El trágico final de dos migrantes guatemaltecas acaparó la atención de los medios de comunicación y de las organizaciones que velan por los derechos de los chapines que buscan llegar a Estados Unidos o viven en esa nación.
A Claudia Patricia Gómez González, de 20 años y Selena Hidalgo-Calderón, de 18, las une una historia triste. Su condición de migrantes las obligó a tomar decisiones en su vida y a emprender el viaje a Estados Unidos, sin saber que era un viaje sin retorno.
Las dos fueron asesinadas esta semana. De Claudia Gómez se sabe que el atacante fue un guardia de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos cuando recién había ingresado de manera ilegal en ese país. De Selena Hidalgo se conoce que fue deportada y estaba por solicitar asilo cuando desapareció junto con su hijo de 14 meses. Ella fue hallada muerta, pero del bebé se desconoce el paradero.
Un sueño cortado de un tajo
Claudia Gómez se graduó de Perito Contador y tras no encontrar un trabajo para ayudar a su familia de escasos recursos económicos, decidió emprender el viaje a Estados Unidos. Salió de su natal San Juan Ostuncalco, Quetzaltenango, 15 días antes de su muerte, ocurrida este miércoles en Río Bravo, Texas.
Cuando apenas había pasado la frontera en compañía de otros jóvenes, fue descubierta por un agente y en un confuso incidente bajo investigación, el guardia disparó y la bala dio en la cabeza de la víctima. Pocos segundos después del incidente, una vecina grabó al patrullero responsable del ataque y lo confrontó.
El oficial de la Patrulla Fronteriza trató de detener al grupo pero, según el comunicado, “fue atacado por varios sujetos usando objetos sin filo (blunt objects)” (presuntamente piedras) y este disparó su arma de servicio, hiriendo de muerte a “uno de los asaltantes”.
“No debió morir por tener los sueños”
Organizaciones de derechos civiles pidieron que la investigación, que supuestamente está a cargo del FBI en Texas y de los Texas Rangers, se lleve a cabo con transparencia, pero señalaron que las agencias migratorias no tienen buen historial al respecto.
Astrid Domínguez, directora de la Unión de Libertades Civiles de Texas (ACLU) dijo que la investigación “debe ser completa y transparente” y que la Patrulla Fronteriza debe ampliar el uso de cámaras de video corporales para cada uno de sus agentes.
Ben Monterroso, director ejecutivo de la organización Mi Familia Vota, condenó el incidente y apuntó que las mujeres migrantes están entre las más vulnerables.
“Esta mujer, tan llena de potencial, no debió morir por tener los sueños y la determinación de hacer un futuro en nuestro país”, dijo Monterroso. “Nuestros agentes tienen la responsabilidad de proteger a todas las personas y nuestro gobierno, la de investigar las acciones de este oficial en forma independiente”.
“Siento que me falta un pedazo de mi corazón”
“Mi hija y mi nieto eran mi vida, ella fue mi primera hija y siento que me falta un pedazo de mi corazón”, escribió Estela Calderon, madre de Selena Hidalgo Calderon, una joven madre guatemalteca que desapareció junto con su hijo y luego fue hallada muerta en una granja de Sodus, Wayne, Nueva York.
Hildalgo y su hijo fueron reportados desaparecidos hace una semana. El bebé sigue sin ser encontrado, pero el cuerpo de su madre apareció en una bolsa escondida en una granja donde ella había trabajado, informó la oficina del sheriff del condado Wayne.
Las autoridades sospechan que la vida del niño Owen Hidalgo está en peligro. La búsqueda se concentra en el área este de Rochester, detalló 4 News.
La fotografía más reciente de Owen, quien es buscado por las autoridades de EEUU.
El novio de Selena, Everardo Reyes, fue arrestado bajo cargos de manipulación de pruebas físicas.
Rebecca Fuentes, del Centro de Trabajadores de Nueva York (CNY), dijo a la prensa que la víctima era originaria de Guatemala, que había sido deportada y estaba en proceso de solicitar asilo.
En 2017 fueron deportados vía aérea de Estados Unidos, 32 mil 833 migrantes y se registraron los casos de casi 15 mil niños y adolescentes no acompañados en la frontera sur con México, según la Dirección General de Migración y el Observatorio de los Derechos de la Niñez.
El trágico final de dos migrantes guatemaltecas acaparó la atención de los medios de comunicación y de las organizaciones que velan por los derechos de los chapines que buscan llegar a Estados Unidos o viven en esa nación.
A Claudia Patricia Gómez González, de 20 años y Selena Hidalgo-Calderón, de 18, las une una historia triste. Su condición de migrantes las obligó a tomar decisiones en su vida y a emprender el viaje a Estados Unidos, sin saber que era un viaje sin retorno.
Las dos fueron asesinadas esta semana. De Claudia Gómez se sabe que el atacante fue un guardia de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos cuando recién había ingresado de manera ilegal en ese país. De Selena Hidalgo se conoce que fue deportada y estaba por solicitar asilo cuando desapareció junto con su hijo de 14 meses. Ella fue hallada muerta, pero del bebé se desconoce el paradero.
Un sueño cortado de un tajo
Claudia Gómez se graduó de Perito Contador y tras no encontrar un trabajo para ayudar a su familia de escasos recursos económicos, decidió emprender el viaje a Estados Unidos. Salió de su natal San Juan Ostuncalco, Quetzaltenango, 15 días antes de su muerte, ocurrida este miércoles en Río Bravo, Texas.
Cuando apenas había pasado la frontera en compañía de otros jóvenes, fue descubierta por un agente y en un confuso incidente bajo investigación, el guardia disparó y la bala dio en la cabeza de la víctima. Pocos segundos después del incidente, una vecina grabó al patrullero responsable del ataque y lo confrontó.
El oficial de la Patrulla Fronteriza trató de detener al grupo pero, según el comunicado, “fue atacado por varios sujetos usando objetos sin filo (blunt objects)” (presuntamente piedras) y este disparó su arma de servicio, hiriendo de muerte a “uno de los asaltantes”.
“No debió morir por tener los sueños”
Organizaciones de derechos civiles pidieron que la investigación, que supuestamente está a cargo del FBI en Texas y de los Texas Rangers, se lleve a cabo con transparencia, pero señalaron que las agencias migratorias no tienen buen historial al respecto.
Astrid Domínguez, directora de la Unión de Libertades Civiles de Texas (ACLU) dijo que la investigación “debe ser completa y transparente” y que la Patrulla Fronteriza debe ampliar el uso de cámaras de video corporales para cada uno de sus agentes.
Ben Monterroso, director ejecutivo de la organización Mi Familia Vota, condenó el incidente y apuntó que las mujeres migrantes están entre las más vulnerables.
“Esta mujer, tan llena de potencial, no debió morir por tener los sueños y la determinación de hacer un futuro en nuestro país”, dijo Monterroso. “Nuestros agentes tienen la responsabilidad de proteger a todas las personas y nuestro gobierno, la de investigar las acciones de este oficial en forma independiente”.
“Siento que me falta un pedazo de mi corazón”
“Mi hija y mi nieto eran mi vida, ella fue mi primera hija y siento que me falta un pedazo de mi corazón”, escribió Estela Calderon, madre de Selena Hidalgo Calderon, una joven madre guatemalteca que desapareció junto con su hijo y luego fue hallada muerta en una granja de Sodus, Wayne, Nueva York.
Hildalgo y su hijo fueron reportados desaparecidos hace una semana. El bebé sigue sin ser encontrado, pero el cuerpo de su madre apareció en una bolsa escondida en una granja donde ella había trabajado, informó la oficina del sheriff del condado Wayne.
Las autoridades sospechan que la vida del niño Owen Hidalgo está en peligro. La búsqueda se concentra en el área este de Rochester, detalló 4 News.
La fotografía más reciente de Owen, quien es buscado por las autoridades de EEUU.
El novio de Selena, Everardo Reyes, fue arrestado bajo cargos de manipulación de pruebas físicas.
Rebecca Fuentes, del Centro de Trabajadores de Nueva York (CNY), dijo a la prensa que la víctima era originaria de Guatemala, que había sido deportada y estaba en proceso de solicitar asilo.
En 2017 fueron deportados vía aérea de Estados Unidos, 32 mil 833 migrantes y se registraron los casos de casi 15 mil niños y adolescentes no acompañados en la frontera sur con México, según la Dirección General de Migración y el Observatorio de los Derechos de la Niñez.