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Alejandro Sinibaldi empieza a sufrir la tormenta

Luis Gonzalez
14 de julio, 2017

Esta nota fue publicada el 11 de diciembre de 2016

El martes 6 de diciembre de 2016 el nombre del exministro de Comunicaciones del Partido Patriota (PP), Alejandro Sinibaldi, volvió a ocupar los titulares y portadas de los medios de comunicación.

Ese día, la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), del Ministerio Público (MP), allanó propiedades del exfuncionario y al final de la jornada inmovilizó nueve inmuebles, un helicóptero y dos hangares supuestamente propiedad del aludido.

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Al conocerse los operativos, de inmediato se asociaron al caso La Cooperacha, por el cual tiene orden de captura Sinibaldi, pero pronto el jefe de la FECI, Juan Francisco Sandoval, aclaró que se trataba de una nueva investigación por lavado de dinero.

Esta acción de las autoridades es la más concreta contra el excandidato presidencial del PP, pues antes de ello su nombre sonó en tres casos de supuestos actos de corrupción, dos de los cuales están en manos del MP.

Alejandro Sinibaldi se encuentra prófugo.

“Papeles shucos”

En 2014 el Partido Patriota acordó que Sinibaldi fuera su candidato para participar en las elecciones de 2015. Su designación no fue fácil, sobre todo por las diferencias con la exvicepresidenta Roxana Baldetti, problemas que al final no se resolvieron y motivaron su renuncia del PP, según la propia versión del exministro.

Tres meses después de dejar el cargo en la cartera de Comunicaciones, Sinibaldi recibió el primer golpe bajo. El 16 de diciembre de 2014, los medios de comunicación de Brasil informaron acerca del hallazgo de un papel que lo relacionaba con José Aldemario Pinheiro Filho, presidente de la constructora OAS, investigado en aquella fecha, y ahora condenado a 16 años de cárcel por corrupción en el caso Petrobras.

Según la anotación, con puño y letra supuestamente de Pinheiro Filho, el PP habría recibido una donación de US$1 millón para impulsar la campaña electoral de Sinibaldi, quien le restó importancia al asunto por tratarse de “un simple papel” y aunque reconoció que viajó en tres ocasiones hacia Brasil, aseguró que sus salidas no tenían relación con OAS.

Cuatro meses de este hecho, el 19 de abril de 2015, el exministro renunció a la precandidatura del PP y al partido, señalando que el motivo de su salida era el “constante bloqueo, sabotaje y chantaje” de Baldetti.

Además, dijo que no estaba de acuerdo con la manera en la cual los patriotas administraban el Estado y prefería irse, antes de ser parte de decisiones negativas para el país, anuncio realizado cuatro días después de que se revelara el caso La Línea, que marcó el principio del final de los exgobernantes y del PP.

Luego de su renuncia, mucho se dijo acerca de que Sinibaldi sería el candidato del Movimiento Reformador, una agrupación que pretendía cobijar a los diputados y alcaldes que renunciaron al PP tras la salida del exministro y la revelación del caso La Línea.

Pero nada ocurrió y él prefirió guardar silencio; sin embargo, el 26 de noviembre de 2015, el MP dio a conocer que lo investigaba por una denuncia relacionada con irregularidades en la entrega del subsidio al transporte urbano, el delito sería malversación de fondos.

Un año más tarde, las autoridades añadieron que siguen la pesquisa, pero este caso del subsidio, sumado al del transurbano, es “complejo” y aunque hay avances, todavía no tienen pruebas suficientes para los trámites judiciales. En esta investigación se indaga el proceder de exfuncionarios de los gobiernos de la UNE y del PP.

La Cooperacha

El nombre de Sinibaldi no volvió a citarse los próximos seis meses, pero el 11 de junio, un sábado, el MP y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), sorprendieron con las capturas de los exministros Mauricio López Bonilla, Manuel López Ambrocio y Ulises Anzueto, así cómo las órdenes de aprehensión internacional contra el también exministro Erick Archila y Sinibaldi.

El caso fue bautizado como La Coperacha, pues aludía a recolecciones millonarias para comprar regalos a los exgobernantes Otto Pérez Molina y Baldetti, quienes así eran agradados en sus cumpleaños.

En este caso, según el MP y la CICIG, Sinibaldi habría aportado dinero para comprar dos obsequios para Pérez Molina: la casa en Taxisco, Santa Rosa, por la cual aportó Q1.5 millones, dinero entregado a Baldetti, y un helicóptero modelo 2013, siendo su contribución US$245 mil.

Ya fuera de Guatemala, Sinibaldi rechazó la sindicación basada en un “papel shuco” y en las declaraciones de Juan Carlos Monzón, “un delincuente confeso”.

¿Volverá al país?

De acuerdo con una entrevista publicada por Soy502, Sinibaldi estuvo en la India y ahora se encontraría en Washington, Estados Unidos, pero según el comunicado anterior, exige pruebas “serias y sustentables” porque “no estoy dispuesto a prestarme a un circo, ni que se juegue con mi nombre y mi libertad”.

El anuncio de una nueva investigación, pero sobre todo la inmovilización de sus bienes, podría cambiar esta opinión y no sería extraño verlo llegar a tribunales, pues la tormenta ya empezó y apunta a que arreciará, con o sin su presencia.

Y este día salen a luz nuevos hallazgos…

Alejandro Sinibaldi empieza a sufrir la tormenta

Luis Gonzalez
14 de julio, 2017

Esta nota fue publicada el 11 de diciembre de 2016

El martes 6 de diciembre de 2016 el nombre del exministro de Comunicaciones del Partido Patriota (PP), Alejandro Sinibaldi, volvió a ocupar los titulares y portadas de los medios de comunicación.

Ese día, la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), del Ministerio Público (MP), allanó propiedades del exfuncionario y al final de la jornada inmovilizó nueve inmuebles, un helicóptero y dos hangares supuestamente propiedad del aludido.

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Al conocerse los operativos, de inmediato se asociaron al caso La Cooperacha, por el cual tiene orden de captura Sinibaldi, pero pronto el jefe de la FECI, Juan Francisco Sandoval, aclaró que se trataba de una nueva investigación por lavado de dinero.

Esta acción de las autoridades es la más concreta contra el excandidato presidencial del PP, pues antes de ello su nombre sonó en tres casos de supuestos actos de corrupción, dos de los cuales están en manos del MP.

Alejandro Sinibaldi se encuentra prófugo.

“Papeles shucos”

En 2014 el Partido Patriota acordó que Sinibaldi fuera su candidato para participar en las elecciones de 2015. Su designación no fue fácil, sobre todo por las diferencias con la exvicepresidenta Roxana Baldetti, problemas que al final no se resolvieron y motivaron su renuncia del PP, según la propia versión del exministro.

Tres meses después de dejar el cargo en la cartera de Comunicaciones, Sinibaldi recibió el primer golpe bajo. El 16 de diciembre de 2014, los medios de comunicación de Brasil informaron acerca del hallazgo de un papel que lo relacionaba con José Aldemario Pinheiro Filho, presidente de la constructora OAS, investigado en aquella fecha, y ahora condenado a 16 años de cárcel por corrupción en el caso Petrobras.

Según la anotación, con puño y letra supuestamente de Pinheiro Filho, el PP habría recibido una donación de US$1 millón para impulsar la campaña electoral de Sinibaldi, quien le restó importancia al asunto por tratarse de “un simple papel” y aunque reconoció que viajó en tres ocasiones hacia Brasil, aseguró que sus salidas no tenían relación con OAS.

Cuatro meses de este hecho, el 19 de abril de 2015, el exministro renunció a la precandidatura del PP y al partido, señalando que el motivo de su salida era el “constante bloqueo, sabotaje y chantaje” de Baldetti.

Además, dijo que no estaba de acuerdo con la manera en la cual los patriotas administraban el Estado y prefería irse, antes de ser parte de decisiones negativas para el país, anuncio realizado cuatro días después de que se revelara el caso La Línea, que marcó el principio del final de los exgobernantes y del PP.

Luego de su renuncia, mucho se dijo acerca de que Sinibaldi sería el candidato del Movimiento Reformador, una agrupación que pretendía cobijar a los diputados y alcaldes que renunciaron al PP tras la salida del exministro y la revelación del caso La Línea.

Pero nada ocurrió y él prefirió guardar silencio; sin embargo, el 26 de noviembre de 2015, el MP dio a conocer que lo investigaba por una denuncia relacionada con irregularidades en la entrega del subsidio al transporte urbano, el delito sería malversación de fondos.

Un año más tarde, las autoridades añadieron que siguen la pesquisa, pero este caso del subsidio, sumado al del transurbano, es “complejo” y aunque hay avances, todavía no tienen pruebas suficientes para los trámites judiciales. En esta investigación se indaga el proceder de exfuncionarios de los gobiernos de la UNE y del PP.

La Cooperacha

El nombre de Sinibaldi no volvió a citarse los próximos seis meses, pero el 11 de junio, un sábado, el MP y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), sorprendieron con las capturas de los exministros Mauricio López Bonilla, Manuel López Ambrocio y Ulises Anzueto, así cómo las órdenes de aprehensión internacional contra el también exministro Erick Archila y Sinibaldi.

El caso fue bautizado como La Coperacha, pues aludía a recolecciones millonarias para comprar regalos a los exgobernantes Otto Pérez Molina y Baldetti, quienes así eran agradados en sus cumpleaños.

En este caso, según el MP y la CICIG, Sinibaldi habría aportado dinero para comprar dos obsequios para Pérez Molina: la casa en Taxisco, Santa Rosa, por la cual aportó Q1.5 millones, dinero entregado a Baldetti, y un helicóptero modelo 2013, siendo su contribución US$245 mil.

Ya fuera de Guatemala, Sinibaldi rechazó la sindicación basada en un “papel shuco” y en las declaraciones de Juan Carlos Monzón, “un delincuente confeso”.

¿Volverá al país?

De acuerdo con una entrevista publicada por Soy502, Sinibaldi estuvo en la India y ahora se encontraría en Washington, Estados Unidos, pero según el comunicado anterior, exige pruebas “serias y sustentables” porque “no estoy dispuesto a prestarme a un circo, ni que se juegue con mi nombre y mi libertad”.

El anuncio de una nueva investigación, pero sobre todo la inmovilización de sus bienes, podría cambiar esta opinión y no sería extraño verlo llegar a tribunales, pues la tormenta ya empezó y apunta a que arreciará, con o sin su presencia.

Y este día salen a luz nuevos hallazgos…