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Fallece pediatra María José Carrillo Quan, víctima de explosión

Luis Gonzalez
27 de febrero, 2019

Lo que todos temían ocurrió. María José Carrillo Quan ha muerto. La joven pediatra batalló por su vida, pero la gravedad de las heridas causadas por una explosión en su apartamento fueron letales.

Junto con ella se pierde otra vida, la de su bebé que esperaba con tanta ilusión junto con Luis Carlos Porras Castañeda, su pareja, con quien se encontraba la noche del domingo 17 de febrero cuando ocurrió el suceso.

Los familiares y amigos temían lo peor porque la “Chinita”, como le llamaban cariñosamente, se encontraba en estado delicado desde que ocurrió la explosión y fue imposible trasladarla a otro país porque su estado de salud era de “pronóstico reservado”.

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Carrillo Quan dejó de existir al final de la tarde de este miércoles en el Hospital General San Juan de Dios, donde permanecía en el área de cuidados intensivos.

Conmoción en el gremio médico

La triste noticia de María José llega apenas unos días de otro fallecimiento, coincidentemente, el de otra pediatra, Mónica Asencio Oliva, quien fue baleada el 4 de febrero en el parqueo del Hospital de Zacapa, y falleció el 25 de febrero, mientras era atendida en un hospital de la capital.

Carrilo Quan era pediatra especializada en gastroenterología. Estudió en México y sus amigos la recuerdan como una gran profesional, pero sobre todo como una persona de bien, alegre, optimista, servicial y “luchadora”.

De acuerdo con el relato de su hermana Lyla, hace unos meses regresó a Guatemala para apoyar el sistema de salud pública en hospitales de Escuintla y Amatitlán.

También inició su proyecto personal abriendo una clínica privada y apenas empezaba a cosechar parte de lo sembrado durante 15 años de estudios de medicina.

Hoy el gremio médico está de luto. En una semana han perdido a dos profesionales que servían a la niñez del país.

Sus seres queridos y amigos nunca perdieron la esperanza. Todos se unieron en oraciones y apoyo económico para salvar la vida de María José y su bebé.

Solo queda repetir lo que escribió un colega de Asencio el día que supo de su fallecimiento: “Alguien tenía que ir a cuidar a los bebés al cielo!

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Junto con ella se pierde otra vida, la de su bebé que esperaba con tanta ilusión junto con Luis Carlos Porras Castañeda, su pareja, con quien se encontraba la noche del domingo 17 de febrero cuando ocurrió el suceso.

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También inició su proyecto personal abriendo una clínica privada y apenas empezaba a cosechar parte de lo sembrado durante 15 años de estudios de medicina.

Hoy el gremio médico está de luto. En una semana han perdido a dos profesionales que servían a la niñez del país.

Sus seres queridos y amigos nunca perdieron la esperanza. Todos se unieron en oraciones y apoyo económico para salvar la vida de María José y su bebé.

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