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Apetito chino por animales salvajes sobrevivirá quizá al coronavirus

Reuters
17 de febrero, 2020

Durante las últimas dos semanas, la policía china ha allanado casas, restaurantes y mercados informales ​​en todo el país.

En total se han producido unos 700 arrestos por violar la prohibición temporal de capturar, vender o comer animales salvajes.

La magnitud de la ofensiva, en la que se han recuperado casi 40 mil animales, incluidas ardillas, comadrejas y jabalíes, sugiere que el gusto de China por comer fauna silvestre y usar sus partes con fines medicinales no se irá de la noche a la mañana, pese a los posibles vínculos con el nuevo coronavirus.

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Los comerciantes que venden de forma legal carne de burro, perro, venado, cocodrilo y otras dijeron que planean volver al negocio en cuanto los mercados vuelvan a abrir.

Puedes leer: China lanza la producción del primer fármaco contra el nuevo coronavirus

Meseros de un restaurante en China esperan comensales, quienes por temor al coronavirus no llegan. (Foto República: Reuters)

“Me gustaría vender cuando se levante la prohibición”, comentó Gong Jian, que dirige una tienda de vida silvestre por internet y opera locales en la región autónoma Mongolia Interior.

“A la gente le gusta comprar animales salvajes. Se compran para comer o regalar porque te da prestigio”.

Gong dijo que está almacenando carne de cocodrilo y ciervo en grandes congeladores, pero que tendrá que matar todas las codornices que estuvo criando. Los supermercados ya no compran sus huevos y no se pueden comer después de congelarlos.

Los científicos sospechan, pero no han demostrado, que el nuevo coronavirus pasó desde los murciélagos a los humanos por intermedio de pangolines, un pequeño mamífero devorador de hormigas cuyas escamas son muy apreciadas en la medicina tradicional china.

Otras noticias: ¡Así detienen a un ladrón!

Trabajadores de un hospital en China, tratan con un paciente infectado de coronavirus. (Foto República: Reuters)

Algunas de las primeras infecciones fueron halladas en personas que estuvieron expuestas al mercado de mariscos de Wuhan, donde se vendían murciélagos, serpientes, civetas y otros animales salvajes.

China clausuró temporalmente todos los sitios en enero, advirtiendo que comer animales salvajes representaba una amenaza para la salud y la seguridad públicas.

No obstante, esto puede no ser suficiente para cambiar gustos o actitudes profundamente arraigados en la cultura y la historia del país.

“A los ojos de muchas personas, los animales viven para el hombre, no comparten la Tierra con el hombre”, dijo Wang Song, un investigador retirado de Zoología de la Academia de Ciencias de China.

Debate por comer animales

La epidemia, por la que han muerto más de mil 600 personas en China, revivió el debate sobre el uso de la vida silvestre para la alimentación y la medicina. En 2003 hubo un brote de SARS (Síndrome Respiratorio Agudo Severo), que científicos creen pasó desde los murciélagos a los humanos a través de las civetas.

Muchos académicos, ambientalistas y ciudadanos chinos se han unido a grupos conservacionistas internacionales para pedir una prohibición permanente del comercio de vida silvestre y el cierre de los mercados donde se venden animales salvajes.

El debate en internet en el interior del país -probablemente influido por personas más jóvenes- ha favorecido en gran medida una prohibición permanente.

Es un mal hábito atrevernos a comer cualquier cosa”, dijo un usuario llamado Sun en un foro de discusión de noticias en el sitio web chino Sina.

“Debemos dejar de comer vida silvestre y los que lo hagan deben ser condenados a la cárcel”.

Sin embargo, a una minoría de chinos todavía le gusta comer animales salvajes con la creencia de que es saludable, lo que crea la demanda que sustenta mercados como el de Wuhan y un próspero negocio de ventas por internet, en su mayoría ilegal.

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La magnitud de la ofensiva, en la que se han recuperado casi 40 mil animales, incluidas ardillas, comadrejas y jabalíes, sugiere que el gusto de China por comer fauna silvestre y usar sus partes con fines medicinales no se irá de la noche a la mañana, pese a los posibles vínculos con el nuevo coronavirus.

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Es un mal hábito atrevernos a comer cualquier cosa”, dijo un usuario llamado Sun en un foro de discusión de noticias en el sitio web chino Sina.

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