José Alfredo Marroquín Zamora, de 30 años, fue condenado a 12 años y 4 meses de prisión inconmutables por poseer y difundir pornografía infantil.
El Ministerio Público (MP) informó que el Tribunal de Sentencia Penal de Delitos de Femicidio dictó la sentencia y además le impuso una multa de Q50 mil.
La Fiscalía contra la Trata de Personas del MP realizó la investigación y presentó las pruebas que evidenciaron que Marroquín Zamora cometió los delitos de comercialización o difusión de pornografía y posesión de material pornográfico con circunstancias especiales de agravación.
“El material pornográfico que se le incautó era de menores de edad”, manifestó la Fiscalía contra la Trata de Personas.
Capturado en Villa Canales
Marroquín Zamora fue aprehendido el 26 de junio de 2018, luego de una investigación que realizó la Unidad contra la Pornografía Infantil de la Fiscalía contra la Trata de Personas, en una vivienda de Santa Elena Barillas, Villa Canales.
En las investigaciones los fiscales establecieron que el condenado difundía material pornográfico de menores que almacenaba en dispositivos electrónicos secuestrados el día de su captura.
El sindicado tenía un teléfono celular en el cual se visualizaban cinco videos con contenido de pornografía de infantil.
La orden de allanamiento fue girada por el Juzgado de Primera Instancia Penal de San Marcos de fechada el 20 de junio del 2018.
Datos de trata
La Oficina de la Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, informó que el 30% de las víctimas detectadas de la Trata de Personas son niños, con fines de explotación sexual, trabajo forzado y otras formas de explotación.
Además, señala que la trata constituye un delito global que vulnera los derechos fundamentales de hombres, mujeres y menores de edad.
Agregó que las víctimas centroamericanas han sido identificadas en los Estados Unidos, Canadá, Japón, América del Sur y en la Unión Europea, por mencionar algunas zonas.
“De igual modo estos flujos extra regionales se ven acompañados por un elevado número de víctimas centroamericanas y caribeñas dentro de la misma región, lo cual representa también un reto para las autoridades”, comentó esa oficina.
José Alfredo Marroquín Zamora, de 30 años, fue condenado a 12 años y 4 meses de prisión inconmutables por poseer y difundir pornografía infantil.
El Ministerio Público (MP) informó que el Tribunal de Sentencia Penal de Delitos de Femicidio dictó la sentencia y además le impuso una multa de Q50 mil.
La Fiscalía contra la Trata de Personas del MP realizó la investigación y presentó las pruebas que evidenciaron que Marroquín Zamora cometió los delitos de comercialización o difusión de pornografía y posesión de material pornográfico con circunstancias especiales de agravación.
“El material pornográfico que se le incautó era de menores de edad”, manifestó la Fiscalía contra la Trata de Personas.
Capturado en Villa Canales
Marroquín Zamora fue aprehendido el 26 de junio de 2018, luego de una investigación que realizó la Unidad contra la Pornografía Infantil de la Fiscalía contra la Trata de Personas, en una vivienda de Santa Elena Barillas, Villa Canales.
En las investigaciones los fiscales establecieron que el condenado difundía material pornográfico de menores que almacenaba en dispositivos electrónicos secuestrados el día de su captura.
El sindicado tenía un teléfono celular en el cual se visualizaban cinco videos con contenido de pornografía de infantil.
La orden de allanamiento fue girada por el Juzgado de Primera Instancia Penal de San Marcos de fechada el 20 de junio del 2018.
Datos de trata
La Oficina de la Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, informó que el 30% de las víctimas detectadas de la Trata de Personas son niños, con fines de explotación sexual, trabajo forzado y otras formas de explotación.
Además, señala que la trata constituye un delito global que vulnera los derechos fundamentales de hombres, mujeres y menores de edad.
Agregó que las víctimas centroamericanas han sido identificadas en los Estados Unidos, Canadá, Japón, América del Sur y en la Unión Europea, por mencionar algunas zonas.
“De igual modo estos flujos extra regionales se ven acompañados por un elevado número de víctimas centroamericanas y caribeñas dentro de la misma región, lo cual representa también un reto para las autoridades”, comentó esa oficina.