Este Lunes 30 de julio, el gobierno de EEUU en un comunicado oficial de la Casa Blanca denunció las acciones del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
- Aquí el comunicado completo: Statement from the Press Secretary on Nicaragua
Casa Blanca condena violencia en Nicaragua
“EEUU condena fuertemente la violencia en Nicaragua y los abusos de los derechos humanos cometidos por el régimen de Ortega en respuesta las protestas.”
“El presidente Ortega y la vicepresidenta Murillo son responsables en última instancia por los grupos parapolicíales favorables al gobierno que han brutalizado a su propio pueblo.” Este comunicado viene después de que en una entrevista con Fox News, el mandatario Ortega negara cualquier relación con los grupos paramilitares a quienes se les acusa de los más de 400 asesinatos que han dejado las protestas.
Washington exige elecciones anticipadas
El gobierno estadounidense expresó su total apoyo y solidaridad con el pueblo nicaragüense y además exigió elecciones “justas, libres y transparentes” para restaurar la democracia en el país.
El gobierno de Donald Trump también expresó su apoyo al diálogo liderado por la iglesia católica.
EEUU impone más sanciones
En el comunicado oficial, la Casa Blanca acusó a tres funcionarios nicaragüenses bajo la Ley Global Magnitsky por abuso de derechos humanos y corrupción.
Además revocó y negará cualquier solicitud de visas de oficiales nicaragüenses y sus familias que han expresado apoyo al gobierno y los paramilitares.
Otras sanciones incluyen el regreso de los vehículos que habían donado a la policía nacional de Nicaragua y la designación de 1.5 millones de dólares para apoyar las causas de las organizaciones de derechos humanos, los medios de comunicación independiente y la sociedad civil.
La comunidad internacional
Este comunicado se suma a las denuncias internacionales en contra del gobierno de Ortega y sus acciones. Estados Unidos prometió monitorear de cerca la situación de Nicaragua y dijo que trabajará junto con la comunidad internacional para enjuiciar a los responsables.
Este Lunes 30 de julio, el gobierno de EEUU en un comunicado oficial de la Casa Blanca denunció las acciones del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
- Aquí el comunicado completo: Statement from the Press Secretary on Nicaragua
Casa Blanca condena violencia en Nicaragua
“EEUU condena fuertemente la violencia en Nicaragua y los abusos de los derechos humanos cometidos por el régimen de Ortega en respuesta las protestas.”
“El presidente Ortega y la vicepresidenta Murillo son responsables en última instancia por los grupos parapolicíales favorables al gobierno que han brutalizado a su propio pueblo.” Este comunicado viene después de que en una entrevista con Fox News, el mandatario Ortega negara cualquier relación con los grupos paramilitares a quienes se les acusa de los más de 400 asesinatos que han dejado las protestas.
Washington exige elecciones anticipadas
El gobierno estadounidense expresó su total apoyo y solidaridad con el pueblo nicaragüense y además exigió elecciones “justas, libres y transparentes” para restaurar la democracia en el país.
El gobierno de Donald Trump también expresó su apoyo al diálogo liderado por la iglesia católica.
EEUU impone más sanciones
En el comunicado oficial, la Casa Blanca acusó a tres funcionarios nicaragüenses bajo la Ley Global Magnitsky por abuso de derechos humanos y corrupción.
Además revocó y negará cualquier solicitud de visas de oficiales nicaragüenses y sus familias que han expresado apoyo al gobierno y los paramilitares.
Otras sanciones incluyen el regreso de los vehículos que habían donado a la policía nacional de Nicaragua y la designación de 1.5 millones de dólares para apoyar las causas de las organizaciones de derechos humanos, los medios de comunicación independiente y la sociedad civil.
La comunidad internacional
Este comunicado se suma a las denuncias internacionales en contra del gobierno de Ortega y sus acciones. Estados Unidos prometió monitorear de cerca la situación de Nicaragua y dijo que trabajará junto con la comunidad internacional para enjuiciar a los responsables.