El vicepresidente de los Estados Unidos, Mike Pence, fue el último en animar a la multitud que esperaba que Donald Trump, lanzara oficialmente su campaña por la reelección en 2020. En Orlando, pidió: “Necesitamos cuatro años más en la Casa Blanca. Cuatro años más significan más empleo, más jueces, más apoyo para nuestros soldados. Y hacen falta al menos otros cuatro años para terminar de limpir este pantano”, en alusión a Washington DC.
“Al comenzar la campaña, los insto a que traigan su entusiasmo y su fe”, siguió. “Vamos a reelegir a este presidente”. Anunció, entonces, la entrada de Trump: “No tienen que creerme a mí. Porque ahora es nuestro gran honor y privilegio presentarles a nuestros amigos, la primera dama y el presidente de los Estados Unidos”. Melania Trump, en un vestido amarillo de mangas amplias, y Trump de traje azul oscuro con corbata roja, subieron al escenerio.
Horas antes de presentarse en el Amway Center, Trump tuiteó: “¡Vean lo que está pasando en Orlando, Florida, ahora mismo! La gente nunca ha visto nada igual (a menos que toques una guitarra). Va a ser salvaje. ¡Los veo luego!”. Si hace cuatro años y dos días muchos ironizaron sobre su anuncio, frente a una pequeña multitud, en la Torre Trump, ahora lo hizo en un estadio para 20 mil personas.
El mitin de Trump en Orlando (Florida) llega justo después de que su campaña despidiera a varios encuestadores cuyos sondeos internos, filtrados a la prensa, contenían datos desalentadores sobre las opciones de reelección del presidente en varios estados clave.
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