es un proyecto que está empezando.

Es un espacio grande para seguir el proceso que tenemos. Esto está en San Miguel Dueñas. Como a 20 minutos de Jocotenango.

Entonces, en Jocotenango tenemos niños de 3 años a 17 años y ahora en Dueñas tendremos la parte final. Ahí tendremos los de 14 años en adelante. Digamos que será un instituto que va graduar maestro y maestras. Preparamos a los Multiplicadores del patojismo, para expandir la metodología con nuevos liderazgos en magisterio.

Hay una convocatorio de fondos, ¿cómo es?

En 11 año nunca habíamos hecho una campaña global. Habíamos ignorado que en la red había una opción, se nos ocurrió una herramienta y encontramos en Global Giving eso. Hay proyectos de áreas de salud, de género y Derechos Humanos, y nosotros estamos en educación.

En lo global lo que quiero es que el proyecto le pertenezca a todos. Un cacho de ficha ayuda que el proyecto crezca, es el primer paso para ser autosostenibles. Link

Multiplicadores del patojismo

¿Hay apoya magisterial?

Mirá, seguimos el Pensum Nacional Base (PNB), pero realmente el currículum es una herramienta muy buena. Difiero que sea obsoleta, creo que es la forma en que se lleva a la acción pedagógica. Pero si un maestro tiene 60 años, ya está cansado, no se va poner a investigar recursos nuevos. O no optará necesariamente a la libertad de cátedra. Tampoco es que lo defienda, lo que si digo es que el país sí tiene una herramienta pero que está mal implementada.

Con los patojos descubrimos eso. El CNB te permite libertada de catedra, si sos educador comprometido te da chance a innovar. Para que el proyecto fuera reconocido por el ministerio de educación teníamos que implementarlo. Entonces aprendimos a utilizar e implementarlo a beneficio de la comunidad. Lo hicimos hace tres años y ahora ya estamos en la capacidad de implementar el nuestro.

Entonces el niño que sale de ahí ya sale con título académico

Claro, eso no se lo quitás al pueblo de Guatemala. Hay muchos padres de familia que tiene en su corazón eso, pese al desempleo y todo, es darle la satisfacción de que sus hijos tienen la primeraria. Son cosas más morales y de honor, que de ética y trascendencia.

Eso ya depende del sistema de Los Patojos, y todas las oportunidades que estamos ofreciendo. Pero el problema es muy local, respeta mucho el sentir de los guatemaltecos, la parte invisible de la ciudad, en este caso la periferia, en los Jocotes.

Nosotros le ponemos más atención a lo que ha sido invisibilizado. Y lo visibilizamos como una oportunidad de poder, a nivel nacional. Para nosotros no es impresionante que esté el PNB, el PNB es una herramienta más, como ahora es el Internet, o tener una laptop.

¿Cómo evitas que no se muera el patojismo en medio de los retos que te pone la vida?

Es un experimento muy íntimo que inició hace 11 años. Como joven seguía lo que ya estaba estructurado, seguía los pasos. Te comprás tu carro, te graduás, vas a la U, te casás, tenés 27 hijos. Empiezan las deudas, y la onda que ya sabés que vas hacer todos los días. O no.

La mía fue la segunda, crecí en un sector vulnerable, las opciones eran vender droga, chupar o llevártela de grueso. Entonces hice una fusión de esas dos experiencias y me di cuenta que tenía una oportunidad de oro para construir algo que no existía en Jocotenango. Un lugar creativo y seguro para que las niñas fueran y experimentaran de diversas formas.

Los Patojos si tienen mucha esencia mía, por supuesto es un proyecto íntimo, pero ya es un proyecto colectivo, ya es una institución pero aún hay detalles más emotivos, o por lo menos estéticos, que tienen que ver con lo que yo veo a nivel de planeta, no solo una escuela, tiene que ser comunitario. Para eso sirve el proyecto dos.

Para delegar a los multiplicadores, para delegar el potencial, la filosofía y la metodología para que Los Patojos y patojas puedan sentir el proyecto defenderlo y llevarlo más allá que solo una persona.

¿Parece que lo que proponés y hacés requiere de un esfuerzo doble o no?

Es triple, pero la organización es clave. El equipo actual es un equipazo que más que por cuestiones materiales está por compromisos, por creencias intimas de sus propias filosofías de servicio. De desprenderte, de trabajar y hacer grandes cosas, es el honor. El proyecto genera identidad.

Los multiplicadores han venido con el proyecto. De hecho, la mitad han crecido con el proyecto. Son parte del sistema, en este momento si a mí me pasa algo, el proyecto no se acaba. Hay directores, hay estrategia hay departamentos hay delegaciones que trabajan para el patojismo. Se que hay un buen equipo que está trabajando ahora mismo [en el momento de la entrevista] y quizá con más intensidad, que yo en su momento.

Los Patojos en acción.

Y ahora que me hablás del desprendimiento. ¿Qué pasa con el ego? sos héroe de CNN y uno se da cuenta de que es muy fácil inflarse, pero no lo hiciste ¿cómo lo lograste?

Es una cuestión de sentido común. Tenes una oportunidad de representar a tu país a tu comunidad, tenés la oportunidad de crecer y tenés que verlo como una estrategia, no ego. Verlo como un beneficio colectivo, ante la ausencia del Estado y las instituciones que tendrían que cuidar y velar la integridad de los niños.

Es una de las oportunidades que tenía de decir: “miren muchá, en Guatemala no todo está tan yuca. Allá hay mara que está chambiando” realmente los héroes y heroínas, son las chavitas y chavitos que a diario ganan su lucha y se mantienen. Ellos me inspiran.

Es que no fue fácil para mí. La cuestión de la fama y la atención no fue fácil. Yo soy un servidor comunitario, y activista social. Pero desde 2017 tengo que aprender a ser estratega.

Para crear proyectos autosostenibles tenés que tener credibilidad a través de tus acciones justas. Una cosa es tener el discurso semiperfecto y tenerlo de ideología, otra cosa es mostrar a través de acciones concretas que lo que decís y pensás se puede llevar a la práctica, y lo que decís es tangible y es de beneficio de un monto de mara. Si eso es efectivo y a CNN le interesó mostrarlo, nosotros encantados.

Los patojos no es un proyecto de héroes, es un proyecto de empoderar a la persona en su totalidad, el centro importante del patojismo es la persona.

Sin embargo, con lo que me estás diciendo es muy fácil que venga alguien, con la intensión que sea a ser parte, para jalar agua para su molino

Totalmente, todos los días. A cada minuto. Siempre hay mara que se quiere aprovechar del esfuerzo colectivo.

… Pienso en marcas y políticos porque es lo primero que se me viene a la mente…

Y sí, tenés razón. Marcas sería más rentable para nosotros vaa, porque tenemos que pagar las cuentas. Sería más rentable que asociarnos con presencia política.

Antes tenía cierta tendencia, ahora me gusta más sentirme un idealista, más de resolver cosas con mis capacidades. Los patojos ha sido un proyecto muy atractivo para gente que está buscando ciertas cosas.

Pero los Patojos no es un proyecto tan baboso.

¿Pero cómo lo identificas? Por ejemplo, viene una marca y te ofrece tantos escritorios con tal de poner una marca en tal lugar.

Vamos a usar ese ejemplo. Cuando viene una empresa de ese nivel y te ofrece escritorios, pues, nosotros ya no usamos escritorios. Solo con ese ofrecimiento ya sabés que esa marca no está interesada en cuestiones integrales.

Ahora, si viene una marca y me dice te vamos a dar 39 Google Chromes con Internet para tus güiros (niños) y te vamos a dar el servicio. Pues, eso es efectivo. No es malo, ni bueno. Pero hasta el momento ninguna marca, ni ningún político lo ha hecho así.

Los patojos son como mi pequeña bola de cristal que tengo en las manos, y antes de delegartela tengo que ver si tus manos no están temblando, si no están sudando, es lo mismo que cuando aparece una empresa, lo sabes, es algo que tenés adentro.

Si lo sentís lo podes hacer y luego tener una capacidad profesional de tener una relación con inversionistas o donaciones, no se base en la caridad ni la victimización. Estamos creando capital humano. Preparando un estrato social diferente.

Violencia común o ataque

¿Qué pasa con el tema del robo, cómo se enfrenta?

Creo que más que afectar al proyecto es buscar intimidarme. Buscar desestabilizar el proyecto. Lo que sucede es que le estamos quitado todas las oportunidades a los narcos, a los drug dealers, y al crimen organizado.

Antes estaba disponible Jocotenango y sus alrededores. Ahora no. Ahora los niños están soñando con ser empresarios, músicos. Si ahora viene un cuate y les dice, “mirá, llévate esto para el otro lado y te doy Q500”… Los Patojos ya no se impresionan con el pisto.

Hay algún sector oscuro, que no sé quién sea que ya ha intentado dos veces afectar al Patojismo dos veces. Esos robos, que en teoría fueron más vandalismo, iban dirigidos a mí, lo que se robaron fue mi bicicleta, y cosas mías. Pero eso me hizo más fuerte, más cabrón, y más creativo. Y a la comunidad de Los Patojos más organizada y más fuerte. Les salió al revés. Se requiere de mucho para que nos de miedo y nos retiremos, esto apenas empieza.

¿Cómo un voluntario puede ser parte de Los Patojos?

El programa es bien abierto, no hay tanta burocracia es una cuestión más de respeto. Si sos artista y es lo que te gusta, y estás listo para compartirlo, es de llegar nada más. Es de llegar y decir, “mirá, tengo un par de horas a la semana ¿puedo llegar?”. Hemos tenido apoyo de artistas guatemaltecos, pintores, poetas y llegan construye buenos proyectos con los niños.

Los niños son los más cabrones, para darse cuenta de esas cosas yo les pregunto a ellos todo. Y a través de sus ojos es que me doy cuenta como se mantiene el proyecto. Te dicen, “profe así están las cosas”.

Esa es mi bendición. Toda la mara puede llegar, buscamos compromiso, sentimiento y personalidad, tampoco es obligación de la mara, pero la gente llega a colaborar con Los patojos, no importa a qué te dediqués, lo importante es que tan dispuesto estás a compartir lo que te hace feliz. El conocimiento es poder.

¿Cómo hago que un niño sea un líder?

Lo más importante es un amor completo y total. Acompañar a la persona. Si vos lo amas más que a vos mismo a la otra persona, es porque sabés su dolor y lo entendés y respetas, fortalecés sus potenciales, hacés que sus miedos también sean parte integral en la toma de sus decisiones, lo haces sentir.

Cuando una persona aprende a sentir y pone atención a su alrededor aprende a decidir a qué hacer y que no. Yo creo que toda la banda tiene un poquito de liderazgo interno, porque todo el tiempo tenés que resolver, cómo pagás, cómo comés, o en este caso, cómo ayudas. Cómo compartís. No existe el liderazgo si no desarrollás el amor, un amor libre. Amor es amor, para todos y todas. Los Patojos es un concepto de amor. Estamos aquí para ser parte de la historia.