Política
Política
Empresa
Empresa
Investigación y Análisis
Investigación y Análisis
Internacional
Internacional
Opinión
Opinión
Inmobiliaria
Inmobiliaria
Agenda Empresarial
Agenda Empresarial

Carta al futuro para Andrés

Ana González
01 de octubre, 2017

Es uno de octubre de 2029. Cumples 20 años. Me imagino que ya eres todo un universitario. Recuerdo que a los siete años dijiste que querías ser músico, ese deseo surgió cuando descubriste al grupo Queen. Siempre hablabas de Fredy Mercury y de viajar a Londres para conocer su casa. ¿Cómo va ese viaje? ¿Pudiste ir?

Te imagino tocando guitarra. Ojalá hayas tomado mi consejo de estudiar algo que te permita ganar lo suficiente para darte tus gustos. No sé si sigues nadando. Recuerdo que de muy niño odiaste el agua. Tuve que interrumpir tus clases porque llorabas cada vez que te llevaba.

Sin embargo, a los seis años eso cambió. Pediste regresar a las clases y tu papá te llevaba sin falta cada sábado.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER DE VIVE

No sé si logré cumplir tu deseo de darte un hermano o hermana. Sufrimos mucho cuando perdimos a Fátima y Sofía ¿Lo recuerdas? tuve que pedir al colegio que te acompañara en tu duelo. Ayer hubieran cumplido doce años.

Espero que la nobleza que te caracterizó de niño prevalezca de adulto. Una vez te dije que debías estar alerta ya que hay mucha gente pura mierda. No olvido lo que me dijiste: “esa es mala palabra mami” y te respondí: Hay personas que no pueden llamarse de otra manera. Esa respuesta fue parte del trato.

¿Te recuerdas? Quedamos de hablarnos siempre con la verdad. Lo acordamos cuando íbamos en el carro un día que fui a recogerte a la casa de mi mamá. Me intriga saber si la sigues llamando “otra mama”. Mi papá sigue siendo ¿papucho?

Espero hayas vencido las inseguridades que tuviste de niño. Desde que estabas en el vientre leí toda clase de artículos para ser una buena mamá, pero con el tiempo descubrí que no era perfecta. Ojalá haya tenido más aciertos que errores y que a estas alturas te sientas orgulloso de mí y de la forma como te eduqué.

¿Ya experimentaste lo que es el primer amor? Siempre elogiaste la relación que tenía con tu papá. Incluso te ponías celoso cuando tu papá me daba besos o abrazos.  ¿Me sigues diciendo mami? O me dices madre. De niño me advertiste que me llamarías así cuando fueras adulto.

Sobre la relación con tu papá. ¿Es tu mejor amigo? ¿Siguen compartiendo? Recuerdas el dibujo que hiciste en tu clase de arte donde tu papá estaba a la par y a mí me dibujaste del otro lado. Me puse celosa. Lo reconozco.

Sobre la lectura. ¿Lees seguido? Desde pequeño te leíamos un cuento antes de dormir para fomentarte el hábito. Si alguien te pregunta cuál fue el primer libro que te leí. Fue El Principito. Te gustó tanto el personaje que nos mandamos a hacer playeras. La mía era roja, la tuya blanca y la de tu papi negra.

Tal vez te parezca raro que te haya escrito esta carta en 2017, cuando apenas cumplías ocho años. Pero te escribo para saber cómo eres a los 20 años. Quiero saber si cumplí mi objetivo. ¿Te recuerdas lo que te decía casi a diario? Que todos mis esfuerzos estaban encaminados a que siempre fueras feliz. Espero que lo haya logrado, y que tus carcajadas de niño travieso te sigan acompañando.

Con amor,

Tu mami

Lee también

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER DE VIVE

Carta al futuro para Andrés

Ana González
01 de octubre, 2017

Es uno de octubre de 2029. Cumples 20 años. Me imagino que ya eres todo un universitario. Recuerdo que a los siete años dijiste que querías ser músico, ese deseo surgió cuando descubriste al grupo Queen. Siempre hablabas de Fredy Mercury y de viajar a Londres para conocer su casa. ¿Cómo va ese viaje? ¿Pudiste ir?

Te imagino tocando guitarra. Ojalá hayas tomado mi consejo de estudiar algo que te permita ganar lo suficiente para darte tus gustos. No sé si sigues nadando. Recuerdo que de muy niño odiaste el agua. Tuve que interrumpir tus clases porque llorabas cada vez que te llevaba.

Sin embargo, a los seis años eso cambió. Pediste regresar a las clases y tu papá te llevaba sin falta cada sábado.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER DE VIVE

No sé si logré cumplir tu deseo de darte un hermano o hermana. Sufrimos mucho cuando perdimos a Fátima y Sofía ¿Lo recuerdas? tuve que pedir al colegio que te acompañara en tu duelo. Ayer hubieran cumplido doce años.

Espero que la nobleza que te caracterizó de niño prevalezca de adulto. Una vez te dije que debías estar alerta ya que hay mucha gente pura mierda. No olvido lo que me dijiste: “esa es mala palabra mami” y te respondí: Hay personas que no pueden llamarse de otra manera. Esa respuesta fue parte del trato.

¿Te recuerdas? Quedamos de hablarnos siempre con la verdad. Lo acordamos cuando íbamos en el carro un día que fui a recogerte a la casa de mi mamá. Me intriga saber si la sigues llamando “otra mama”. Mi papá sigue siendo ¿papucho?

Espero hayas vencido las inseguridades que tuviste de niño. Desde que estabas en el vientre leí toda clase de artículos para ser una buena mamá, pero con el tiempo descubrí que no era perfecta. Ojalá haya tenido más aciertos que errores y que a estas alturas te sientas orgulloso de mí y de la forma como te eduqué.

¿Ya experimentaste lo que es el primer amor? Siempre elogiaste la relación que tenía con tu papá. Incluso te ponías celoso cuando tu papá me daba besos o abrazos.  ¿Me sigues diciendo mami? O me dices madre. De niño me advertiste que me llamarías así cuando fueras adulto.

Sobre la relación con tu papá. ¿Es tu mejor amigo? ¿Siguen compartiendo? Recuerdas el dibujo que hiciste en tu clase de arte donde tu papá estaba a la par y a mí me dibujaste del otro lado. Me puse celosa. Lo reconozco.

Sobre la lectura. ¿Lees seguido? Desde pequeño te leíamos un cuento antes de dormir para fomentarte el hábito. Si alguien te pregunta cuál fue el primer libro que te leí. Fue El Principito. Te gustó tanto el personaje que nos mandamos a hacer playeras. La mía era roja, la tuya blanca y la de tu papi negra.

Tal vez te parezca raro que te haya escrito esta carta en 2017, cuando apenas cumplías ocho años. Pero te escribo para saber cómo eres a los 20 años. Quiero saber si cumplí mi objetivo. ¿Te recuerdas lo que te decía casi a diario? Que todos mis esfuerzos estaban encaminados a que siempre fueras feliz. Espero que lo haya logrado, y que tus carcajadas de niño travieso te sigan acompañando.

Con amor,

Tu mami

Lee también