Los reducidos y controlados espacios para propaganda que tienen los partidos, han hecho que busquen estrategias para incrementar su alcance con los votantes.
Las agrupaciones sólo tienen autorizadas ocho vallas en distintas partes del país cada 30 días, anuncios de radio y televisión, pero principalmente en medios del interior.
Esta situación fue una queja constante de los partidos, que temen no poder dar a conocer a sus candidatos, sin embargo, así quedó establecido en las reformas a la Ley Electoral y de Partidos Políticos aprobadas en 2016.
Varios fiscales de partidos plantearon a los magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE), la posibilidad de continuar con el proselitismo durante los 90 días que dura la campaña electoral -comienza el 18 de marzo-.
El proselitismo, según la LEPP, son las actividades y acciones de formación y capacitación, organización y difusión de su ideología, programa político, propuesta política, posiciones políticas, convocatorias y cualquier otra actividad referida al funcionamiento de las organizaciones políticas.
La estretagia
Las agrupaciones prevén llegar a más ciudadanos por medio de la promoción de su símbolo y la invitación a afiliarse -proselitismo-.
Contratar a los medios de comunicación y empresas de publicidad con ese fin, no está prohibido y no requiere que las entidades privadas estén registradas en el TSE.
Elmer Palencia, fiscal del partido Valor, pidió a los magistrados una aclaración sobre este aspecto, y en qué gastos de los partidos debe ser reportado.
El director de la Unidad de Fiscalización del TSE, Giovanni Rodríguez, aseguró que ese no sería un gasto de campaña, sino administrativo o de actividades permanentes.
El fiscal de Unidos, Alex Franco, planteó que las empresas de publicidad le han expresado su disponibilidad a seguir permitiendo colocar anuncios, sin embargo, temen ser sancionados.
Los fiscales solicitaron al Tribunal emitir una resolución o una nota donde informen sobre la posibilidad de los partidos de contratar espacios para proselitismo.
Los reducidos y controlados espacios para propaganda que tienen los partidos, han hecho que busquen estrategias para incrementar su alcance con los votantes.
Las agrupaciones sólo tienen autorizadas ocho vallas en distintas partes del país cada 30 días, anuncios de radio y televisión, pero principalmente en medios del interior.
Esta situación fue una queja constante de los partidos, que temen no poder dar a conocer a sus candidatos, sin embargo, así quedó establecido en las reformas a la Ley Electoral y de Partidos Políticos aprobadas en 2016.
Varios fiscales de partidos plantearon a los magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE), la posibilidad de continuar con el proselitismo durante los 90 días que dura la campaña electoral -comienza el 18 de marzo-.
El proselitismo, según la LEPP, son las actividades y acciones de formación y capacitación, organización y difusión de su ideología, programa político, propuesta política, posiciones políticas, convocatorias y cualquier otra actividad referida al funcionamiento de las organizaciones políticas.
La estretagia
Las agrupaciones prevén llegar a más ciudadanos por medio de la promoción de su símbolo y la invitación a afiliarse -proselitismo-.
Contratar a los medios de comunicación y empresas de publicidad con ese fin, no está prohibido y no requiere que las entidades privadas estén registradas en el TSE.
Elmer Palencia, fiscal del partido Valor, pidió a los magistrados una aclaración sobre este aspecto, y en qué gastos de los partidos debe ser reportado.
El director de la Unidad de Fiscalización del TSE, Giovanni Rodríguez, aseguró que ese no sería un gasto de campaña, sino administrativo o de actividades permanentes.
El fiscal de Unidos, Alex Franco, planteó que las empresas de publicidad le han expresado su disponibilidad a seguir permitiendo colocar anuncios, sin embargo, temen ser sancionados.
Los fiscales solicitaron al Tribunal emitir una resolución o una nota donde informen sobre la posibilidad de los partidos de contratar espacios para proselitismo.