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Halterofilia, Segunda Parte

Warren Orbaugh
02 de septiembre, 2019

En mi entrega anterior narré sobre los forzudos que iniciaron la halterofilia: Attila (Ludwig Durlacher) quien inventó las halteras de barra con bolas o discos en los extremos; Sandow (Friedrich Wilhelm Müller) quien popularizó la cultura física por medio de sus seis escuelas y publicaciones, recomendando la gimnasia con pesas; Louis Cyr, el canadiense, que fue nombrado el hombre más fuerte del mundo; y Arthur Saxon (Otto Henning) quien junto a sus hermanos Herman y Kurt, asombró al mundo con su increíble fuerza, y quien escribió un libro explicando la técnica del levantamiento de pesas.  También mencioné que para finales del siglo XIX, el levantamiento de pesas era uno de los entretenimientos más populares en Europa y Norteamérica. Los forzudos eran atletas y en parte actores que inspiraban respeto y admiración de sus audiencias. Y aunque en esa época se iniciaron las competencias amateur entre atletas aficionados, sin clasificarlos por peso corporal, declarando a Edward Lawrence Levy de Inglaterra primer campeón mundial en marzo de 1891, no fue sino hasta en las Olimpiadas de Atenas de 1896 que aparece la halterofilia como deporte olímpico.

En los primeros juegos olímpicos los levantamientos eran parte de las pruebas de pista y campo.  Eran algo diferentes de los que son hoy. En un inicio, los levantadores competían en levantamiento a una mano y levantamiento a dos manos.  El ganador del levantamiento, arranque a una mano, en Atenas, fue un discípulo de Sandow, el escoces Launceston Elliot, de Gran Bretaña, alzando 156 libras.  El ganador del levantamiento, cargado limpio y envión a dos manos, fue el danés Viggo Jensen, alzando 245 libras, mismo peso levantado por Elliot. Jensen fue declarado ganador porque el jurado apreció que la forma de Jensen fue mejor que la de Elliot. 

No se volvió a dar la competencia de levantamiento de pesas en los juegos olímpicos sino hasta las Olimpiadas de 1920 en Amberes, Bélgica.  Sin embargo si se llevaron a cabo competencias mundiales durante ese lapso. El parisino Pierre Bonnes, de 1.73 metros de estatura y 200 libras de peso, ganó el Campeonato Mundial de 1903 y el de 1905.  En 1898 impuso el record para el arranque a una mano con 188 libras. Introdujo el arranque a dos manos con un agarre amplio efectuando una tijera. Fue el primer hombre en levantar 250 libras en este estilo.  Pero, cuando les mostró su estilo a un grupo de destacados forzudos alemanes, estos se rieron de él diciendo que nadie levantaría mucho peso de esa manera y que era una tontería continuar usándolo. No obstante, en marzo de 1940, el norteamericano Steve Stanko, de 1.80 metros de estatura y 223 libras de peso, estableció un record mundial en el arranque en tijera de 301½ libras.

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El arranque consiste en elevar la haltera, efectuando una “tijera” (estilo francés) o una “agachada” (estilo alemán), debiendo llegar a la completa extensión de los brazos en un solo movimiento.  En el estilo francés o de tijera, se tira hacia arriba lo más alto posible y se desplazan los pies rápidamente, uno hacia adelante y el otro hacia atrás en la forma más larga posible, evitando que la rodilla toque el piso.  En el estilo alemán o agachada, se tira hacia arriba lo más alto posible y rápidamente se sienta uno en cuclillas debajo de la barra. Inmediatamente después, en ambos estilos, el atleta se incorpora hasta estar totalmente erecto y quieto demostrando control sobre el peso.

Los dos estilos de arranque, la agachada y la tijera, fueron durante un tiempo punto de controversia entre los levantadores alemanes y franceses hasta que Francia consiguió el control completo de la Federación de Halterofilia.  En una competencia en Alemania entre las dos naciones, los alemanes descalificaron a los levantadores que hicieron arranque en tijera, y en la próxima competencia en Francia, los franceses en represalia, descalificaron a los atletas que hicieron el arranque en agachada.  En el Campeonato Mundial de 1931 en Luxemburgo, Moktar Hussein perdió su posibilidad de ganar el título mundial por traer atrás su pie delantero en el arranque en tijera. Fue hasta en 1932 que los alemanes finalmente consideraron legal el arranque en tijera. Pero cuando la Federación Francesa reescribió las reglas en 1935, insertaron una clausula con la esperanza de desincentivar a los levantadores de hacer el arranque en agachada al convertir el levantamiento en ilegal si el levantador fallaba en incorporarse inmediatamente, algo que es muy difícil para un levantador en cuclillas profunda.

En los juegos olímpicos de Amberes los levantamientos fueron el arranque a una mano, cargado limpio y envión a una y dos manos.  Los máximos pesos que el hombre ha levantado sobre su cabeza se han logrado mediante el estilo de cargado limpio y envión. Este se descompone en dos etapas perfectamente definidas: cargar el peso hasta la línea de los hombros y envión del mismo por sobre la cabeza hasta extender totalmente los brazos.  El primer tiempo, cargado limpio, también llamado “cargado estilo inglés”, es el menos complicado de los dos. Requiere de un potente despegue del peso y un buen tirón de espalda coordinado con una tijera (estilo francés) o agachada (estilo alemán) que permite recibir y fijar el peso en los hombros para luego incorporarse.  El segundo tiempo, más dificultoso por estar el peso más alejado del suelo y por tanto, tener el centro de gravedad más elevado, consiste en enviarlo perfectamente por encima de la cabeza desplazando el cuerpo bajo la barra en una tijera corta (estilo francés) para evitar que el peso obligue a tocar la rodilla en el suelo y mantener los brazos y hombros perfectamente trabados, recoger el pie delantero primero y luego el trasero hasta la posición vertical y así demostrar dominio del peso.  Se distingue el “cargado inglés o limpio” del estilo usado con preferencia por los forzudos profesionales del continente denominado “cargado continental”. En el continental se carga el peso hasta el abdomen primero y luego doblando las rodillas y enderezarlas bruscamente acompañado de un fuerte tirón con los brazos llevando el peso a los hombros, en lugar de cargarlo directamente sin tocar el cuerpo (limpiamente) hasta llevarlo a los hombros como en el estilo inglés.

En los juegos olímpicos de 1924 se añadieron dos levantamientos más a la justa: el arranque a dos manos y el fuerza a dos manos, llamado así por ser la potencia de los brazos y hombros el factor preponderante en su ejecución, al prohibirse el uso de cualquier ayuda o impulso que no provenga exclusivamente de la fuerza muscular de éstos.  El Levantamiento de Pesas Olímpico se fue refinando al paso de los años, añadiéndole levantamientos y después removiéndolos. En 1928 se eliminaron los levantamientos a una mano. Luego, en nombre de la equidad y la justicia se estableció la clasificación por pesos en 1932, de tal manera que ya no competía un participante de 300 libras de peso corporal contra uno de 150 libras de peso corporal.  En 1950, el levantamiento de peso muerto, el de fuerza en banca y el de sentadilla eran también parte de la competencia del levantamiento olímpico. El levantamiento de peso muerto consiste en despegar la haltera del suelo desde la posición de agachada y llevarla a una posición en la que el levantador se encuentre erecto. En el levantamiento de fuerza en banca o fuerza supina, el atleta acostado sobre el banco toma la barra con una abertura ligeramente más abierta que el ancho de los hombros, flexiona llevando la barra a la línea del esternón y presiona la barra hasta extender los brazos a la señal del árbitro.  Y en el levantamiento de sentadilla, el atleta con la barra sobre la espalda, detrás de la cabeza, flexiona las piernas con las plantas de los pies sobre el suelo, bajando hasta que la parte superior de sus muslos estén paralelos al piso y regresa enderezándose hasta la posición vertical. Posteriormente estos tres levantamientos fueron quitados y reclasificados en un nuevo deporte llamado “levantamiento de potencia”.

Debido a la dificultad de juzgar si el levantamiento de cargado limpio y fuerza era ejecutado sin infringir las reglas, ya que los atletas podían inclinarse hacia atrás transformando el fuerza de hombros casi en fuerza supina, las organizaciones de Levantamiento Olímpico decidieron quitar este levantamiento del deporte después de los Juegos Olímpicos de Múnich en 1972.  Y atendiendo a la igualdad de géneros, en las Olimpiadas del 2000 en Sídney compitieron por primera vez las mujeres.

Hoy la clasificación por pesos para hombres y mujeres es:


HOMBRESMUJERES
PLUMA61 kg (134 lb)49 kg (108 lb)
LIGERO67 kg (148 lb)55kg (121 lb)
MEDIO73 kg (161 lb)59 kg (130 lb)
SEMIPESADO81 kg (179 lb)64 kg (141 lb)
PESADO LIGERO96 kg (212 lb)76 kg (168 lb)
PESADO109 kg (240 lb)87 kg (192lb)
SUPERPESADO109 kg + (240 lb +)87 kg + (192 lb+)

Continuará.


Halterofilia, Segunda Parte

Warren Orbaugh
02 de septiembre, 2019

En mi entrega anterior narré sobre los forzudos que iniciaron la halterofilia: Attila (Ludwig Durlacher) quien inventó las halteras de barra con bolas o discos en los extremos; Sandow (Friedrich Wilhelm Müller) quien popularizó la cultura física por medio de sus seis escuelas y publicaciones, recomendando la gimnasia con pesas; Louis Cyr, el canadiense, que fue nombrado el hombre más fuerte del mundo; y Arthur Saxon (Otto Henning) quien junto a sus hermanos Herman y Kurt, asombró al mundo con su increíble fuerza, y quien escribió un libro explicando la técnica del levantamiento de pesas.  También mencioné que para finales del siglo XIX, el levantamiento de pesas era uno de los entretenimientos más populares en Europa y Norteamérica. Los forzudos eran atletas y en parte actores que inspiraban respeto y admiración de sus audiencias. Y aunque en esa época se iniciaron las competencias amateur entre atletas aficionados, sin clasificarlos por peso corporal, declarando a Edward Lawrence Levy de Inglaterra primer campeón mundial en marzo de 1891, no fue sino hasta en las Olimpiadas de Atenas de 1896 que aparece la halterofilia como deporte olímpico.

En los primeros juegos olímpicos los levantamientos eran parte de las pruebas de pista y campo.  Eran algo diferentes de los que son hoy. En un inicio, los levantadores competían en levantamiento a una mano y levantamiento a dos manos.  El ganador del levantamiento, arranque a una mano, en Atenas, fue un discípulo de Sandow, el escoces Launceston Elliot, de Gran Bretaña, alzando 156 libras.  El ganador del levantamiento, cargado limpio y envión a dos manos, fue el danés Viggo Jensen, alzando 245 libras, mismo peso levantado por Elliot. Jensen fue declarado ganador porque el jurado apreció que la forma de Jensen fue mejor que la de Elliot. 

No se volvió a dar la competencia de levantamiento de pesas en los juegos olímpicos sino hasta las Olimpiadas de 1920 en Amberes, Bélgica.  Sin embargo si se llevaron a cabo competencias mundiales durante ese lapso. El parisino Pierre Bonnes, de 1.73 metros de estatura y 200 libras de peso, ganó el Campeonato Mundial de 1903 y el de 1905.  En 1898 impuso el record para el arranque a una mano con 188 libras. Introdujo el arranque a dos manos con un agarre amplio efectuando una tijera. Fue el primer hombre en levantar 250 libras en este estilo.  Pero, cuando les mostró su estilo a un grupo de destacados forzudos alemanes, estos se rieron de él diciendo que nadie levantaría mucho peso de esa manera y que era una tontería continuar usándolo. No obstante, en marzo de 1940, el norteamericano Steve Stanko, de 1.80 metros de estatura y 223 libras de peso, estableció un record mundial en el arranque en tijera de 301½ libras.

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El arranque consiste en elevar la haltera, efectuando una “tijera” (estilo francés) o una “agachada” (estilo alemán), debiendo llegar a la completa extensión de los brazos en un solo movimiento.  En el estilo francés o de tijera, se tira hacia arriba lo más alto posible y se desplazan los pies rápidamente, uno hacia adelante y el otro hacia atrás en la forma más larga posible, evitando que la rodilla toque el piso.  En el estilo alemán o agachada, se tira hacia arriba lo más alto posible y rápidamente se sienta uno en cuclillas debajo de la barra. Inmediatamente después, en ambos estilos, el atleta se incorpora hasta estar totalmente erecto y quieto demostrando control sobre el peso.

Los dos estilos de arranque, la agachada y la tijera, fueron durante un tiempo punto de controversia entre los levantadores alemanes y franceses hasta que Francia consiguió el control completo de la Federación de Halterofilia.  En una competencia en Alemania entre las dos naciones, los alemanes descalificaron a los levantadores que hicieron arranque en tijera, y en la próxima competencia en Francia, los franceses en represalia, descalificaron a los atletas que hicieron el arranque en agachada.  En el Campeonato Mundial de 1931 en Luxemburgo, Moktar Hussein perdió su posibilidad de ganar el título mundial por traer atrás su pie delantero en el arranque en tijera. Fue hasta en 1932 que los alemanes finalmente consideraron legal el arranque en tijera. Pero cuando la Federación Francesa reescribió las reglas en 1935, insertaron una clausula con la esperanza de desincentivar a los levantadores de hacer el arranque en agachada al convertir el levantamiento en ilegal si el levantador fallaba en incorporarse inmediatamente, algo que es muy difícil para un levantador en cuclillas profunda.

En los juegos olímpicos de Amberes los levantamientos fueron el arranque a una mano, cargado limpio y envión a una y dos manos.  Los máximos pesos que el hombre ha levantado sobre su cabeza se han logrado mediante el estilo de cargado limpio y envión. Este se descompone en dos etapas perfectamente definidas: cargar el peso hasta la línea de los hombros y envión del mismo por sobre la cabeza hasta extender totalmente los brazos.  El primer tiempo, cargado limpio, también llamado “cargado estilo inglés”, es el menos complicado de los dos. Requiere de un potente despegue del peso y un buen tirón de espalda coordinado con una tijera (estilo francés) o agachada (estilo alemán) que permite recibir y fijar el peso en los hombros para luego incorporarse.  El segundo tiempo, más dificultoso por estar el peso más alejado del suelo y por tanto, tener el centro de gravedad más elevado, consiste en enviarlo perfectamente por encima de la cabeza desplazando el cuerpo bajo la barra en una tijera corta (estilo francés) para evitar que el peso obligue a tocar la rodilla en el suelo y mantener los brazos y hombros perfectamente trabados, recoger el pie delantero primero y luego el trasero hasta la posición vertical y así demostrar dominio del peso.  Se distingue el “cargado inglés o limpio” del estilo usado con preferencia por los forzudos profesionales del continente denominado “cargado continental”. En el continental se carga el peso hasta el abdomen primero y luego doblando las rodillas y enderezarlas bruscamente acompañado de un fuerte tirón con los brazos llevando el peso a los hombros, en lugar de cargarlo directamente sin tocar el cuerpo (limpiamente) hasta llevarlo a los hombros como en el estilo inglés.

En los juegos olímpicos de 1924 se añadieron dos levantamientos más a la justa: el arranque a dos manos y el fuerza a dos manos, llamado así por ser la potencia de los brazos y hombros el factor preponderante en su ejecución, al prohibirse el uso de cualquier ayuda o impulso que no provenga exclusivamente de la fuerza muscular de éstos.  El Levantamiento de Pesas Olímpico se fue refinando al paso de los años, añadiéndole levantamientos y después removiéndolos. En 1928 se eliminaron los levantamientos a una mano. Luego, en nombre de la equidad y la justicia se estableció la clasificación por pesos en 1932, de tal manera que ya no competía un participante de 300 libras de peso corporal contra uno de 150 libras de peso corporal.  En 1950, el levantamiento de peso muerto, el de fuerza en banca y el de sentadilla eran también parte de la competencia del levantamiento olímpico. El levantamiento de peso muerto consiste en despegar la haltera del suelo desde la posición de agachada y llevarla a una posición en la que el levantador se encuentre erecto. En el levantamiento de fuerza en banca o fuerza supina, el atleta acostado sobre el banco toma la barra con una abertura ligeramente más abierta que el ancho de los hombros, flexiona llevando la barra a la línea del esternón y presiona la barra hasta extender los brazos a la señal del árbitro.  Y en el levantamiento de sentadilla, el atleta con la barra sobre la espalda, detrás de la cabeza, flexiona las piernas con las plantas de los pies sobre el suelo, bajando hasta que la parte superior de sus muslos estén paralelos al piso y regresa enderezándose hasta la posición vertical. Posteriormente estos tres levantamientos fueron quitados y reclasificados en un nuevo deporte llamado “levantamiento de potencia”.

Debido a la dificultad de juzgar si el levantamiento de cargado limpio y fuerza era ejecutado sin infringir las reglas, ya que los atletas podían inclinarse hacia atrás transformando el fuerza de hombros casi en fuerza supina, las organizaciones de Levantamiento Olímpico decidieron quitar este levantamiento del deporte después de los Juegos Olímpicos de Múnich en 1972.  Y atendiendo a la igualdad de géneros, en las Olimpiadas del 2000 en Sídney compitieron por primera vez las mujeres.

Hoy la clasificación por pesos para hombres y mujeres es:


HOMBRESMUJERES
PLUMA61 kg (134 lb)49 kg (108 lb)
LIGERO67 kg (148 lb)55kg (121 lb)
MEDIO73 kg (161 lb)59 kg (130 lb)
SEMIPESADO81 kg (179 lb)64 kg (141 lb)
PESADO LIGERO96 kg (212 lb)76 kg (168 lb)
PESADO109 kg (240 lb)87 kg (192lb)
SUPERPESADO109 kg + (240 lb +)87 kg + (192 lb+)

Continuará.