Política
Política
Empresa
Empresa
Investigación y Análisis
Investigación y Análisis
Internacional
Internacional
Opinión
Opinión
Inmobiliaria
Inmobiliaria
Agenda Empresarial
Agenda Empresarial

El ejemplo de cómo Guayaquil venció al coronavirus sigue dando la vuelta al mundo

Luis Gonzalez
23 de julio, 2020

Guayaquil, en Ecuador, “se había convertido un infierno en la tierra”, dice la empresaria María Gloria Alarcón, cuando el brote del coronavirus covid-19 hizo colapsar al sistema de salud y causó hasta 460 muertos en un solo día.

Durante los primeros 15 días del brote, la mitad del personal médico se contagió y tampoco escaparon las fuerzas de seguridad y justicia, así como otras personas que prestan servicios esenciales en la ciudad.

La crisis llevó a un grupo de empresarios, médicos y otros sectores de la sociedad, a conformar un Mesa Técnica que actuó pronto para proteger a quienes estaban en primera fila.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

Luego atacaron la enfermedad con medicina y el tercer paso fue dotar de alimentos a las personas que no podían salir de sus viviendas, señala Alarcón.

Las autoridades locales de Guayaquil se sumaron a la iniciativa y toda la ciudad, en conjunto, se sumó al esfuerzo que permitió reducir la cifra de más de 400 muertos diarios a dos y hasta cero decesos.

La empresaria y líder cívica de Guayaquil, Ecuador, María Gloria Alarcón, cuenta la experiencia de esa ciudad de 2.2 millones de habitantes contra la pandemia del covid-19.

En medicina, la clave fue el uso de la hidroxicloroquina, dijo Alarcón, quien señala que el tema fue manejado por los médicos, bajo prescripción de ellos.

“El resultado está ahí, fue la medicina y todo lo que se hizo”, enfatiza la líder empresarial de Guayaquil.

En Guatemala, República. entrevistó al empresario y diputado Henry Kronfle Kozhaya para que explicara cómo Guayaquil logró reducir el número de fallecidos a cero. El tema sigue causando mucho interés en el continente y otras naciones del mundo, así como instituciones como la Cruz Roja y la Iglesia Católica.

El interés de Panamá por Guayaquil

En Panamá, los medios de comunicación también pusieron sus ojos en la ciudad de Ecuador. A continuación se reproduce la entrevista realizada por La Nación a la empresaria María Gloria Alarcón.

¿Qué ocurrió en Guayaquil a principios de abril?

Guayaquil fue una de las primeras ciudades del mundo atacadas con una carga viral de covid-19 muy alta y contagiosa. En el Ecuador había muy poca experiencia y la capacidad hospitalaria se saturó. Muchas personas no llegaban a los hospitales, y fallecían tanto en sus viviendas, como en las calles. Era el infierno en la Tierra.

¿Cuál era la tasa de mortalidad en la ciudad?

Bueno, hubo un día en el que se reportaron 460 fallecimientos solo por coronavirus, cuando en la ciudad antes de la pandemia el promedio de defunciones era de 35 por diferentes causas. Tuvimos días en los que llegamos casi a los 500 decesos en total. Además, tuvimos que instalar carpas porque los hospitales se desbordaron. Unos fallecían por los síntomas del virus y otros porque la atención llegaba tarde. Incluso, en la primera semana resultó infectado el 40% del personal de Salud, así como de la Policía Nacional.

¿Cómo surge el Comité de Emergencia?

En principio fue una iniciativa del exalcalde de Guayaquil Jaime Nebot y se le unieron empresarios, sociedad civil y médicos. Nos agrupamos y formamos muy rápido un fideicomiso, así como una campaña para recibir fondos de manera que fueran manejados con transparencia y fueran auditados. Lo primero que hicimos fue proteger a la primera línea en la batalla: médicos, policías, entre otros. Además, trabajamos en conjunto con el Municipio de Guayaquil. Todos nos olvidamos de los protagonismos y como la situación era tan dramática comenzamos a trabajar por sobrevivencia.

¿Qué rol debe jugar la sociedad civil en esta lucha?

En base a nuestra experiencia es vital. Puede ser que por mandato las autoridades tengan la responsabilidad de la salud pública, pero solas no pueden hacer nada. Su aporte va por dos lados: en el ser responsable con el cumplimiento de las medidas sanitarias y por el otro ayudar en la solución del problema en la medida de sus posibilidades. La única manera de aplanar la curva fue con el aporte de todos.

¿Cómo se controla este agresivo virus?

Protegiendo a la primera línea, entre ellos a los médicos y los policías. Segundo, asistir a la población con alimentos en tiempo oportuno, porque en el caso de Guayaquil un 60% de su población laboral lo hace en el mercado informal y eso ayudó a que se cumpliera con el confinamiento. En esto nos ayudó la Iglesia católica, el Banco de Alimentos y las Fuerzas Armadas. Por último, e igual de importante que las anteriores, curar a los enfermos, para evitar más defunciones.

¿Cuál es la situación actual de Guayaquil?

Ahora hay entre una o dos muertes al día por coronavirus y tenemos un 60% de capacidad hospitalaria libre. De hecho, a Guayaquil ahora mismo llegan pacientes contagiados de otras ciudades. Hay toque de queda desde las 11:00 p.m. a 5:00 a.m.

¿Cuánto daño le hace la falta de transparencia a esta batalla contra el covid-19?

Es muy perjudicial y peor en el escenario en el que nos encontramos. La corrupción hace mucho daño en esta lucha; cada dólar significa vidas. En el Ecuador cuando comenzó la pandemia surgieron denuncias de corrupción, que generaron investigaciones. Con esto el Estado pierde tiempo y recursos, ambos muy importante en la lucha contra el coronavirus.

¿Qué recomendación le puede dar a Panamá para controlar la Covid-19?

Les digo que esto es serio. Muchas veces solo lo toman en serio quienes pierden a un ser querido. Para suerte de Panamá la tasa de letalidad es más baja que la de Guayaquil, pero sino tienen el cuidado que se debe tener esto se puede prolongar por mucho más tiempo con las consecuencias personales, de salud y económicas que nadie las quiere. Esto se trata de ganar tiempo y estar sano hasta que exista una vacuna.

El ejemplo de cómo Guayaquil venció al coronavirus sigue dando la vuelta al mundo

Luis Gonzalez
23 de julio, 2020

Guayaquil, en Ecuador, “se había convertido un infierno en la tierra”, dice la empresaria María Gloria Alarcón, cuando el brote del coronavirus covid-19 hizo colapsar al sistema de salud y causó hasta 460 muertos en un solo día.

Durante los primeros 15 días del brote, la mitad del personal médico se contagió y tampoco escaparon las fuerzas de seguridad y justicia, así como otras personas que prestan servicios esenciales en la ciudad.

La crisis llevó a un grupo de empresarios, médicos y otros sectores de la sociedad, a conformar un Mesa Técnica que actuó pronto para proteger a quienes estaban en primera fila.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

Luego atacaron la enfermedad con medicina y el tercer paso fue dotar de alimentos a las personas que no podían salir de sus viviendas, señala Alarcón.

Las autoridades locales de Guayaquil se sumaron a la iniciativa y toda la ciudad, en conjunto, se sumó al esfuerzo que permitió reducir la cifra de más de 400 muertos diarios a dos y hasta cero decesos.

La empresaria y líder cívica de Guayaquil, Ecuador, María Gloria Alarcón, cuenta la experiencia de esa ciudad de 2.2 millones de habitantes contra la pandemia del covid-19.

En medicina, la clave fue el uso de la hidroxicloroquina, dijo Alarcón, quien señala que el tema fue manejado por los médicos, bajo prescripción de ellos.

“El resultado está ahí, fue la medicina y todo lo que se hizo”, enfatiza la líder empresarial de Guayaquil.

En Guatemala, República. entrevistó al empresario y diputado Henry Kronfle Kozhaya para que explicara cómo Guayaquil logró reducir el número de fallecidos a cero. El tema sigue causando mucho interés en el continente y otras naciones del mundo, así como instituciones como la Cruz Roja y la Iglesia Católica.

El interés de Panamá por Guayaquil

En Panamá, los medios de comunicación también pusieron sus ojos en la ciudad de Ecuador. A continuación se reproduce la entrevista realizada por La Nación a la empresaria María Gloria Alarcón.

¿Qué ocurrió en Guayaquil a principios de abril?

Guayaquil fue una de las primeras ciudades del mundo atacadas con una carga viral de covid-19 muy alta y contagiosa. En el Ecuador había muy poca experiencia y la capacidad hospitalaria se saturó. Muchas personas no llegaban a los hospitales, y fallecían tanto en sus viviendas, como en las calles. Era el infierno en la Tierra.

¿Cuál era la tasa de mortalidad en la ciudad?

Bueno, hubo un día en el que se reportaron 460 fallecimientos solo por coronavirus, cuando en la ciudad antes de la pandemia el promedio de defunciones era de 35 por diferentes causas. Tuvimos días en los que llegamos casi a los 500 decesos en total. Además, tuvimos que instalar carpas porque los hospitales se desbordaron. Unos fallecían por los síntomas del virus y otros porque la atención llegaba tarde. Incluso, en la primera semana resultó infectado el 40% del personal de Salud, así como de la Policía Nacional.

¿Cómo surge el Comité de Emergencia?

En principio fue una iniciativa del exalcalde de Guayaquil Jaime Nebot y se le unieron empresarios, sociedad civil y médicos. Nos agrupamos y formamos muy rápido un fideicomiso, así como una campaña para recibir fondos de manera que fueran manejados con transparencia y fueran auditados. Lo primero que hicimos fue proteger a la primera línea en la batalla: médicos, policías, entre otros. Además, trabajamos en conjunto con el Municipio de Guayaquil. Todos nos olvidamos de los protagonismos y como la situación era tan dramática comenzamos a trabajar por sobrevivencia.

¿Qué rol debe jugar la sociedad civil en esta lucha?

En base a nuestra experiencia es vital. Puede ser que por mandato las autoridades tengan la responsabilidad de la salud pública, pero solas no pueden hacer nada. Su aporte va por dos lados: en el ser responsable con el cumplimiento de las medidas sanitarias y por el otro ayudar en la solución del problema en la medida de sus posibilidades. La única manera de aplanar la curva fue con el aporte de todos.

¿Cómo se controla este agresivo virus?

Protegiendo a la primera línea, entre ellos a los médicos y los policías. Segundo, asistir a la población con alimentos en tiempo oportuno, porque en el caso de Guayaquil un 60% de su población laboral lo hace en el mercado informal y eso ayudó a que se cumpliera con el confinamiento. En esto nos ayudó la Iglesia católica, el Banco de Alimentos y las Fuerzas Armadas. Por último, e igual de importante que las anteriores, curar a los enfermos, para evitar más defunciones.

¿Cuál es la situación actual de Guayaquil?

Ahora hay entre una o dos muertes al día por coronavirus y tenemos un 60% de capacidad hospitalaria libre. De hecho, a Guayaquil ahora mismo llegan pacientes contagiados de otras ciudades. Hay toque de queda desde las 11:00 p.m. a 5:00 a.m.

¿Cuánto daño le hace la falta de transparencia a esta batalla contra el covid-19?

Es muy perjudicial y peor en el escenario en el que nos encontramos. La corrupción hace mucho daño en esta lucha; cada dólar significa vidas. En el Ecuador cuando comenzó la pandemia surgieron denuncias de corrupción, que generaron investigaciones. Con esto el Estado pierde tiempo y recursos, ambos muy importante en la lucha contra el coronavirus.

¿Qué recomendación le puede dar a Panamá para controlar la Covid-19?

Les digo que esto es serio. Muchas veces solo lo toman en serio quienes pierden a un ser querido. Para suerte de Panamá la tasa de letalidad es más baja que la de Guayaquil, pero sino tienen el cuidado que se debe tener esto se puede prolongar por mucho más tiempo con las consecuencias personales, de salud y económicas que nadie las quiere. Esto se trata de ganar tiempo y estar sano hasta que exista una vacuna.